La cumbre contra el cambio clim¨¢tico, resuelta a avanzar a pesar de Trump

El mexicano Ricardo Moyano es uno de los 20.000 participantes de la COP22 que se celebra en Marrakech desde 7 al 18 de noviembre. Uno m¨¢s entre tantos j¨®venes y tantas asociaciones participantes en el encuentro. Por la ma?ana, tras conocerse la victoria de Donald Trump, se formaban corrillos en los pasillos al aire libre de la sede de la COP22 con gente como Moyano, insufl¨¢ndose ¨¢nimos, dici¨¦ndose unos a otros, que no parar¨¢n de luchar. "En el hostal donde nos quedamos por la noche empezamos a seguir las elecciones de madrugada como una fiesta. Y termin¨® como un funeral", comentaba. "No pens¨¢bamos que pod¨ªa pasar esto. Pero no hay que dejar que la victoria de Trump nos derrumbe. Hay que poner buena cara y seguir trabajando".

Eso es lo que vinieron a decir tambi¨¦n -con otras palabras- los principales responsables de la lucha contra el cambio clim¨¢tico frente a la victoria de un hombre que ha expresado en varias ocasiones su escepticismo ante el acuerdo contra el cambio clim¨¢tico promovido por la ONU en diciembre del a?o pasado en Par¨ªs. S¨¦gol¨¨ne Royal, la ministra francesa de Medio Ambiente y principal responsable de los acuerdos hasta la apertura de la COP22 se?al¨® por la ma?ana en declaraciones recogidas por la agencia France Presse: ¡°A la hora en que estoy hablando 103 pa¨ªses han ratificado el acuerdo [de Par¨ªs]. Representan el 70% de las emisiones de efecto invernadero. Contrariamente a lo que ha dicho [Trump] ¨¦l no puede denunciar el acuerdo de Par¨ªs. (¡­) Tiene una vigencia de tres a?os¡±.

Donald Trump tuite¨® en 2012 que el cambio clim¨¢tico es un enga?o inventado por China para perjudicar a las empresas de Estados Unidos. En septiembre, sin embargo, neg¨® a Hillary Clinton haber sostenido esa tesis. Y a lo largo de la campa?a electoral evit¨® profundizar en el tema.

No obstante, en mayo reconoci¨® a la agencia Reuters que no es un "gran fan" de la COP21, y que pretende "renegociarlo". Trump ha prometido reducir todas las regulaciones medioambientales aprobadas por Obama que considere da?inas para los trabajadores. Y asegura que solo actuar¨¢ ante "preocupaciones medioambientales racionales".

La joven californiana Becky Chung, miembro de la ONG SustainUs, se?alaba ayer en el mismo encuentro de j¨®venes en el que particip¨® el mexicano Ricardo Moyano: "Puede que Trump no saque a Estados Unidos de la COP22, pero lo que es seguro es que no emprender¨¢ ninguna iniciativa que ayude a combatir la injusticia clim¨¢tica. Por eso tenemos que seguir luchando".

En Marrakech, donde ha de negociarse la letra peque?a que le d¨¦ forma al acuerdo hist¨®rico alcanzado en Par¨ªs, mucha gente prefiere aferrarse al optimismo. El turco Dogan Altinbilek, vicepresidente del centro de an¨¢lisis World Water Council indic¨® a este diario: "Seguro que cuando Trump se informe bien de la importancia del acuerdo de Par¨ªs no har¨¢ nada por impedirlo. Este no es el momento de la toma de conciencia, que ya pas¨®, sino de la acci¨®n. No quiero imaginarme lo que ser¨ªa retroceder 10 ¨® 15 a?os y comenzar a explicar de nuevo la importancia que tiene luchar contra el calentamiento global. Si pasan otros diez a?os el da?o puede ser irreversible".

Por otra parte, la felicitaci¨®n del rey Mohamed VI no tard¨® en llegar desde Marruecos a Washington. En su mensaje de felicitaci¨®n el monarca se centr¨® en los intereses compartidos por Estados Unidos y Marruecos y ensalz¨® ¡°la gran experiencia profesional¡± de Trump, como un "aporte innegable" a la presencia internacional activa de Estados Unidos sobre la escena mundial. Mohamed VI record¨® tambi¨¦n los "v¨ªnculos de amistad" y "las relaciones hist¨®ricas fuertes" entre los dos pa¨ªses. Y, por supuesto, mencion¨® la coordinaci¨®n de ambos Estados en la lucha "contra todas las formas de extremismo".