El Estado Isl¨¢mico pierde su ¨²ltima salida al exterior en la frontera turca
Tras los avances kurdos, la ofensiva de las tropas de Ankara deja acorralado al ISIS en su feudo sirio
La intervenci¨®n del Ej¨¦rcito turco ha dejado acorralado por primera vez al Estado Isl¨¢mico (ISIS, por su siglas en ingl¨¦s). Su ¨²nica puerta al mundo exterior ¡ªlos cerca de 20 kil¨®metros de frontera que todav¨ªa controlaba entre Siria y Turqu¨ªa¡ª cay¨® este domingo en manos de las tropas de Ankara, seg¨²n inform¨® el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. La muerte de Abu Mohamed al Adanani, su portavoz y hombre fuerte en Siria, en un ataque el pasado martes le sorprendi¨® en pleno retroceso. Despu¨¦s de haber perdido m¨¢s de un 40% de su califato en Irak, y casi un 10% en territorio sirio, y con 45.000 de sus milicianos ca¨ªdos en combate o en bombardeos a¨¦reos, el ISIS se ve cercado en sus feudos de Mosul y Raqa. Los avances de las fuerzas chi¨ªes y kurdas iraqu¨ªes, en el primer caso, y las ofensivas de rebeldes kurdos sirios y tropas turcas, en el segundo, han expulsado a los yihadistas sun¨ªes de gran parte de sus conquistas de 2014.
¡°Es la ¨²ltima salida que le queda para comunicarse con el resto del mundo, y estamos a punto de cerrarla¡±, advirti¨® ya el jueves un portavoz del Pent¨¢gono. ¡°La coalici¨®n encabezada por Estados Unidos apoya con bombardeos a¨¦reos las operaciones turcas¡±. La estrategia es clara: eliminar las v¨ªas de suministro del ISIS antes de lanzar una ofensiva en toda regla como su basti¨®n y capital,? Raqa, a orillas del r¨ªo ?ufrates. El propio presidente Barack Obama le ha recordado este domingo a su hom¨®logo turco, Recep Tayyip Erdogan, en la cumbre del G-20 en China la necesidad de "terminar el trabajo" contra el Estado Isl¨¢mico. Washington est¨¢ apoyando el avance turco con bombardeos a¨¦reos y con el despligue de un nuevo sistema de cohetes.?
Con la implicaci¨®n de una potencia sun¨ª como Turqu¨ªa en el conflicto parece alejarse tambi¨¦n el peligro de una resistencia numantina de la poblaci¨®n civil sometida al califato, mayoritariamente sun¨ª, ante una invasi¨®n de fuerzas kurdas en sus tierras ancestrales. Ankara utiliza como punta de lanza en las operaciones al hasta ahora semi inactivo Ej¨¦rcito Libre de Siria (ELS). Estados Unidos no quiere volver a cometer tampoco los errores de la guerra de Irak. Ya no basta con derrotar al ISIS, sino que hay que saber gestionar despu¨¦s la victoria.
La ofensiva turca tambi¨¦n busca poner coto al expansionismo kurdo sobre ¨¢reas tradicionalmente sun¨ªes o turcomanas (minor¨ªa procedente de la antigua colonizaci¨®n otomana). El estallido de la tensi¨®n ¨¦tnica solo beneficiar¨ªa a los yihadistas sun¨ªes. ¡°Turqu¨ªa no pretende imponer una zona de exclusi¨®n ¨¢rea en su frontera, sino una zona de exclusi¨®n kurda¡±, pronostica Joshua Landis, editor del portal Syria Comment y veterano analista del conflicto. ¡°Pero esta incursi¨®n¡±, concluye, ¡°eleva las probabilidades de que Siria acabe dividida en ¨¢reas controladas por el Gobierno y por rebeldes ¨¢rabes y kurdos¡±.
El Pent¨¢gono estima que el ISIS cuenta a¨²n con unos 30.000 combatientes. Como se ha observado durante los ¨²ltimos d¨ªas en la batalla de Yarablus, han preferido replegarse a posiciones seguras antes que enfrentarse a los tanques turcos, que contaban con apoyo a¨¦reo y de comandos de fuerzas especiales. Tambi¨¦n optaron por replegarse este s¨¢bado en Al Rai.? Sus milicias no han ofrecido la fiera resistencia que mostraron hace dos a?os ante el avance kurdo en Kobane o, m¨¢s recientemente, Mambij.
