El veto migratorio de Trump acaba con el sue?o de miles de iran¨ªes
"Es una gran injusticia", afirma un iran¨ª que ha vendido su empresa para emigrar a EEUU
¡°Es una gran injusticia¡±, lamenta a¨²n incr¨¦dulo Ali Darzi ante la prohibici¨®n de entrada en Estados Unidos a los ciudadanos de Ir¨¢n y otros seis pa¨ªses de mayor¨ªa musulmana. Los padres de este dise?ador de interiores de 35 a?os viven en California y ¨¦l, a la espera de los papeles de residencia, ya ha vendido su empresa y la mayor¨ªa de sus bienes. El decreto del presidente Donald Trump est¨¢ dejando sue?os rotos, familias divididas e incluso poniendo vidas en peligro, como en el caso de los iraqu¨ªes que trabajaron como traductores para el Ej¨¦rcito norteamericano.
Tal es el temor de los hermanos Mahmud. Mitad kurdos mitad ¨¢rabes, los tres ejercieron de int¨¦rpretes para las fuerzas estadounidenses tras la ocupaci¨®n de Irak en 2003. Hasta que la situaci¨®n se hizo insostenible por las amenazas y la presi¨®n de ver morir asesinados a varios compa?eros, tachados de ¡°traidores¡± por las milicias de todo signo. El m¨¢s joven logr¨® una recomendaci¨®n para trabajar en un organismo oficial dentro de la llamada Zona Verde hasta que hace un par de a?os, con ayuda de una beca, se fue a ampliar estudios a Londres. Los dos mayores iniciaron en 2008 el proceso para inmigrar a EE UU y esperaban hacerlo en los pr¨®ximos meses. ¡°Esto les cierra las puertas¡±, conf¨ªa el menor, preocupado por su seguridad en un momento en el que las milicias recobran protagonismo.
Antes de que un tribunal de Brooklyn bloqueara las deportaciones este domingo, dos traductores iraqu¨ªes, Hameed Khalid Darweesh y Haider Sameer Abdulkhaleq Alshawi, fueron detenidos durante varias horas en el aeropuerto JFK de Nueva York. De acuerdo con datos publicados en los medios norteamericanos, al menos 7.000 iraqu¨ªes se han instalado en EE UU gracias a un programa especial con ese objetivo, pero decenas de miles m¨¢s est¨¢n a la espera del resultado de sus entrevistas.
Varios diputados iraqu¨ªes han pedido que se debatan las restricciones en la C¨¢mara, mientras que el Gobierno de Bagdad mantiene silencio. Adem¨¢s de a Irak, la suspensi¨®n de los visados durante 90 d¨ªas y la interrupci¨®n del programa de refugiados afecta tambi¨¦n a Ir¨¢n, Libia, Siria, Somalia, Sud¨¢n y Yemen. Todos ellos son pa¨ªses en guerra a excepci¨®n de Ir¨¢n, el ¨²nico con el que EE UU no mantiene relaciones diplom¨¢ticas (algo que no merma su atractivo para los iran¨ªes).
¡°Si no puedo ir a Estados Unidos, tendr¨¦ que empezar de nuevo en Ir¨¢n, lo que supone una gran p¨¦rdida econ¨®mica¡±, se queja Darzi. Despu¨¦s de todo su esfuerzo por emigrar legalmente y reunirse con sus padres, no s¨®lo su futuro se ha quedado en el aire sino que duda cuando podr¨¢ verles de nuevo. Aunque estos tienen residencia legal en California, la famosa green card (tarjeta verde), no est¨¢ claro que ni siquiera con ella uno tenga garant¨ªas de poder regresar al pa¨ªs. ¡°Es una gran injusticia, de esta forma separan a las familias¡±, asegura muy decepcionado.
Es la situaci¨®n de la novia de Reza, un profesor de ingl¨¦s de 37 a?os. ¡°Ella ya tiene la green card, y yo tambi¨¦n iba a emigrar a EE UU, pero ahora ni siquiera ella que se encontraba aqu¨ª en Ir¨¢n de visita puede regresar para reunirse con sus padres¡±, declara. Se estima que los iran¨ªes con tarjetas de residencia estadounidenses suman varios cientos de miles. ¡°Este decreto s¨®lo es un gesto populista; no tiene otra explicaci¨®n cuando los terroristas del 11-S eran saud¨ªes y emirat¨ªes¡±, a?ade indignado.
Es una queja que se repite en las redes sociales, donde tanto ciudadanos de los pa¨ªses afectados como analistas no encuentran ninguna l¨®gica a los siete designados. Algunos medios, como The Washington Post o Bloomberg, incluso han se?alado que s¨®lo afecta a naciones en las que el imperio Trump no tiene negocios. Una nota del Financial Times recuerda sin embargo que esos pa¨ªses ya eran objeto de restricciones para la obtenci¨®n de visados desde el a?o 2011.
Tambi¨¦n dividida ha quedado la familia de Kaveh, importador de ropa de marca y propietario de una tienda de ropa en la calle Mirdamad, del norte de Teher¨¢n. Una vez m¨¢s fueron los progenitores los que emigraron a EE UU tiempo atr¨¢s, pero el padre regres¨® con un c¨¢ncer terminal y, tras su muerte a mediados del a?o pasado, Kaveh y su hermana decidieron hacer el viaje inverso para unirse a la madre, quien no puede abandonar aquel pa¨ªs porque a¨²n no ha recibido el pasaporte. ¡°Ten¨ªamos la entrevista para la residencia dentro de seis meses, pero ahora todo est¨¢ perdido¡±, reflexiona. Desconf¨ªa de que el problema vaya a arreglarse porque, en su opini¨®n, Trump ha cerrado las fronteras a los iran¨ªes ¡°para que las futuras restricciones que va a poner no causen muchas protestas¡±.
De momento, 120 iran¨ªes a quienes la entrada en vigor del decreto en la medianoche del viernes al s¨¢bado pill¨® en pleno vuelo fueron detenidos en diversos aeropuertos norteamericanos, seg¨²n los informativos de la televisi¨®n estatal. Pero los afectados son seguramente muchos m¨¢s, ya que no existen vuelos directos entre Ir¨¢n y EE UU. Varias compa?¨ªas de pa¨ªses vecinos a trav¨¦s de cuales los iran¨ªes suelen hacer ese viaje, han dejado de aceptar pasajeros de las siete nacionalidades afectadas aunque tengan visados o tarjetas de residencia, aunque hasta este domingo s¨®lo la web de Emirates recog¨ªa el aviso y ofrec¨ªa el cambio de reserva de los billetes.
El Ministerio de Exteriores iran¨ª, cuyo responsable anunci¨® la v¨ªspera medidas de reciprocidad hacia EE UU, ha ordenado a todas las representaciones diplom¨¢ticas que presten apoyo a los iran¨ªes afectados y les faciliten el regreso a Ir¨¢n. ¡°Aunque respetamos a los americanos y diferenciamos entre ellos y las pol¨ªticas hostiles de EEUU, Ir¨¢n va a adoptar medidas rec¨ªprocas para proteger a los ciudadanos¡±, escribi¨® el ministro Mohammad Javad Zarif en su Twitter. Para este, el decreto de Trump ¡°ser¨¢ recordado en la historia como un gran regalo a los extremistas y sus simpatizantes¡±.
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