La inesperada estrella de la cadena Fox

¡°Usted est¨¢ fascinada con el sexo y no le interesan las pol¨ªticas p¨²blicas¡±, le espet¨® el asesor de Trump y exmiembro del Congreso, Newt Gingrich a la presentadora de Fox News Megyn Kelly. Ella le hab¨ªa preguntado por el pasado de acosador sexual de Donald Trump, y ante su respuesta no retrocedi¨®: ¡°No me fascina el sexo. Pero s¨ª me fascina la protecci¨®n de las mujeres y comprender qu¨¦ es lo que me espera en el Despacho Oval¡±. Aunque visiblemente molesta, la rubia presentadora, una de las estrellas de la cadena de referencia de los conservadores estadounidenses, no perdi¨® la compostura. Kelly cerr¨® la secci¨®n ¡ªy de paso la boca del s¨ª descompuesto Gingrich¡ª con una ¨²ltima recomendaci¨®n: ¡°Espero que aprenda a controlar su ira¡±. Newt Gingrich hab¨ªa sufrido su momento Megyn.

Fue el diario The New York Times el que acu?¨® hace un a?o y medio el t¨¦rmino momento Megyn que a lo largo de esta campa?a se ha convertido en un latiguillo recurrente en Estados Unidos. Lo defini¨® como ¡°ese momento en que un invitado de la Fox defiende una l¨ªnea argumental que parece perfectamente alineada con la visi¨®n del mundo de la cadena de televisi¨®n y, de pronto, Kelly califica parte de ese argumento como una tonter¨ªa y quiz¨¢s, incluso, lo vuelve en su contra¡±. Y advert¨ªa: ¡°Uno nunca sabe cu¨¢ndo, c¨®mo, o si va a suceder ese momento Megyn (¡­), pero siempre hay que estar preparado¡±, aconsejaba el diario.

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Gingrich no ha sido el primer republicano que ignor¨® esta recomendaci¨®n y acab¨® machacado por la periodista, exabogada de 45 a?os. Desde hace tres a?os ocupa con su programa, The Kelly File, una de las franjas horarias m¨¢s codiciadas de la televisi¨®n. Pesos pesados del partido conservador como Karl Rove o Dick Cheney han sufrido su momento Kelly. Y, por supuesto, el propio Trump tampoco se ha librado.

El mes pasado se difundi¨® la grabaci¨®n de 2005 de un programa en el que Trump hablaba ¡ªpensando que a micr¨®fono cerrado¡ª del irrefrenable magnetismo que le llevaba a besar a las mujeres y agarrarlas de los genitales. Pero un a?o antes de que Trump quedara retratado como un acosador sexual, Kelly puso en evidencia la faceta m¨¢s mis¨®gina del empresario. En agosto de 2015, durante el primer debate de las primarias que enfrentaban a los candidatos conservadores, la rubia, que moderaba la sesi¨®n, atac¨®: ¡°Usted califica a las mujeres que no le gustan como cerdas gordas, perras desali?adas y animales asquerosos. A una concursante de su reality show le dijo que le encantar¨ªa verla de rodillas. ?Cree usted que este es el temperamento adecuado para un candidato a la presidencia de EE UU?¡±. Un d¨ªa m¨¢s tarde, Trump carg¨® contra Kelly diciendo que a la moderadora ¡°le brotaba sangre de los ojos, le brotaba sangre de cualquier parte¡±, insinuando que ella hab¨ªa sido dura con ¨¦l porque ten¨ªa el periodo. Se desencaden¨® entonces una guerra soterrada entre la estrella de la Fox y el candidato ¡ªpor quien esa misma cadena apost¨® desde el principio¡ª que termin¨® nueve meses despu¨¦s con una entrevista exclusiva de Kelly al magnate en la Torre Trump.

La periodista no duda en machacar a sus invitados aunque sus argumentos est¨¦n en l¨ªnea con la cadena

El hacha de guerra qued¨® oficialmente enterrada, pero Kelly no ha sido m¨¢s complaciente con Trump y su equipo desde entonces. Otras estrellas de Fox, como Sean Hannity ¡ªquien asesora al magnate republicano¡ª, la han acusado de favorecer a Hillary Clinton.

Pero la moderadora de intensa mirada azul ¡ªg¨¦lida, dicen algunos, de acero, coinciden muchos¡ª no se descoloca f¨¢cilmente. ¡°Soy independiente¡±, asegur¨® el a?o pasado en una entrevista a Variety, donde revel¨® que ha votado tanto a dem¨®cratas como a republicanos. ¡°No apoyo a nadie. Soy una presentadora de Fox News y no he apostado por nadie en esta carrera, puedo pon¨¦rselo dif¨ªcil a cualquiera¡±, agreg¨®.

Y Kelly no iba en broma como ha podido comprobar su antiguo mentor, el fundador de Fox News, Roger Ailes. Cuando surgieron las acusaciones de acoso sexual contra el todopoderoso jefe de la cadena, sus defensores buscaron apoyos como locos. Pero Kelly guard¨® un clamoroso silencio, a pesar de que fue Ailes quien la contrat¨® hace una d¨¦cada y no dej¨® de apostar por ella. Poco despu¨¦s trascendi¨® que la presentadora hab¨ªa comentado a los investigadores que ella misma hab¨ªa sufrido insinuaciones sexuales por parte del director. Ailes, el hombre que convirti¨® a Fox News en el referente conservador, dej¨® la cadena. Pero el asunto no ha quedado enterrado. Esta semana se ha filtrado que en el libro de memorias de Kelly, Settle for More (algo as¨ª como Conf¨®rmate con m¨¢s), cuya publicaci¨®n esta prevista el 14 de noviembre, la periodista aporta un buen n¨²mero de detalles sobre el acoso que sufri¨® hace una d¨¦cada por el gran jefe Ailes.

¡°Soy independiente¡±, dijo en una entrevista en la que confes¨® que ha votado a dem¨®cratas y republicanos

La actitud de Kelly le ha valido el respeto ¡ªy hasta el temor¡ª tanto de la derecha como de la izquierda. Tambi¨¦n ha subido su cach¨¦ profesional. Fox sabe que para mantener sus altas cuotas de audiencia tiene que abrir su espectro y atraer, como hace Kelly, a una franja m¨¢s joven de televidentes. Su programa, The Kelly File, es seguido de media por 2,7 millones de telespectadores. El ¨²nico programa de Fox News que le gana es The O¡¯Reilly Factor, con 3,2 millones. El propio Rupert Murdoch, due?o de la cadena, dej¨® claro hace unos d¨ªas que le gustar¨ªa que la periodista continuara en la Fox. Estas declaraciones suponen un gesto poco habitual, ya que se produjeron en plenas negociaciones para renovar el contrato de la presentadora. Se habla de que su salario subir¨¢ hasta los 20 millones de d¨®lares anuales ¡ªcinco m¨¢s de los que cobra ahora¡ª, al nivel de megaestrellas de la cadena como ?Bill O¡¯Reilly.

Kelly se hace querer. La periodista no descarta pasarse a la competencia. Quiz¨¢s para probar qu¨¦ tal se le dan otros medios y otros registros, el d¨ªa despu¨¦s de las elecciones, el 9 de noviembre, participar¨¢ en un programa de una cadena distinta: ser¨¢ la copresentadora invitada del magac¨ªn matutino de la periodista Kelly Ripa en Disney/ABC. Ocurra lo que ocurra el martes, Kelly es ya una de las ganadoras de esta campa?a.