La debacle de Caracas golpea a las gasolineras cubanas
Las estaciones de servicio estatales solo despachar¨¢n en abril gasolina 'premium' a los turistas
La debacle de Venezuela, el gran suministrador de Cuba de refinados de petr¨®leo, agudiza las carencias de la isla. Una circular interna citada por EFE indica que a partir de este s¨¢bado, y durante el mes de abril, las gasolineras solo vender¨¢n gasolina premium, la m¨¢s elaborada y que m¨¢s escasea, a los turistas.
Este viernes, antes de la entrada en vigor de la norma, en La Habana se empez¨® a notar la inquietud por la falta de combustible con largas colas, ha reportado EFE, e incluso el cierre de alguna estaci¨®n de servicio, seg¨²n periodistas locales. Por el momento no ha habido ning¨²n anuncio oficial que aclare a la poblaci¨®n las nuevas medidas. La circular apunta que los centros estatales y los usuarios particulares, a excepci¨®n de los turistas, solo tendr¨¢n permitido el uso de gasolina regular, y en ning¨²n caso de combustible especial de alto octanaje.
Desde la llegada al poder de Hugo Ch¨¢vez en Venezuela en 1999 y su alianza con Fidel Castro, Caracas ha sido el mecenas energ¨¦tico de la isla y su principal fuente de ingresos por pagos por servicios profesionales, sobre todo m¨¦dicos cubanos. En tiempos boyantes, Caracas inyectaba m¨¢s de 100.000 barriles de crudo diarios a La Habana a precio subsidiado, y La Habana ha enviado en todo este tiempo a m¨¢s de 200.000 profesionales a Venezuela. Seg¨²n los estudiosos de las relaciones econ¨®micas entre ambos pa¨ªses el volumen de env¨ªo de crudo a Cuba ha bajado entre un 40 y un 60%, y la isla ingres¨® en 2016 1.200 millones de d¨®lares menos por exportaci¨®n de servicios, lo que ha hecho tambalearse su balanza comercial y metido al pa¨ªs en una recesi¨®n de -0,9%, la primera en dos d¨¦cadas desde los tiempos de la ca¨ªda de la URSS, su anterior sost¨¦n.
La dependencia energ¨¦tica de Cuba del petr¨®leo es acentuada. Tan solo un 4% de la energ¨ªa que consume proviene de fuentes renovables. El gobierno se ha marcado el reto de que ese porcentaje llegue en 2030 al 24%, pero ello requiere una cantidad de capital que Cuba solo puede lograr atrayendo inversi¨®n extranjera, posibilidad que se mantiene ralentizada por el moroso ritmo de apertura econ¨®mica marcado por la c¨²pula, centrada en el control pol¨ªtico.
Las alarmas energ¨¦ticas saltaron ya en el verano de 2016. Venezuela hab¨ªa entrado en picado y el presidente Ra¨²l Castro reconoci¨® el problema refiri¨¦ndose a la ¡°contracci¨®n en los suministros de combustible pactados con Venezuela, a pesar de la firme voluntad del presidente Nicol¨¢s Maduro y su gobierno por cumplirlos¡±. Por entonces empezaron en el sector p¨²blico recortes en la provisi¨®n de gasolina, en el uso de aire acondicionado y reducciones de las jornadas de trabajo. El ministro de Econom¨ªa Marino Murillo cifr¨® en un 28% el ahorro energ¨¦tico necesario en el segundo semestre. Una semana m¨¢s tarde Murillo dej¨® su puesto y pas¨® a ocupar un cargo de planificador econ¨®mico general. El cerebro de las reformas no ha vuelto a hacer declaraciones.
El Gobierno cubano, mientras tanto, mantiene su respaldo a Caracas. Su canciller¨ªa emiti¨® esta semana un comunicado contra la OEA (de la que Cuba fue expulsada en 1962) tachando de ¡°hist¨¦rica y execrable¡± la postura de su secretario general Luis Almagro, que demanda el respeto al estado de derecho en Venezuela, calificando de ¡°chantajista¡± a Estados Unidos y afirmando que ¡°no podr¨¢n con la Revoluci¨®n Bolivariana y chavista que dirige el indoblegable presidente Nicol¨¢s Maduro¡±. A principios de marzo en una visita a Caracas, Ra¨²l Castro pronunci¨® una frase con resonancias de final de ¨¦poca: ¡°En Venezuela¡±, afirm¨® el dirigente cubano, ¡°se libra hoy la batalla decisiva¡±.
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