Theresa May recibe a Juncker y a Barnier para hablar del ¡®Brexit¡¯

Theresa May se reunir¨¢ este mi¨¦rcoles por la noche en Downing Street por primera vez con Michael Barnier, el jefe negociador de la UE en el Brexit, d¨ªas antes de una cumbre europea clave en la que el bloque aprobar¨¢ sus directrices negociadoras. Al encuentro, que tendr¨¢ la forma de una cena de trabajo, asistir¨¢ tambi¨¦n el presidente de la Comisi¨®n Europea, Jean-Claude Juncker, entre otros miembros de los respectivos equipos negociadores. Ser¨¢ la primera vez que Juncker y la primera ministra se re¨²nan despu¨¦s de que esta activara formalmente el proceso de salida de la UE el pasado 29 de marzo. La reuni¨®n servir¨¢ para ¡°discutir el proceso de las negociaciones¡± de divorcio, seg¨²n declar¨® la portavoz del Ejecutivo europeo a France Presse.

El formato del encuentro -durante una cena, con poca publicidad y sin conferencia de prensa conjunta- muestra la manera en que Theresa May es partidaria de conducir las negociaciones: reuniones discretas para mantener todo lo en privado que se pueda los avances de la negociaci¨®n. Hasta la fecha, la UE ha dado muestras de inclinarse por una negociaci¨®n m¨¢s transparente, en la que todos los documentos con las posturas negociadoras se hagan p¨²blicos. Otra diferencia inicial es que Reino Unido parece m¨¢s partidario de avanzar en las negociaciones con reuniones a nivel t¨¦cnico, mientras que la UE considera importante que haya pol¨ªticos tomando las decisiones en las mesas.

Este s¨¢bado se celebra una cumbre en Bruselas de los 27 miembros restantes de la UE para aprobar las l¨ªneas europeas en las negociaciones con Londres. El Consejo de la UE deber¨¢ concretarlas despu¨¦s en las directrices concretas que deber¨¢ utilizar Barnier, el jefe negociador. Ser¨¢ entonces cuando la parte europea est¨¦ lista para empezar a negociar.

La primera ministra recibe a los negociadores europeos en su residencia oficial apenas ocho d¨ªas despu¨¦s de convocar elecciones anticipadas para el pr¨®ximo 8 de junio. Acude a las urnas con un mensaje: la necesidad de fortalecer su mano negociadora en el Brexit. Despu¨¦s de haber negado reiteradamente la posibilidad desde que lleg¨® a Downing Street en julio del a?o pasado, May acab¨® finalmente sucumbiendo a la tentaci¨®n de aprovechar la crisis en la que se encuentra el Partido Laborista de Jeremy Corbyn para tratar de mejorar su fr¨¢gil mayor¨ªa parlamentaria. Los sondeos dan a los conservadores ventajas de hasta 20 puntos porcentuales, que podr¨ªan convertir el margen real de 17 esca?os que tienen hoy en una hist¨®rica mayor¨ªa de m¨¢s de cien.

Todo indica que May tratar¨¢, durante la campa?a electoral que arranca el pr¨®ximo martes, de desviar la atenci¨®n del Brexit. Y todo indica tambi¨¦n que fracasar¨¢. La primera ministra no quiere convertir la negociaci¨®n en material de campa?a ¨Cpor eso se ha negado a participar en debates televisivos- y no quiere verse forzada a prometer logros que luego aten sus manos en la negociaci¨®n. Pero, por mucho que intente desviar la atenci¨®n, y aunque tampoco el l¨ªder laborista se sienta c¨®modo en el terreno europeo, el Brexit domina el debate pol¨ªtico en Reino Unido, dominar¨¢ la legislatura que arranque el pr¨®ximo 8 de junio y dominar¨¢, con toda probabilidad, la campa?a electoral.

La convocatoria de elecciones provoc¨® la cancelaci¨®n de una reuni¨®n que ten¨ªan previsto celebrar la semana pasada Barnier y David Davis, ministro brit¨¢nico del Brexit, para empezar a hablar sobre el formato de las negociaciones. Tras cancelarse esa reuni¨®n, la primera ministra decidi¨® invitar a Juncker a una cena en Downing Street a la que tambi¨¦n asistir¨¢n Barnier y Davis.