Oficial: el ¡®Schindler sueco¡¯ est¨¢ muerto
71 a?os despu¨¦s de su desaparici¨®n, el Gobierno sueco declara la muerte de Raoul Wallenberg
El Gobierno sueco ha desvelado este lunes uno de los grandes misterios del siglo XX: Raoul Wallenberg, el brillante diplom¨¢tico cristiano de 32 a?os, hijo de una poderosa familia sueca, que salv¨® a decenas de miles de jud¨ªos h¨²ngaros de los campos de exterminio nazi est¨¢ muerto, 71 a?os despu¨¦s de que desapareciese en Budapest?al final de la Segunda Guerra Mundial. La fecha oficial de la defunci¨®n se ha establecido el 31 de julio de 1952, seg¨²n ha comunicado la Agencia Tributaria sueca, que ha actuado siguiendo los deseos de su familia. Se cierra as¨ª un cap¨ªtulo apasionante de la Historia, aunque no el enigma en torno a su muerte, en el que se han invertido d¨¦cadas de investigaci¨®n sin respuesta y que envenen¨® las relaciones entre Suecia y la extinta URSS.?
"Voy al cuartel general sovi¨¦tico, no s¨¦ si como invitado o como prisionero". Con esta frase, Wallenberg,?nacido en 1912 y destinado en 1944 a la embajada sueca en Budapest como c¨®nsul lo que le permit¨ªa extender salvoconductos suecos para los jud¨ªos (se estima que unos 5.000), se?despidi¨® de dos acompa?antes, el 17 de enero de 1945. Fue detenido y posteriormente conducido a Mosc¨² por las tropas sovi¨¦ticas que liberaron Budapest de la ocupaci¨®n nazi, junto a su ch¨®fer,?Vilmos Langfelder. Sigue sin saberse el motivo del arresto y tampoco se crey¨® nunca la versi¨®n oficial de la URSS seg¨²n la cual Wallenberg muri¨® de un ataque al coraz¨®n a los 34 a?os, el 17 de julio de 1947, en los muy terribles cuarteles de la Lubyanka, la KGB, en la capital rusa. Por su parte, la parte sueca pensaba que estaba recluido en un hospital psiqui¨¢trico.
Tras la ca¨ªda de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, se cre¨® un?Grupo de Trabajo Sueco-Ruso para aclarar el tr¨¢gico destino del joven diplom¨¢tico que, 10 a?os despu¨¦s, en 2000, tampoco pudo resolver el misterio . En junio de 2006, la Fundaci¨®n Wallenberg recibi¨® una carta oficial de la Embajada de la Federaci¨®n Rusa en Washington firmada por el entonces subjefe de la misi¨®n, Alexander Darchiev, ?jefe de la secci¨®n de Am¨¦rica del Norte en el Ministerio de Relaciones Exteriores, la misiva se?ala: ¡°La responsabilidad de la muerte del se?or Wallenberg recae en los dirigentes de la URSS de ese momento y sobre Stalin, en particular.¡± Esta tesis fue corroborada por una reciente publicaci¨®n de los diarios de Ivan Serov, exdirigente de la KGB, en los que afirma que fue ejecutado.
Pese a ello, el misterio ha sido insoportable para su familia que en noviembre pasado pidi¨® a las autoridades de Estocolmo que lo declarasen muerto. " Es una manera de lidiar con el trauma con el que vivimos, de cerrar una fase y entrar en otra", aseguraron en un comunicado. "La familia ha vivido entre la esperanza y la desesperaci¨®n. Esperanza en que los esfuerzos dieran fruto y desesperaci¨®n cuando las esperanzas se frustraban una y otra vez". aseguraba el texto. La ley sueca establece que para establecer la fecha oficial de una muerte deben pasar cinco a?os desde la desaparici¨®n de la persona en cuesti¨®n. En el caso de Wallenberg, ser¨ªa el 31 de julio de 1952. Ahora tendr¨ªa 104 a?os. Pero los h¨¦roes nunca mueren.
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