Un tribunal de Se¨²l deniega la detenci¨®n del heredero de Samsung

Un tribunal de Se¨²l deneg¨® este jueves la orden de arresto que solicitaba la Fiscal¨ªa especial contra el heredero del imperio Samsung, ¡°Jay¡± Lee Jae-yong. Aunque Lee contin¨²a siendo sospechoso en el caso de corrupci¨®n y tr¨¢fico de influencias que ha costado la destituci¨®n a la presidenta surcoreana Park Geun-hye, la corte decidi¨® ¡°a estas alturas de la investigaci¨®n¡± no estaba justificado encarcelar a uno de los hombres m¨¢s poderosos del pa¨ªs.

La decisi¨®n supone un alivio para el mayor conglomerado empresarial surcoreano y un rev¨¦s para los fiscales que esperaban extender a otros poderosos ¡°chaebol¡± (los grupos de empresas familiares ejes de la econom¨ªa del pa¨ªs) la investigaci¨®n sobre el mayor esc¨¢ndalo en la vida pol¨ªtica de la naci¨®n en d¨¦cadas.

Lee, que hab¨ªa pasado la noche en un centro de detenci¨®n a la espera de que el tribunal del Distrito Central de Se¨²l se pronunciase, regres¨® a primeras horas de la ma?ana a su domicilio sin hacer declaraciones a la prensa. Un comunicado de Samsung ha expresado la satisfacci¨®n del grupo porque se pueda continuar adelante con el esclarecimiento del caso ¡°sin necesidad de una detenci¨®n¡±.

¡°Es lamentable la denegaci¨®n de la orden de arresto¡±, ha declarado el portavoz de la Fiscal¨ªa especial, Lee Kyu-chul. Pese a todo, ¡°continuaremos la investigaci¨®n sin flaquear¡±, agreg¨®.

Para los fiscales, Lee Jae-yong dio el visto bueno personalmente a que Samsung pagara cerca de 36 millones de d¨®lares, en donaciones y contratos, a fundaciones y empresas bajo el control de Choi Soon-sil, la amiga de la presidenta Park que protagoniza el esc¨¢ndalo. Ese dinero ten¨ªa como fin, seg¨²n la acusaci¨®n, conseguir que el servicio nacional de pensiones, un accionista clave, diera el visto bueno a una controvertida fusi¨®n de dos de las empresas del grupo. Samsung necesitaba llevarla a cabo para que Lee consolidara su control del conglomerado. El fondo de pensiones estatal acab¨® aprobando la operaci¨®n y el lunes el exministro de Sanidad Moon Hyung-pyo qued¨® formalmente acusado de haber presionado de manera indebida a sus funcionarios para que la facilitaran.

Choi, de 60 a?os y apodada la ¡°Rasputina¡± surcoreana por su influencia sobre la jefa de Estado, se encuentra detenida desde noviembre como sospechosa de haberse aprovechado de su relaci¨®n con Park para recibir, con la connivencia de la presidenta, cerca de 70 millones de d¨®lares de las grandes empresas del pa¨ªs.

No es la primera vez que la Justicia surcoreana investiga a los gigantes empresariales del pa¨ªs. Pero aunque no es inusual que los directivos sean declarados culpables, s¨ª lo es que acaben yendo a la c¨¢rcel. Dado su peso en la econom¨ªa -solo Samsung representa una quinta parte del PIB nacional-, se les suele aplazar el cumplimiento de la pena y el jefe de Estado les concede un perd¨®n especial.

Ese ha sido, en dos ocasiones, el caso del padre de Lee, Lee Kun-hee, el hombre m¨¢s rico de Corea del Sur. El presidente de Samsung, hospitalizado desde 2014 a causa de un infarto, recibi¨® una amnist¨ªa presidencial en dos ocasiones, en 1996 y 2008, tras ser condenado por soborno y evasi¨®n de impuestos.

El Partido Dem¨®crata, el principal de la oposici¨®n, ha acusado al tribunal de haber tratado al vicepresidente de Samsung Electronics con guante de terciopelo. ¡°La presidenta ha quedado inhabilitada y Choi est¨¢ detenida¡­ pero Samsung no tiene problemas¡±, indic¨® en un comunicado.

Los sucesivos gobiernos del pa¨ªs han prometido limitar la influencia de los ¡°chaebol¡± y reducir su desmesurado peso en la econom¨ªa, aunque nunca con ¨¦xito.

La Asamblea Nacional aprob¨® el 9 de diciembre la destituci¨®n de Park en un esc¨¢ndalo que ha generado manifestaciones masivas de protesta de los ciudadanos, asombrados de hasta qu¨¦ punto Choi ejerc¨ªa su influencia sobre la presidenta y ten¨ªa acceso a documentaci¨®n clasificada.

El Tribunal Constitucional tiene hasta junio para decidir si la inhabilitaci¨®n de la jefa de Estado es procedente. En caso afirmativo, Corea del Sur tendr¨ªa que celebrar elecciones en un plazo de 60 d¨ªas.

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