Mauricio Macri: "Argentina se est¨¢ poniendo de pie tras el despilfarro y la corrupci¨®n"

Hay d¨ªas en los que parece que Mauricio Macri se olvidara de que el pa¨ªs que gobierna se llama Argentina. El presidente acudi¨® al Congreso para abrir las sesiones, la ¨²nica vez que se dirige a las C¨¢maras en todo el a?o, con un discurso casi zen sobre la "inmensa red afectiva que es un pa¨ªs" y la necesidad de "trabajar unidos y creer que somos la generaci¨®n que vino a cambiar la historia". Pero poco a poco, en una sesi¨®n cada vez m¨¢s tensa, entre pancartas y gritos de la oposici¨®n y de los oficialistas, que se acusaban mutuamente de corruptos, Macri fue subiendo su tono. Y ah¨ª se acord¨® de que el pa¨ªs que gobierna se sigue llamando Argentina, donde la batalla pol¨ªtica es encarnizada, y acab¨® a los gritos, al ataque contra el kirchnerismo y pidiendo a los suyos resistencia."Argentina se est¨¢ poniendo de pie despu¨¦s de una d¨¦cada de despilfarro y corrupci¨®n. No escuchemos las voces de quienes nos quieren derribar".

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Argentina vive un momento pol¨ªtico especial. Por un lado, Macri viene de un exitoso viaje a Espa?a, aplaudido por los empresarios extranjeros, y reconocido por la comunidad internacional como el hombre que devolvi¨® Argentina a la ortodoxia. Adem¨¢s, la econom¨ªa empieza a tener los primeros datos positivos despu¨¦s de un a?o dur¨ªsimo. Pero a la vez, Macri ha sufrido un desgaste muy importante por varios esc¨¢ndalos relacionados con su familia, sobre todo el del acuerdo de renegociaci¨®n de una deuda de 300 millones de d¨®lares de la empresa familiar con el Estado que tuvo que anular ante la pol¨¦mica. El peronismo se est¨¢ rearmando, el a?o empieza con huelgas de maestros y en el mundo que apoya a Macri crece el temor de que pueda perder las elecciones de octubre, donde se renueva buena parte del Parlamento.

Por eso el presidente trata primero de tapar la herida por la que se cuela esa imagen de hombre rico que quiere beneficiar a su familia y amigos, con la que le asocia siempre Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. Macri prometi¨® ayer una serie de normas para impedir el conflicto de intereses de su familia. Poco antes de que hablara, un fiscal ped¨ªa su imputaci¨®n por la posibilidad de que haya beneficiado a la empresa familiar a la hora de conceder autorizaciones para nuevas l¨ªneas a¨¦reas en Argentina. Una de las m¨¢s beneficiadas es Avian, que tiene como m¨¢ximo responsable al mismo que dirig¨ªa MacAir, la compa?¨ªa a¨¦rea familiar que los Macri vendieron. "Quiero que se act¨²e ante cualquier suspicacia. Que todo sea transparente. Que nadie dude de que este presidente cuida el patrimonio del Estado". Mientras hablaba, los diputados kirchneristas gritaban "Correo, Correo [el origen de la deuda de los 300 millones]", o "Calcaterra, Calcaterra [por el apellido de su primo, uno de los grandes constructores del pa¨ªs]" mientras los macristas contestaban "S¨ª se puede". ?

La corrupci¨®n calent¨® a las dos bancadas, mientras en la calle tampoco se respiraba la tranquilidad a la que aspira el macrismo. Todos los alrededores estaban cortados con vallas, el tr¨¢fico colapsado, centenerares de polic¨ªas con todo tipo de material antidisturbios proteg¨ªan el Congreso como un aut¨¦ntica fortaleza. Aunque en realidad la protesta que se esperaba no fue muy grande, solo un grupo de maestros que logr¨® romper el cord¨®n policial y acercarse a la C¨¢mara y otros que cortaron la 9 de julio, la avenida principal, algo que en otros pa¨ªses ser¨ªa llamativo pero en Argentina es casi diario.

En ese contexto, Macri convirti¨® el discurso pol¨ªtico m¨¢s importante del a?o en una arenga para sus filas y un golpe contra las de enfrente, a las que acus¨® de dejarle un pa¨ªs quebrado, con un tercio de la poblaci¨®n en la pobreza y una econom¨ªa desarmada. Pero lo m¨¢s importante del texto parec¨ªa pensado para buscar una especie de ¨¦pica macrista, para que los suyos crean que es posible cambiar por completo un pa¨ªs acostumbrado a caer y levantarse una y otra vez. "Basta de que nos regalen el presente para robarnos el futuro. Argentina es cada vez m¨¢s protagonista y empieza a ser conocido por sus virtudes y no por sus defectos. Tenemos que dejar de tener una agenda peque?a, mezquina. Cada a?o vamos a estar mejor". Y siempre, todo, con la sombra de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner en todas partes, como contraejemplo para Macri: "No queremos liderazgos mesi¨¢nicos. No asumimos la presidencia para que nos hagan un monumento. Queremos que nos eval¨²en por como logramos reducir la pobreza. 12 millones de argentinos viven en villas o barrios precarios. No podemos permitirlo".