Macron se gana a los argelinos con sus cr¨ªticas al pasado de Francia
El candidato a las presidenciales tach¨® la colonizaci¨®n de crimen contra la humanidad
Emmanuel Macron, el exministro de Econom¨ªa con el Partido Socialista franc¨¦s y candidato favorito para las presidenciales de mayo?declar¨® el martes en Argelia a una cadena privada que la colonizaci¨®n es una ¡°verdadera barbarie¡± y un ¡°crimen contra la humanidad¡± por el que Francia deber¨ªa excusarse. En Francia provoc¨® las respuestas airadas de los candidatos de la derecha, Fran?ois Fillon, y la extrema derecha, Marine Le Pen. Jam¨¢s un dirigente franc¨¦s hab¨ªa usado el t¨¦rmino de ¡°crimen contra la humanidad¡± y ninguno hab¨ªa planteado la posibilidad de pedir perd¨®n. En Argelia, sin embargo, la mayor¨ªa de partidos pol¨ªticos y medios de comunicaci¨®n han ensalzado ¡°la sinceridad¡± y el ¡°coraje¡± de Macron.
En Francia, Fran?ois Fillon replic¨® el mi¨¦rcoles en un mitin: ¡°Este odio de nuestra historia, este arrepentimiento permanente es indigno de un candidato a la presidencia de la Rep¨²blica. Hace un tiempo, el se?or Macron pensaba que la colonizaci¨®n ten¨ªa aspectos positivos. Esto quiere decir que no tiene ninguna coherencia. Dice lo que los dem¨¢s quieren escuchar¡±. Fillon se refer¨ªa a unas declaraciones efectuadas por Macron hace varios d¨ªas al semanario Le Point donde se?al¨®: ¡°Si bien en Argelia se tortur¨®, tambi¨¦n hubo la emergencia de un Estado, riqueza y el nacimiento de una clase media¡±.
Por su parte, la candidata del Frente Nacional, Marine Le Pen, escribi¨® en su p¨¢gina Facebook: ¡°?Hay algo m¨¢s grave, cuando se quiere ser presidente de la Rep¨²blica, que ir al extranjero para acusar al pa¨ªs que uno quiere dirigir de crimen contra la humanidad?¡± Y el vicepresidente del Frente Nacional, Florian Philippot, preguntaba: ¡°?Es un crimen contra la humanidad las carreteras que hemos dejado all¨ª, los colegios y los hospitales que hemos construido, la lengua que hemos dejado de herencia, la cultura francesa?¡±.
?Es un crimen contra la humanidad las carreteras que hemos dejado all¨ª, los colegios y? hospitales que hemos construido? Florian Philippot, vicepresidente del Frente Nacional
En Argelia, las palabras del Frente Nacional apenas hacen mella en la opini¨®n p¨²blica. Para muchos argelinos, el fundador de este partido, Jean-Marie Le Pen, es antes que pol¨ªtico, el militar que en su d¨ªa tortur¨® a muchos argelinos y nunca pidi¨® perd¨®n por ello. Por tanto, los comentarios se han centrado m¨¢s bien en celebrar ¡°el coraje¡± de Macron frente ¡°al silencio¡± de muchos socialistas.
El presidente socialista franc¨¦s, Fran?ois Hollande, lleg¨® a reconocer en 2012 el?¡°sufrimiento¡± que la colonizaci¨®n francesa infligi¨® al pueblo argelino ¡°durante 132 a?os¡±, es decir, desde 1830 hasta el final de la guerra de independencia (1954-1962). Hollande fue aplaudido por los parlamentarios argelinos cuando dijo que Argelia fue sometida a un sistema ¡°profundamente injusto y brutal¡±. Pero Hollande evit¨® pedir excusas, cosa que s¨ª ha reclamado Macron.
Por su parte, el responsable de asuntos pol¨ªticos del islamista Movimiento de la Sociedad por la Paz (MSP), se?al¨®: ¡°Esperamos que estas declaraciones se transformen en programa pol¨ªtico, sobre todo para indemnizar a los argelinos que han sido v¨ªctimas del colonialismo en los ensayos nucleares de Reggane o a lo largo de toda la colonizaci¨®n. Esto es un reconocimiento hist¨®rico que llega en el contexto de una campa?a electoral que pretende convencer a la comunidad argelina en Francia¡±.
Otros pol¨ªticos, como el opositor Moussa Touati, presidente del Frente Nacional Argelino (FNA), han optado por mostrar prudencia, en declaraciones recogidas por el sitio digital TSA: ¡°[Macron] no es m¨¢s que un candidato y quiere ganarse el electorado franc¨¦s de origen argelino y obtener un apoyo material del Estado argelino para su campa?a. Est¨¢ buscando votos, no se trata de una declaraci¨®n oficial del Estado franc¨¦s. Ya veremos qu¨¦ hace si resulta elegido presidente¡±.
En cualquier caso, Macron se ha ganado la aprobaci¨®n de muchos argelinos.
Las tropel¨ªas de Francia en Argelia
Los hechos que se detallan a continuaci¨®n son conocidos por cualquier argelino. Hay m¨¢s contenciosos entre Argelia y Francia, m¨¢s heridas abiertas, pero estas forman parte de las m¨¢s significativas.
La matanza de S¨¦tif, Guelma y Kherrata. El 8 de mayo de 1945, cuando la Alemania nazi acababa de ser derrotada, miles de musulmanes de este municipio situado en la regi¨®n argelina de Constantina salieron a la calle para celebrar la victoria, en la que miles de argelinos hab¨ªan sido alistados con Francia. La marcha termin¨® en un enfrentamiento contra los gendarmes, que abrieron fuego contra la masa. La represi¨®n se alarg¨® dos semanas y se extendi¨® a las localidades de Guelma y Kherrata. No hay consenso sobre el n¨²mero de muertos, aunque se estima que fueron asesinados entre 100 y 300 colonos y entre 1.500 y 20.000 argelinos musulmanes. Durante d¨¦cadas, Francia intent¨® ocultar esas matanzas. En Argelia, sin embargo, se rinde homenaje a las v¨ªctimas cada 8 de mayo de 1945.
Ensayos at¨®micos en el S¨¢hara argelino. El Ej¨¦rcito Franc¨¦s abandon¨® el S¨¢hara en 1967, ya que las autoridades de la Argelia independiente le hab¨ªan autorizado a quedarse cinco a?os tras el fin de la guerra. Pero durante la guerra y despu¨¦s, desde 1960 hasta 1966, Francia practic¨® en el desierto varios ensayos at¨®micos, cuyos estragos entre los 16.000 y 20.000 habitantes estimados en la zona y la poblaci¨®n n¨®mada se intentaron minimizar.
Matanza contra manifestantes pac¨ªficos en Par¨ªs. El 17 de octubre de 1961, bajo la presidencia de Charles de Gaulle, miles de argelinos rompieron un toque de queda y se manifestaron en Par¨ªs a favor de la independencia de Argelia, cuando solo quedaba un a?o para que concluyera la guerra. El jefe de polic¨ªa de Par¨ªs, Maurice Papon, estuvo al mando de una represi¨®n en la que fallecieron entre 50 y 200 personas. El Estado franc¨¦s silenci¨® durante d¨¦cadas esta tropel¨ªa hasta que 51 a?os despu¨¦s, Fran?ois Hollande reconoci¨® oficialmente la "sangrienta represi¨®n".
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