Los dem¨®cratas eligen a un hispano del establishment para que los lidere en la era Trump
El exsecretario de Trabajo Tom Perez es el primer latino que dirige el Comit¨¦ Nacional Dem¨®crata (DNC)
El Partido Dem¨®crata ha apostado por primera vez por un hispano, Tom Perez, para que gu¨ªe su camino por la traves¨ªa en el desierto que abri¨® la victoria republicana tanto en la Casa Blanca, con Donald Trump, como en el Congreso, donde los conservadores mantienen la mayor¨ªa en las dos c¨¢maras. El nombramiento del candidato apoyado por el establishment del partido como nuevo jefe del Comit¨¦ Nacional Dem¨®crata (DNC) es un gui?o a la diversidad que los dem¨®cratas quieren seguir abanderando. Pero tambi¨¦n muestra que la formaci¨®n no es capaz todav¨ªa de romper totalmente con las estructuras que la dejaron en la oposici¨®n y buscando c¨®mo recuperar el voto de los trabajadores y el campo que, en noviembre, le dieron en parte la espalda y respaldaron a Trump. Los sectores m¨¢s sanderistas hab¨ªan apostado por su rival, el congresista afroamericano y musulm¨¢n Keith Ellison.
No obstante, el propio Perez parec¨ªa consciente de la necesidad de hacer una se?al al sector del partido derrotado pero m¨¢s capaz de movilizar a las bases. Nada m¨¢s ser confirmada su victoria en la sesi¨®n de voto celebrada en Atlanta (Georgia), Perez propuso que Ellison fuera elegido como su n¨²mero dos, algo que fue aprobado por aclamaci¨®n.
Perez incluso le dio la palabra antes de tomarla ¨¦l para presentar su visi¨®n de futuro para el Partido Dem¨®crata, que se basa, subray¨® una y otra vez, en la ¡°unidad¡± de toda la formaci¨®n ante los desaf¨ªos de la era Trump que, agreg¨®, requiere un cambio de mentalidad y actuaci¨®n en la formaci¨®n que ahora dirige.?
¡°Tenemos que afrontar los hechos, sufrimos una crisis de confianza y de relevancia, y necesitamos una directiva que no solo pueda dar batalla ante Trump, sino que tambi¨¦n produzca un cambio de cultura en el Partido Dem¨®crata¡±, afirm¨® Perez.
Entre las felicitaciones que le llovieron tras su victoria est¨¢ la del expresidente Barack Obama, bajo cuyo mandato sirvi¨® como secretario de Trabajo. Obama felicit¨® a su "amigo" y en un comunicado se manifest¨® confiado en que lograr¨¢ "unirnos bajo la bandera de la oportunidad, as¨ª como preparar el camino para una nueva generaci¨®n de l¨ªderes dem¨®cratas para esta Am¨¦rica grande, audaz, incluyente y din¨¢mica que tanto amamos".
Una elecci¨®n muy disputada
Al puesto aspiraban ocho candidatos, aunque uno, Pete Buttigieg, alcalde de South Bend (Indiana), se retir¨® justo antes de que comenzara la votaci¨®n este s¨¢bado. De todos modos, la batalla estaba centrada sobre todo en dos: Perez, el exsecretario de Trabajo de Barack Obama, estaba considerado el candidato del establishment, apoyado por el entorno de Hillary Clinton y de Obama. Su m¨¢ximo rival era el ¡°rupturista¡± Keith Ellison, un legislador afroamericano por Minnesota y el primer musulm¨¢n elegido en el Congreso estadounidense, que estaba respaldado por la corriente m¨¢s izquierdista del partido abanderada por los senadores Bernie Sanders y Elizabeth Warren.
La direcci¨®n del DNC estaba vacante desde que en julio, en v¨ªsperas de la Convenci¨®n Dem¨®crata que coron¨® a Hillary Clinton como candidata presidencial, tuvo que dimitir la hasta entonces jefa del DNC, Debbie Wasserman-Schultz. La plataforma WikiLeaks hab¨ªa publicado unos correos electr¨®nicos internos ¡ªseg¨²n EEUU robados por Rusia¡ª que revelaban el intento de la c¨²pula del partido de boicotear la candidatura de Bernie Sanders a la Casa Blanca y favorecer a Clinton.
M¨²ltiples retos en tiempos de oposici¨®n
El nuevo jefe del partido, que habla un espa?ol fluido, tendr¨¢ que decidir la estrategia para volver a ganar la confianza de los votantes. El primer objetivo nacional son las elecciones legislativas de 2018 que podr¨ªan permitirles recuperar una de las dos c¨¢maras del Congreso y, as¨ª, tener un mayor contrapeso ante la Casa Blanca de Trump.
