Par¨ªs vota diferente de este a oeste

Par¨ªs est¨¢ dividido en dos mitades, norte y sur, separadas por el r¨ªo Sena. Pero la ciudad cuenta con otra partici¨®n, perpendicular respecto a la primera y totalmente invisible, por lo menos en apariencia: la que dicta la ideolog¨ªa de sus residentes. Al oeste, su perfil es m¨¢s acomodado y conservador. Al este, con su pasado obrero, los parisinos exhiben un izquierdismo casi infalible. Un paseo por los colegios electorales, desde su apertura a las ocho de la ma?ana, refleja esa legendaria discordia, esta vez matizada por la explosi¨®n del bipartidismo, a la que aluden muchos electores.

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El recorrido tambi¨¦n da fe de las medidas de seguridad incrementadas tras el atentado del jueves. Adem¨¢s de los 50.000 polic¨ªas y 7.000 militares desplegados por todo el territorio franc¨¦s, el Ayuntamiento de Par¨ªs decidi¨® el viernes proteger 400 colegios electorales, sobre los 900 con los que cuenta la capital francesa, m¨¢s del doble de los inicialmente previstos. Adem¨¢s, 800 agentes de seguridad vigilan el acceso a los recintos y controlan las pertenencias de los electores. La consigna general es evitar colas en la calle, aunque no siempre se consiga ante la gran afluencia de votantes registrada al mediod¨ªa.

Pese a todo, los Campos El¨ªseos viven la jornada electoral con mayor normalidad de la que cab¨ªa esperar. En ese oeste burgu¨¦s que suele votar a la derecha, el barrio se mantiene fiel a los candidatos de su bando ideol¨®gico. A dos calles de la m¨ªtica avenida, Danielle apresura el paso al salir del colegio electoral. ¡°He votado por Fran?ois Fillon¡±, explica sin apenas detenerse. ?No le preocupan las acusaciones de malversaci¨®n de fondos que han salpicado al candidato derechista? ¡°Todos hacen lo mismo¡±, asegura. Catherine, de 58 a?os, ha preferido a Emmanuel Macron. ¡°Respeta un buen equilibrio entre unos y otros. El bipartidismo se acab¨®¡±, sentencia. Cindy, de 21 a?os y origen portugu¨¦s, ha preferido dar su voto al Frente Nacional. ¡°He votado por un cambio, porque este pa¨ªs est¨¢ muy mal¡±, asegura. Trabaja en el sector bancario y cree que abandonar la Uni¨®n Europea es una necesidad. ¡°No somos competitivos. Hay que salir de esta Europa que favorece a los grandes y no a los peque?os¡±.

"Hubiera preferido votar por Hamon, pero Macron es el ¨²nico que tiene posibilidades"

Al noreste de la ciudad, las consignas son distinta. ¡°Todo menos Le Pen¡±, repiten, cual mantra protector, numerosos electores en el barrio de Jourdain. C¨¦cile, de 29 a?os, ha madrugado m¨¢s de lo habitual para ir a votar antes de empezar su turno en la cafeter¨ªa donde trabaja. ¡°Es muy importante. Sobre todo esta vez, con el peligro de que Le Pen pase a la segunda vuelta¡±, explica detr¨¢s de la barra. En el barrio abundan los partidarios del candidato de la izquierda antiliberal, Jean-Luc M¨¦lenchon. Cl¨¦ment, de 34 a?os, due?o de una tienda de quesos, lo ha votado. Tambi¨¦n Anthony, de 43 a?os, que ha acudido a votar con un grupo de amigos. ¡°Todos hemos votado a M¨¦lenchon. No he dudado. El m¨ªo es un voto de convicci¨®n¡±.

