De yihad defensiva a ofensiva

El atentado de Estocolmo se ha ejecutado de un modo que coincide con las instrucciones espec¨ªficas para el uso terrorista de veh¨ªculos que en noviembre de 2016 difundi¨® Estado Isl¨¢mico (ISIS, como a¨²n suele aludirse a la misma por las siglas en ingl¨¦s del nombre que adopt¨® entre abril de 2013 y junio de 2014 la que fuera rama iraqu¨ª de Al Qaeda). En ellas se instaba a los ¡°muyahidines del terror situados detr¨¢s de las l¨ªneas del enemigo¡± a emplear sobre todo camiones y conducirlos como arma en concurridas calles peatonales, incluso pertech¨¢ndose de alg¨²n instrumento letal secundario. Si, como parece, se trata de otro atentado perpetrado por uno o m¨¢s adeptos a Estado Isl¨¢mico, convendr¨¢ no equivocarnos en la interpretaci¨®n de la estrategia subyacente a este y otros incidentes similares ¡ªcomo los de Berl¨ªn o Londres¡ª que vienen teniendo lugar en Europa Occidental.

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Hace meses que esos actos de terrorismo no son una expresi¨®n de yihad defensiva. No se ejecutan para proteger los territorios de Estado Isl¨¢mico en Siria e Irak. No buscan que los Gobiernos de los pa¨ªses donde ocurren dejen de contribuir a la coalici¨®n internacional que combate a dicha entidad yihadista. Estado Isl¨¢mico ha asumido ya la p¨¦rdida de los territorios de Oriente Medio donde proclam¨® un califato. Atentados como los de Berl¨ªn, Londres o ahora ser¨ªa Estocolmo, son una manifestaci¨®n de yihad ofensiva. Est¨¢n ideados, instigando aleatoriamente su ejecuci¨®n o planific¨¢ndola de manera centralizada, para preservar y extender un califato despose¨ªdo de suficiente base territorial. Se trata de que esos actos de terrorismo faciliten la supervivencia del califato en las actitudes y conductas de la poblaci¨®n musulmana hasta que la ¡°promesa de Al¨¢¡± se cumpla definitivamente.

Pese al componente prof¨¦tico que caracteriza a la ideolog¨ªa de Estado Isl¨¢mico, sus dirigentes saben que los musulmanes en pa¨ªses de Europa Occidental son clave para esta continuidad del califato como promesa. Por una parte, los combatientes extranjeros que en los ¨²ltimos a?os han partido desde ellos hacia Siria e Irak son alrededor de una quinta parte del total y est¨¢n casi 20 veces sobrerepresentados respecto a los procedentes de otras regiones del mundo. Por otra parte, distanciar a los musulmanes en Europa Occicental de los no musulmanes, inspirando o dirigiendo atentados mediante los cuales acrecentar la desconfianza mutua entre ambas comunidades ¡ªen el seno de sociedades como la alemana, la brit¨¢nica o la sueca, que est¨¢n entre aquellas m¨¢s afectadas por la reciente movilizaci¨®n yihadista¡ª favorecer¨ªa esa preservaci¨®n no territorializada del califato.

Fernando Reinares es director del Programa sobre Terrorismo Global en el Real Instituto Elcano y catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica y Estudios de Seguridad en la Universidad Rey Juan Carlos.