Cuenta en su contra con el desconcierto que sigue asolando a un partido que no vio venir la derrota de noviembre y que, desde entonces, ha seguido apostando en cierto modo por el mismo continuismo: en diciembre, la veterana Nancy Pelosi, de 76 a?os, se volvi¨® a imponer como l¨ªder dem¨®crata del Congreso frente a la candidatura alternativa de Tim Ryan, de 43 a?os y procedente de Ohio, uno de los estados que dio la espalda a los dem¨®cratas.
A su favor sin embargo, Perez tiene la ventaja de que su elecci¨®n pone fin al proceso interno que volvi¨® a tensar las fibras del partido y puede as¨ª concentrarse en el futuro. Y los dem¨®cratas afrontan esta nueva era alentados por las m¨²ltiples protestas que desde la inauguraci¨®n de Trump han provocado el resurgimiento de los movimientos ciudadanos que esperan poder reconvertir en votos en la pr¨®xima cita ante las urnas.
Un ejemplo de ¡°sue?o americano¡±
Perez, de 55 a?os, es hijo de inmigrantes dominicanos. A menudo ha puesto su propia vida ¡ªperdi¨® a su padre de ni?o, tuvo que hacer todo tipo de trabajos, incluso de basurero, para pagarse la universidad¡ª como ejemplo del sue?o americano al alcance de cualquiera que trabaje duro por ello, al menos hasta ahora. Antes de asumir la cartera de Trabajo en la segunda legislatura de Obama, el abogado de derechos civiles oriundo de Buffalo, estado de Nueva York, trabaj¨® como responsable de la Divisi¨®n de Derechos Civiles del Departamento de Justicia, desde donde lider¨® investigaciones tanto sobre los intentos de algunos estados por restringir el voto de minor¨ªas como conductas discriminatorias. Entre otros, fue el responsable de la demanda contra el pol¨¦mico sheriff de Arizona Joe Arpaio, n¨¦mesis de los indocumentados y entusiasta seguidor de Trump. Hasta su salto al gabinete de Obama, su principal pasi¨®n y dedicaci¨®n fueron los derechos civiles, campo en el que tambi¨¦n trabaj¨® como asesor del senador dem¨®crata Ted Kennedy. Perez tambi¨¦n ha sido un fuerte defensor de los inmigrantes. A comienzos de la d¨¦cada de 2000, ingres¨® en la directiva de CASA Maryland, una organizaci¨®n dedicada a la defensa de los inmigrantes.
Este s¨¢bado, en su discurso final antes de la votaci¨®n, Perez hab¨ªa puesto su vida como ejemplo de las posibilidades que ofrece EE UU y abog¨® por que el Partido Dem¨®crata vuelva a ser considerado el art¨ªfice de esos sue?os. ¡°Somos el partido que convierte las dudas en sue?os, somos el partido de la inclusi¨®n y la oportunidad¡±, sostuvo.
Un llamamiento conjunto a la unidad
La elecci¨®n del DNC ha hecho que hasta Hillary Clinton salga del exilio pol¨ªtico que se impuso tras las elecciones de 2016. En su primera declaraci¨®n pol¨ªtica tras admitir su derrota electoral, Clinton hizo un llamamiento a los dem¨®cratas reunidos este fin de semana en Atlanta para que busquen la unidad ante los desaf¨ªos que presenta la era Trump.
¡°Tenemos diversas miradas y trasfondos, pero estamos unidos por los valores y las esperanzas que compartimos para nuestro pa¨ªs¡±, dijo Clinton en un v¨ªdeo de poco m¨¢s de tres minutos que colg¨® en su cuenta de Twitter la v¨ªspera de la elecci¨®n dem¨®crata. ¡°Los desaf¨ªos que afrontamos como partido y como pa¨ªs son reales (¡) como dem¨®cratas, tenemos que avanzar con valor, confianza y optimismo y concentrarnos en las elecciones que tenemos por delante. Mientras permanezcamos unidos y trabajemos juntos, nuestros mejores d¨ªas siguen estando por delante¡±, asever¨®.
Un llamamiento a la unidad que reson¨® en Atlanta el s¨¢bado.
¡°Somos una familia y s¨¦ que nos iremos de aqu¨ª unidos como una familia, un Partido Dem¨®crata unificado no solo es nuestra mejor esperanza, sino la peor pesadilla de Trump¡±, dijo Perez durante las reuniones.
¡°Tenemos que salir de aqu¨ª unidos, todos tenemos que salir de la mano, porque Trump est¨¢ detr¨¢s de esa puerta¡±, coincidi¨® Ellison. ¡°No tenemos el lujo de salir de aqu¨ª divididos¡±, reiter¨® tras la votaci¨®n.
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