M¨¢s al sur, cerca de la Plaza de la Rep¨²blica, donde tuvieron lugar los atentados de 2015, Anne-Sophie ha decidido mantenerse fiel al candidato socialista, Beno?t Hamon, al que todos los sondeos dan un resultado hist¨®ricamente malo. ¡°Me niego a practicar el voto ¨²til. He le¨ªdo los programas y es el ¨²nico en el que me reconozco¡±, afirma esta dise?adora gr¨¢fica de 52 a?os. Es de las pocas. En Ch?teau d¡¯Eau, barrio vecino de mayor¨ªa africana, un comercial llamado Farid, de 37 a?os, ha preferido curarse en salud. ¡°Soy de izquierdas y quiero contar con un candidato que me represente en la segunda vuelta. Hubiera preferido votar por Hamon, pero Macron es el ¨²nico que tiene posibilidades, aunque no me guste su programa econ¨®mico, que me parece excesivamente liberal¡±, sostiene mientras su hija le tira del brazo.

¡°[Fillon] Es el que m¨¢s cara de presidente tiene"

M¨¦lenchon, mejor que Le Pen

En la Goutte d¡¯Or, barrio de perfil multi¨¦tnico al pie de la colina de Montmartre, Christine ha decidido madrugar. Tras muchas dudas, esta administrativa de 30 a?os se ha decantado por el candidato de la izquierda antiliberal, Jean-Luc M¨¦lenchon. ¡°Hab¨ªa que escoger a uno. Y, aunque no me gusta todo lo que propone, me reconozco m¨¢s en ¨¦l que en Le Pen¡±, ironiza esta francesa de origen asi¨¢tico. Le gustar¨ªa que el pa¨ªs se pareciera un poco m¨¢s a su barrio, enclave modesto que en otro tiempo produjo el vino de gustas doradas que termin¨® d¨¢ndole nombre. Hoy acoge a magreb¨ªes, subsaharianos y j¨®venes blancos seducidos por sus pisos baratos y sus vistas id¨ªlicas del Sacr¨¦ Coeur. ¡°Las cosas no son perfectas, pero por lo menos aqu¨ª convivimos pac¨ªficamente¡±, afirma.

"En todas las empresas hay gente que emplea a su familia. Si al final no voto por Fillon, no ser¨¢ por ese motivo"

La mayor¨ªa de los personas interrogadas en la zona, tradicional feudo del Partido Socialista, ha optado por candidatos izquierdistas. Pero no todos. Thomas, ingeniero de 30 a?os, ha terminado prestando su voto a Fillon. ¡°Pese a todas las pol¨¦micas, al final es el que tiene m¨¢s experiencia y el que mejor responde a mis ideas¡±, explica. ¡°Los j¨®venes deber¨ªan dejar de quejarse tanto y ponerse a trabajar. Tenemos que entregarnos al m¨¢ximo para que Francia progrese¡±.

En el vecino barrio de Pigalle, Philippe, un jubilado de 83 a?os, tambi¨¦n ha dado su sufragio al ex primer ministro conservador. ¡°Es el que m¨¢s cara de presidente tiene¡±, asegura. ¡°Es el ¨²nico que ha entendido la dif¨ªcil situaci¨®n en la que nos encontramos. Y el ¨²nico ha hecho las cuentas y ha propuesto que nos apretemos en cintur¨®n. Es el ¨²nico candidato realista. Por ese preciso motivo, no ganar¨¢¡±.

Algunas calles por debajo, en una pintoresca calle comercial del m¨¢s aburguesado noveno distrito, donde izquierda y derecha suelen empatar, Marie-Th¨¦r¨¨se aguarda en la cola de su colegio electoral, que empieza a alargarse a medida que se acerca el mediod¨ªa. Pese a la escasa distancia que la separa de la urna, esta doctora de 68 a?os todav¨ªa no sabe por qui¨¦n votar¨¢. ¡°Dudo entre Macron y Fillon. Me gusta la juventud del primero, pero su programa me resulta impreciso. Y Fillon tiene mucha experiencia, pero no me gusta que quiera aliarse con Rusia¡±, explica. La pol¨¦mica protagonizada por el candidato derechista, sospechoso de haber empleado a su mujer en la Asamblea Nacional sin que esta prestara ning¨²n servicio en concreto, no le importa. ¡°En todas las empresas hay gente que emplea a su familia. Si al final no voto por Fillon, no ser¨¢ por ese motivo¡±.