El alcalde de Londres desaf¨ªa a Corbyn y le recuerda que la prioridad es ganar

Para extraer el mensaje que envi¨® a su partido Sadiq Khan, alcalde de Londres y el laborista que ocupa el cargo de poder m¨¢s alto en la actualidad, no hace falta leer entre l¨ªneas. Casi cada una de las l¨ªneas de su discurso ante el Congreso anual del partido conten¨ªa la misma idea: el laborismo necesita llegar al poder.

Una aparente perogrullada, trat¨¢ndose de una formaci¨®n que ha ostentado el poder durante la mitad de la historia del pa¨ªs desde la Segunda Guerra Mundial, pero que adquiere un significado poderoso, valga la redundancia, teniendo en cuenta los acontecimientos extraordinarios que ha vivido el Partido Laborista en los ¨²ltimos meses.

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El pasado s¨¢bado, Jeremy Corbyn fue reelegido como l¨ªder de la formaci¨®n opositora, aplastando la rebeli¨®n protagonizada por la mayor¨ªa de sus diputados, que consideran que el rumbo emprendido por el veterano socialista es un suicidio electoral. Khan estaba con los rebeldes. Apoy¨® a Owen Smith, el rival de Corbyn.

El alcalde considera ¡ªy as¨ª lo defendi¨® p¨²blicamente durante la campa?a¡ª que Corbyn y su proyecto no est¨¢n en disposici¨®n de devolver al laborismo al poder. Un sondeo la semana pasada revelaba que solo el 16% de los votantes cree que los laboristas pueden ganar con Corbyn las elecciones generales, previstas para 2020, mientras un 65% cree que es m¨¢s probable que ganen los conservadores de Theresa May.

En ese contexto, repetir m¨¢s de 30 veces la palabra ¡°poder¡± en un discurso de apenas 15 minutos constituye un mensaje claro. Sadiq Khan ha experimentado ya la eficacia de la repetici¨®n: todo el mundo sabe que su padre era inmigrante y conduc¨ªa un autob¨²s, porque lo repiti¨® hasta la saciedad en la campa?a que le llev¨® el pasado mes de mayo a la alcald¨ªa de Londres y proporcion¨® al laborismo su m¨¢s importante victoria electoral en diez a?os.

El alcalde felicit¨® a Jeremy Corbyn por su ¡°clara victoria¡±. Esa fue la ¨²nica vez que mencion¨® el nombre del l¨ªder: ni siquiera se acord¨® de ¨¦l cuando dijo que debe haber ¡°un primer ministro laborista en Downing Street¡±.

Ante un partido dividido, que a¨²n pelea por la titularidad de sus esencias, Khan defendi¨® que no es la hora de ¡°hablar y hablar¡±, sino de ¡°avanzar y avanzar¡±. ¡°Es la hora de que todos marchemos unidos hacia el mayor de los premios: devolver al laborismo al poder¡±, dijo. ¡°Porque solo cuando el laborismo est¨¢ en el poder tenemos la oportunidad de arreglar los problemas que m¨¢s nos importan¡±.

¡°Cada d¨ªa vemos lo que sucede cuando el laborismo est¨¢ lejos del poder¡±, explic¨® Khan. ¡°Con el laborismo lejos del poder, hemos vivido un divisorio y traum¨¢tico refer¨¦ndum sobre la UE¡±, dijo, y agradeci¨® por su contribuci¨®n a los inmigrantes europeos cuyo futuro, dijo, se est¨¢ usando ahora ¡°como una ficha de casino¡±.

¡°Con el laborismo lejos del poder, hemos vivido un divisorio y traum¨¢tico refer¨¦ndum sobre la UE¡±

Khan record¨® que el partido est¨¢ gobernando a nivel local. ¡°No solo en Londres, sino en Gales, en Liverpool, en Manchester, en Southampton, en Newcastle, en Glasgow, en Cambridge, en Birmingham, en Nottimgham, en Leeds, en Cardiff¡­¡±, enumer¨®. Pero se?al¨® que ¡°el laborismo no est¨¢ en el poder en el lugar desde el que se puede tener el mayor impacto en el pa¨ªs: el Parlamento¡±. ¡°Es en el Gobierno donde el laborismo puede cambiar m¨¢s significativamente la vida de la gente¡±, insisti¨®.

Su mensaje a Corbyn incluy¨® una advertencia velada: se le medir¨¢ por sus resultados electorales. ¡°Debemos empezar por ganar el a?o que viene las elecciones a las alcald¨ªas de Liverpool, Manchester y Birmingham, y asegurarnos de que el laborismo est¨¢ en el poder en cada una de las grandes ciudades brit¨¢nicas¡±, dijo.

Las ciudades, dijo, pueden ser una antesala del pa¨ªs. ¡°Con el laborismo en el poder en las ciudades podemos demostrar que se puede confiar de nuevo en el partido para gobernar el pa¨ªs¡±, defendi¨®. Muchos lo interpretaron como un mensaje de disponibilidad para, en caso de fracaso del actual rumbo, tomar el relevo del liderazgo. ?l lo neg¨® ante las c¨¢maras de televisi¨®n a la salida: ¡°Tengo el mejor trabajo del mundo. ?Por qu¨¦ iba a dejarlo?¡±, zanj¨® el alcalde.