Las negociaciones sobre Chipre entran en una fase definitiva
Grecochipriotas y turcochipriotas abordar¨¢n en noviembre en Suiza cuestiones relativas al territorio, con el objetivo de llegar a un acuerdo antes de fin de a?o
El proceso de di¨¢logo para derribar el ¨²ltimo muro existente en la Uni¨®n Europea ¡ªla divisi¨®n de la isla de Chipre, cuya mitad septentrional fue ocupada por Turqu¨ªa en 1974¡ª entra en una fase definitiva en medio de un clima de buenos augurios. Las dos partes se sentar¨¢n a negociar en Mont P¨¨lerin (Suiza) del 7 al 11 de noviembre, bajo los auspicios del enviado especial de Naciones Unidas para Chipre, el incansable Espen Barth Eide, que subray¨® el car¨¢cter ¡°cr¨ªtico¡± del encuentro. Mustaf¨¢ Akinci, presidente de la Rep¨²blica Turca de Chipre del Norte (RTCN, entidad reconocida s¨®lo por Ankara), se ha mostrado muy optimista sobre la cita, se?alando que es ¡°muy probable¡± que antes de finales de a?o, o incluso ¡°en un plazo de 45 d¨ªas¡±, se alcance una soluci¨®n para el contencioso chipriota.
Sin embargo, detalles tan aparentemente insignificantes como el horario de invierno, adoptado el s¨¢bado en toda la UE, han puesto de manifiesto que en la isla del Mediterr¨¢neo oriental a¨²n persisten las diferencias: la mitad turcochipriota sigue fiel a la hora de Ankara, mientras que la Rep¨²blica de Chipre (grecochipriota, la ¨²nica que reconoce la comunidad internacional) ajust¨® los relojes al horario europeo. En comparaci¨®n con los temas mayores que se pondr¨¢n sobre la mesa en Suiza, todos ellos los relacionados con el territorio (reconocimiento de t¨ªtulos de propiedad, catastro, etc¨¦tera), la de los relojes es s¨®lo una an¨¦cdota, pero muy reveladora de la existencia de dos realidades insulares.
La buena sinton¨ªa existente entre el l¨ªder turcochipriota y su vecino y amigo Nikos Anastasiadis, presidente grecochipriota, ha servido para acelerar el proceso de di¨¢logo en los ¨²ltimos meses, pero no menos que el inter¨¦s estrat¨¦gico que representan para las dos entidades de la isla los enormes yacimientos de gas natural en aguas de la isla, que han triangulado, e impulsado, una nueva colaboraci¨®n regional desde Grecia hasta Israel y Egipto. La diplomacia energ¨¦tica da as¨ª un empuj¨®n puede que definitivo a unas conversaciones que se prolongan desde hace a?os, y que miran al ¨²ltimo d¨ªa de este a?o como l¨ªmite deseable para su conclusi¨®n. Ese objetivo de alcanzar un acuerdo definitivo antes del 31 de diciembre, recuerda la ONU, es un compromiso com¨²n de las dos partes.
Ser¨¢ la primera vez que los dos l¨ªderes de Chipre negocien directamente sobre cuestiones relativas al territorio, las m¨¢s dif¨ªciles seg¨²n fuentes cercanas a la negociaci¨®n. Al tratarse de un tema tan sensible ¡ªtras la ocupaci¨®n militar del 74 hubo desplazamientos masivos de poblaci¨®n, y muchas propiedades fueron ocupadas por los invasores, o cambiaron de manos¡ª, los participantes han decidido encontrarse fuera de la isla. El objetivo final es la reunificaci¨®n de la isla bajo un paraguas confederal. Akinci fue llamado al orden en su d¨ªa por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, por defender la reunificaci¨®n de la isla y la independencia con respecto a Ankara.
Por todo ello Nicosia, la ¨²nica capital de la UE dividida en dos mitades ¡ªpor una l¨ªnea de demarcaci¨®n, o l¨ªnea verde, cerca de la que a¨²n permanecen replegados unas pocas decenas de cascos azules de la ONU¡ª, seguir¨¢ en vilo el desarrollo del di¨¢logo en Suiza, aunque lo haga con dos horas distintas (los turcochipriotas, una m¨¢s que sus vecinos) en una distancia de apenas unos metros. Las autoridades de la RTCN aseguran que no hay motivaciones pol¨ªticas tras la decisi¨®n de no adoptar el horario de invierno, pero para el analista Mete Hatay se trata de una situaci¨®n ¡°tragic¨®mica¡±, explic¨® al diario local Sunday Mail. Muchos ven en el desfase horario un v¨ªnculo directo con el problema pol¨ªtico subyacente, ese que Anastasiadis y Akinci intentar¨¢n solucionar en Suiza.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.