El r¨¦gimen sirio lanza una ofensiva a¨¦rea para frenar la embestida rebelde en Damasco
Fuerzas insurgentes y yihadistas sorprendieron el domingo con un fuerte ataque en el noreste
En la periferia de la capital Siria, combatientes armados y tropas regulares reproducen hoy el mismo patr¨®n adoptado previamente en Alepo y Homs. En la sitiada localidad de Qabun, en la periferia noreste de Damasco, unos 2.000 combatientes armados lanzaron este domingo una inesperada ofensiva contra posiciones del Ej¨¦rcito sirio. Con ello pretenden abrir una v¨ªa de acceso hacia la m¨¢s amplia Guta Oriental, tambi¨¦n cercada y bajo control insurrecto. All¨ª, El Ej¨¦rcito sirio alterna desde hace a?os entre operaciones militares para reforzar el asedio sobre los insurrectos, con negociaciones para sellar una evacuaci¨®n de los armados. La proximidad de esta localidad con el coraz¨®n del pa¨ªs y basti¨®n del Gobierno, expuesto al alcance de sus morteros, confiere a los armados un mayor peso a la hora de negociar.
¡°'Aun podemos haceros da?o as¨ª que ten¨¦is que sentaros a negociar', es el mensaje que los insurrectos han lanzado al Gobierno de El Asad¡±, valora al tel¨¦fono y desde Turqu¨ªa, Nawar Oliver, experto militar del Centro de Estudios Omran de Estambul. Tras tres a?os puntuados por acuerdos y espor¨¢dicos combates entre sendos bandos, el Ej¨¦rcito sirio reanud¨® las operaciones militares un mes atr¨¢s en un intento de debilitar a los insurrectos de Qabun al separarlos de Guta Oriental. Entremedias, unos 70.000 civiles han quedado atrapados con escaso acceso a alimentos y servicios m¨¦dicos. La apertura de una ruta que les conecte con la Guta Oriental permitir¨ªa a los armados evacuar a los civiles y recibir refuerzos. Para Oliver, la opci¨®n de ataques a¨¦reos es una limitada para el Gobierno de El Asad dada la proximidad en el frente entre posiciones leales e insurrectas. La agencia estatal de noticias siria, Sana, inform¨® en la tarde del lunes la recuperaci¨®n a manos del Ej¨¦rcito sirio de todas las posiciones arrebatadas por los armados el d¨ªa anterior.
Son tres los grupos que se han sumado en esta ofensiva insurrecta: Faylaq al Rahman y Ahrar al Sham son dos de las facciones islamistas m¨¢s importantes. Al t¨¢ndem se une la coalici¨®n Tahrir al Sham, recientemente creada bajo iniciativa de Fat¨¢ al Sham y filial de Al Qaeda en el pa¨ªs. En los combates han muerto 26 miembros de las fuerzas leales al presidente sirio, y 21 combatientes islamistas, seg¨²n el recuento que hace el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, sito en Londres. En el ataque sorpresa, los insurrectos han llevado a cabo varias operaciones suicidas contra posiciones del Ej¨¦rcito sirio.
El Ej¨¦rcito sirio ha recurrido a los cercos como estrategia de guerra desde el inicio de la contienda, que los insurrectos han replicado. Este ha sido el escenario en Al Waer, ¨²ltimo barrio bajo control insurrecto en Homs capital. Tras tres a?os de negociaciones, la semana pasada se reanud¨® una nueva fase de evacuaci¨®n que habr¨¢ de trasladar a unos 2.000 armados y otros 10.000-15.000 civiles hacia la campi?a. El mismo escenario se reprodujo tambi¨¦n en el Alepo occidental el pasado mes de diciembre donde 7.000 insurrectos y 23.000 civiles fueron trasladados a la rebelde Idlib, y otros 60.000 civiles optaron por desplazarse a zonas gubernamentales.
Previendo un mismo destino que sus filiales en Homs y Alepo, la coyuntural coalici¨®n islamista intenta evitar una evacuaci¨®n forzada y para ello contrataca al r¨¦gimen sirio en su propia capital. La tensi¨®n es patente entre los seis millones de habitantes¡ª m¨¢s de la mitad de ellos desplazados de otras regiones del pa¨ªs¡ª?que acoge Damasco, objetivo de recientes atentados terroristas y sobre cuyas cabezas truenan desde este domingo los cazas de combate.
Crecientes divisiones en el bando insurrecto
Sin embargo, las escaramuzas entre facciones mayoritarias mantienen el frente insurrecto dividido en Guta Oriental. Jeish el Islam, el ¨²nico de estos grupos que ha participado en el proceso de negociaciones pol¨ªticas bajo patrocinio de terceras potencias no lo ha hecho en esta ofensiva. Dentro del cerco se enfrenta a tanto los hombres de Faylaq al Rahman como a los de la filial de Al Qaeda. ¡°Para Jeish el Islam un acuerdo con el Gobierno para ser evacuados a Idlib no es una opci¨®n, porque ser¨ªan diezmados por Al Qaeda quien controla la regi¨®n y les supera en n¨²mero de combatientes¡±, recalca Oliver.
Entrando en el s¨¦ptimo a?o de guerra, los grupos de corte islamista y yihadista aglutinan hoy a la mayor¨ªa de los efectivos insurrectos frente al menguante Ej¨¦rcito Libre Sirio. Las luchas intestinas por hacerse con dep¨®sitos de armas, engrosar sus filas con combatientes de otros grupos o recibir apoyo regional han exarcebado?los enfrentamientos internos en bastiones insurrectos como Idlib o la periferia de Damasco. Una divisi¨®n que las tropas regulares sirias intentan aprovechar para expulsar mediante acuerdos a las bolsas opositoras de la Siria ¨²til: las principales urbes del pa¨ªs y las arterias que las conectan entre s¨ª.
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