Avance de El Asad en la batalla de Alepo
Cuando ya se han cumplido dos a?os del inicio de los bombardeos a¨¦reos de EE UU contra las posiciones del Estado Isl¨¢mico en Siria e Irak y casi un a?o despu¨¦s del comienzo de la intervenci¨®n de Rusia, el tablero de la guerra muestra la consolidaci¨®n del r¨¦gimen ¡ªapoyado por Mosc¨² y Teher¨¢n, junto con aliados chi¨ªes como la guerrilla libanesa de Hezbol¨¢¡ª y de los rebeldes sun¨ªes ¡ªrespaldados por Estados Unidos, Turqu¨ªa, Arabia Saud¨ª y otras monarqu¨ªas del Golfo¨C. Ninguno de los dos bloques parece estar en condiciones de derrocar a la otra parte, como se ha comprobado a lo largo de agosto en Alepo, donde fuerzas rebeldes y gubernamentales han roto sucesivamente el frente enemigo cuando parec¨ªan cercadas. Este domingo las tropas del r¨¦gimen dieron de nuevo un vuelco en el estrat¨¦gico distrito suroccidental de Ramusa, al reconquistar posiciones clave que les hab¨ªan arrebatado hace un mes las milicias rebeledes, informa Reuters. Los barrios orientales controlados por los insurgentes han quedado otra vez cercados.
Los kurdos de las Unidades de Protecci¨®n del Pueblo (YPG), que persiguen instaurar su autogobierno en el noreste del pa¨ªs, libraban en beneficio territorial propio una guerra particular contra el ISIS, pero se mostraban aparentemente neutrales en Alepo. Los yihadistas del califato han presenciado desde posiciones cercanas a la batalla sin tomar parte en los combates.
El acuerdo de alto el fuego apadrinado por EE UU y Rusia que estuvo en vigor en febrero y marzo pasados amparaba a todos los contendientes excepto a los yihadistas del Estado Isl¨¢mico y del Frente al Nusra, denominado ahora Frente de la Conquista tras haber proclamado que romp¨ªa su vasallaje con Al Qaeda. El acoso que han sufrido los grupos calificados por la ONU como ¡°terroristas¡± ha sido sin embargo desigual. ¡°Todas las fuerzas rivales ¡ªlas leales al gobierno del presidente Al Asad, los rebeldes sun¨ªes e incluso los kurdos¡ª parecen haber estado ocupados hasta luchando entre s¨ª en lugar de contra el Estado Isl¨¢mico¡±, recuerda Aron Lund, investigador del centro Carnegie para Oriente Pr¨®ximo. Este experto en el conflicto sirio sostiene que tras la perdida de territorio ¡ªel elemento central y distintivo del yihadismo radical del ISIS¨C, ¡°por primera vez en dos a?os [desde la proclamaci¨®n del califato], la tesis de una ofensiva contra Raqa comienza a resultar factible¡±.
La guerra contra el ISIS queda fuera de las prioridades del r¨¦gimen sirio
En el mapa del conflicto sirio los choques entre las tropas de Bachar el Asad y el Estado Isl¨¢mico son escasos. La c¨²pula militar siria admite entre bastidores que la lucha contra el ISIS no est¨¢ entre sus prioridades. Con recursos limitados, las tropas regulares y las milicias aliadas se centran en recuperar las urbes clave y las arterias que las conectan entre s¨ª. "El ISIS est¨¢ aislado en pleno desierto, sin acceso a Turqu¨ªa y en una zona ampliamente deshabitada y alejada que a su vez es bombardeada a diario por los norteamericanos", admite un alto cargo de la inteligencia militar en Damasco.
Varios desertores, como Nawaf Fares, antiguo embajador sirio en Irak, acusaron al r¨¦gimen de haber radicalizado a la oposici¨®n pac¨ªfica para posteriormente justificar una mayor represi¨®n. "Se facilit¨® su trabajo en la creaci¨®n de brigadas armadas", dijo Fares en 2012 a un diario brit¨¢nico.? Se refer¨ªa a la amnist¨ªa otorgada a cientos de presos islamistas y salafistas por Damasco poco despu¨¦s de que estallaran las protestas populares en marzo de 2011. Entre los amnistiados se encontraba Hasan Alush, futuro l¨ªder de la milicia Jeish el Islam.
Evidentemente, El Asad no ha creado al Estado Isl¨¢mico, pero ha ayudado a su expansi¨®n, de la que se ha beneficiado. Con la comunidad internacional centrada en el ISIS, el principal responsable de las muertes en Siria pasa a un segundo plano ", matiza en una conversaci¨®n telef¨®nica el analista y profesor belga Thomas Pierret.? "La ¨²nica gran ofensiva que ha librado el r¨¦gimen contra ellos ha sido Palmira, lo que result¨® ser una mera maniobra de relaciones p¨²blicas para hacer ver que Siria forma parte de la coalici¨®n internacional contra el terrorismo", apostilla. La oposici¨®n moderada siria ha llegado a tildar la relaci¨®n entre el ISIS y el r¨¦gimen sirio de matrimonio de conveniencia.
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