Valls cree que el ¡®burkini¡¯ ¡°no es compatible con los valores de Francia¡±
El primer ministro franc¨¦s respalda a los alcaldes en el veto al ¡®burkini¡¯
En pleno debate sobre el uso del burkini en las playas francesas, el primer ministro franc¨¦s, Manuel Valls, ha brindado su apoyo a los alcaldes que han decidido prohibir esta prenda. En una entrevista al diario La Provence publicada este mi¨¦rcoles, considera que el ba?ador isl¨¢mico, que cubre todo el cuerpo y el cabello, ¡°no es compatible con los valores de Francia y de la Rep¨²blica¡± y por ello ¡°entiende¡± a los regidores de Cannes y otras ciudades costeras que lo han vetado para evitar altercados. Sin embargo, Valls no considera que sea necesario legislar a nivel nacional. Recuerda que el Consejo de Estado, la m¨¢xima autoridad administrativa, debe pronunciarse sobre el tema.
¡°Las playas, como todo espacio p¨²blico, tienen que preservarse de toda reivindicaci¨®n religiosa¡±, apunta el primer ministro socialista. ¡°El burkini no es una nueva gama de ba?adores, una moda. Es la traducci¨®n de un proyecto de contra-sociedad, fundado entre otros en el sometimiento de la mujer¡±, a?ade. En el contexto actual de tensi¨®n provocado por los atentados yihadistas, Valls ¡°entiende¡± y ¡°apoya¡± a los alcaldes que han querido evitar altercados. Pero descarta legislar en ese sentido. ¡°La reglamentaci¨®n general de las prescripciones de las vestimentas no puede ser la soluci¨®n¡±, se?ala. En este sentido recuerda que el Consejo de Estado, al que ha anunciado recurrir el Colectivo Contra la Islamofobia en Francia, tendr¨¢ que pronunciarse ¡°pr¨®ximamente¡±.
Valls recuerda que ya existen dos leyes que proh¨ªben ciertas prendas religiosas: la de 2004, conocida como ley del velo, por la que todo ¡°signos religioso ostentoso¡± est¨¢ proscrito de los centros educativos de primaria y secundaria, y la de 2010 contra el burka, que veta el uso de esta prenda (y cualquiera que cubra el rostro y dificulte as¨ª la identificaci¨®n). Considera, sin embargo, que esta ¨²ltima no se aplica de forma autom¨¢tica, algo que quiere remediar. ¡°Antes de pensar en legislar, haremos aplicar la ley que proh¨ªbe el velo integral en el espacio p¨²blico¡±, se?ala. ¡°Las autoridades musulmanas tambi¨¦n deben condenar el velo integral, condenar los actos de provocaci¨®n que crean las condiciones de la confrontaci¨®n¡±.
El lunes, el ex ministro y senador Jean-Pierre Chev¨¨nement, cuyo nombre suena para dirigir la Fundaci¨®n para el Islam que el Gobierno quiere poner en marcha para controlar la financiaci¨®n de las mezquitas, hab¨ªa pedido a los musulmanes ¡°discreci¨®n¡± en la manifestaci¨®n de fe, unas declaraciones con las que Valls se muestra de acuerdo. ¡°Si queremos construir un Islam de Francia, compatible con nuestros valores, nuestras libertades, la igualdad entre hombres y mujeres, el Islam debe, al igual que las dem¨¢s religiones, aceptar la discreci¨®n en la manifestaci¨®n de sus convicciones religiosas¡±.
El debate sobre el burkini se inscribe dentro de uno m¨¢s amplio y m¨¢s antiguo sobre el lugar de la segunda religi¨®n de Francia dentro de la Rep¨²blica laica. Se estima que hay entre 4 y 5 millones de musulmanes en el pa¨ªs, aunque se desconoce el n¨²mero de practicantes. Tras los ataques de julio en Niza y en Normand¨ªa, Valls hab¨ªa apuntado ya a la necesidad de reformar sus instituciones ¡ªde momento existe el Consejo Franc¨¦s del Culto Musulm¨¢n, creado en 2003, minado por las divisiones internas y rechazado por parte de la poblaci¨®n musulmana en Francia¡ª, y de buscar formas de garantizar la transparencia de la financiaci¨®n del culto y asegurarse de que los imanes sean formados dentro del pa¨ªs.
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