Georgia, un islote de estabilidad entre Rusia y Turqu¨ªa

M¨¢s informaci¨®n

Las dudas sobre Europa crecen en Georgia

Turqu¨ªa suspende temporalmente la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos

Turqu¨ªa y Rusia se reencuentran para afianzarse ante los problemas con la UE

Situado entre Rusia y Turqu¨ªa, el Estado cauc¨¢sico de Georgia es hoy un ¡°islote de estabilidad¡± en el coraz¨®n de un ¡°entorno geogr¨¢fico turbulento¡±. Tedo Jafaridze, el veterano diplom¨¢tico que dirige el Comit¨¦ de Relaciones Exteriores del parlamento de Georgia, describe as¨ª la situaci¨®n que, hoy m¨¢s que en el pasado, obliga a su pa¨ªs -3,5 millones de habitantes- a desplegar ¡°racionalidad¡±, ¡°c¨¢lculo¡± y ¡°pragmatismo¡±.

El intento de golpe de Estado en Turqu¨ªa y la represi¨®n posterior han abierto incertidumbres que pueden afectar a Georgia, entre ellas el eventual acercamiento entre los presidentes Recep Tayyip Erdog¨¢n y Vlad¨ªmir Putin. Georgia, que firm¨® un acuerdo de asociaci¨®n con la UE y aspira a convertirse en miembro de la OTAN, mantiene buenas relaciones con Turqu¨ªa. Con Rusia, sin embargo, Tbilisi rompi¨® sus relaciones diplom¨¢ticas formales en 2008 a consecuencia de la guerra en Osetia del Sur. Junto con Abjazia (en la costa del mar Negro), este territorio rechaz¨® subordinarse a Tbilisi durante la desintegraci¨®n de la URSS y se autoproclam¨® independiente de Georgia. Tras la guerra de 2008, Mosc¨² reconoci¨® a Osetia del Sur y Abjazia como Estados y estableci¨® bases militares en ellos, lo que Georgia considera como una ¡°ocupaci¨®n¡±.

La reuni¨®n de Erdog¨¢n y Putin el 9 de agosto en San Petersburgo podr¨ªa esbozar un nuevo entorno geoestrat¨¦gica para Georgia, cuyos analistas est¨¢n divididos sobre los efectos de un acercamiento de los dos grandes vecinos. En opini¨®n de Jafaridze, es poco probable que Turqu¨ªa salga de la OTAN o deteriore sustancialmente sus relaciones con EEUU y, por otra parte, el acercamiento entre Putin y Erdog¨¢n, si se produce, ser¨¢ limitado por razones de compatibilidad personal. En esta situaci¨®n, dice, ¡°debemos fortalecer a Georgia e institucionalizar la democracia para hacer que ¨¦sta no dependa de quien est¨¢ en el poder¡±. Las elecciones parlamentarias que se celebran el 8 de octubre ser¨¢n una importante pista para el futuro.

¡°Putin intentar¨¢ que Erdog¨¢n eche a perder sus relaciones con Occidente¡±, afirma Peter Mamradze, ex jefe de gabinete presidencial de Georgia. Fue precisamente el presidente Eduard Shevardnadze quien en los a?os noventa firm¨® los acuerdos fronterizos que fijan la frontera actual entre Georgia y Turqu¨ªa en los l¨ªmites establecidos en 1921 por los acuerdos entre Turqu¨ªa de Kemal Ataturk y las rep¨²blicas de la URSS. A diferencia de Georgia, Armenia no ha ratificado aquellos acuerdos con Ankara y su frontera con Turqu¨ªa permanece cerrada. El conflicto del Alto Karabaj entre Azerbaiy¨¢n y Armenia, recrudecido en abril, y las crecientes tensiones internas entre distintos grupos en Armenia son parte de las turbulencias de la zona.

Desde el punto de vista pol¨ªtico Georgia parece haberse estabilizado tras la victoria electoral de la coalici¨®n El Sue?o de Georgia en octubre de 2012. El balance de la presidencia de Mikheil Saakashvili (2004-2013) incluye el uso del terror y la tortura (por el sistema judicial, policial y penitenciario) al servicio de los dirigentes y el desmembramiento territorial tras el ataque a Tsjinvali, la capital de Osetia del Sur en agosto de 2008.

Pese a la inexistencia de relaciones diplom¨¢ticas, el clima entre Tbilisi y Mosc¨² se ha calmado con la marcha de Saakashvili. El comercio bilateral se ha restablecido y el n¨²mero de turistas rusos, que no necesitan visado para viajar a Georgia, se ha disparado (400.000 durante la primera mitad de este a?o, con un aumento del 12%).

Tbilisi avanza en su integraci¨®n euroatl¨¢ntica, pero los Estados occidentales no tienen prisa por completar el proceso, pese a que Georgia cumple de sobra las etapas hacia sus objetivos, afirma Jafaridze. Por intervenci¨®n de Alemania, la UE ha retrasado hasta septiembre la supresi¨®n de los visados para los georgianos.

Inmediatamente despu¨¦s del golpe de Estado en Turqu¨ªa, el primer ministro georgiano Giorgi Kvirikashvili viaj¨® a Ankara donde se reuni¨® con el presidente Erdog¨¢n. Kvirikashvili expres¨® su apoyo a la democracia y el pueblo turco y, durante su visita, Georgia y Turqu¨ªa reafirmaron sus v¨ªnculos pol¨ªticos y econ¨®micos, entre ellos la cooperaci¨®n en el sector de la energ¨ªa y los proyectos vinculados con el oleoducto de Bak¨²-Tbilisi-Ceij¨¢n y gaseoducto de Bak¨²-Tbilisi-Erzurum. Estas conducciones, v¨ªa Georgia, son clave para el tr¨¢nsito de hidrocarburos, alternativo a Rusia, desde el mar Caspio al mercado europeo.

En Ankara, los dirigentes turcos expresaron a los georgianos sus aprensiones ante las escuelas del sistema de Fethullah Gulen que funcionan en Georgia desde la d¨¦cada de los noventa, siendo presidente Eduard Shevardnadze. El c¨®nsul turco en la ciudad portuaria fronteriza de Batumi, Yasin Temizkan, lleg¨® a decir que estas escuelas educan a generaciones al servicio del ¡°terrorismo¡±. Posteriormente, el embajador Zeki Levent Gumruksu, quito hierro al asunto y afirm¨® que el c¨®nsul hab¨ªa sido mal interpretado.

Turqu¨ªa y Rusia son respectivamente el primero y el segundo socio comercial de Georgia y este pa¨ªs es tambi¨¦n un destino apreciado por los turistas turcos, que llegan sobre todo a Batumi, localidad que en el pasado perteneci¨® al imperio otomano. Es en ese centro tur¨ªstico, desarrollado de forma ca¨®tica en ¨¦poca de Saakashvili, los turcos regentan negocios y compran apartamentos. Hoy, algunos georgianos perspicaces creen ver m¨¢s visitantes turcos que de costumbre en Tbilisi, pero en opini¨®n de Mamradze, no habr¨¢ una emigraci¨®n masiva desde Turqu¨ªa y, si la hubiera, Georgia dif¨ªcilmente puede ser el destino, debido a su problem¨¢tica situaci¨®n econ¨®mica. Turqu¨ªa tiene deseos de ampliar su zona de influencia cultural a la zona, pero ¡°Rusia no har¨¢ concesiones en el C¨¢ucaso¡±, afirma Mamradze.