Arkansas ejecuta al cuarto reo en siete d¨ªas

Kenneth Williams es ya el cuarto reo ejecutado en Arkansas en siete d¨ªas. Williams fue sentenciado a muerte por asesinato en el a?o 2000 y formaba parte del grupo de ocho condenados que iban a ser ejecutados en el Estado antes de que acabe el mes de abril. Se trata de la mayor ejecuci¨®n de reos en cadena ¡ªdos de ellos la misma noche¡ª en cuatro d¨¦cadas. El pasado viernes falleci¨® el primero, Ledell Lee, y el lunes Jack Jones y Marcell Williams, la primera ejecuci¨®n doble desde el a?o 2000. Con la muerte de Williams a las 11.05 hora local, Arkansas ha logrado la mitad de su objetivo.

Los abogados de Williams presentaron varias apelaciones para que el Tribunal Supremo impidiera la ejecuci¨®n. Argumentaron que ten¨ªa un cociente intelectual inferior al que exige la ley para poder llevar a cabo la pena capital y que sus dolencias m¨¦dicas hac¨ªan impredecible el efecto de los f¨¢rmacos empleados para acabar con su vida. Una de ellas fue presentada en la ¨²ltima hora antes de su ejecuci¨®n, solicitando a un juez federal que la bloqueara al desconocer Williams que ten¨ªa derecho a una petici¨®n m¨¢s para evitar la sentencia. Sin embargo, el Supremo dictamin¨® este jueves ¡ªm¨¢s de tres horas despu¨¦s de la hora l¨ªmite¡ª que la ejecuci¨®n de Williams pod¨ªa seguir adelante.

En la ¨²ltima semana, diferentes instancias judiciales hab¨ªan paralizado las ejecuciones de los otros cuatro reos cuya muerte hab¨ªa sido programada por el gobernador de Arkansas antes de que caduquen los ejemplares de inyecci¨®n letal de las que dispone. A ¨²ltima hora del jueves, el embajador de la Uni¨®n Europea en Washington envi¨® una carta al gobernador con una "apelaci¨®n humanitaria" y solicitando que se estudiasen las pruebas de discapacidad del reo. El fiscal general del Estado, por su parte, present¨® tres peticiones distintas en la tarde del jueves ante el Tribunal Supremo para pedir que dieran luz verde a la ejecuci¨®n. El juez conservador Samuel Alito dio la raz¨®n a Arkansas en los tres casos que llegaron a sus manos.

La muerte de Williams, como la de los tres reos ejecutados antes que ¨¦l en la ¨²ltima semana, ha reabierto en Estados Unidos el debate sobre la pena capital y, en concreto, sobre los f¨¢rmacos empleados en los ¨²ltimos a?os. Arkansas es uno de los Estados que ha recurrido al midazolam, a pesar de la negativa de varias empresas fabricantes para que este sedante sea empleado de esta manera.

¡°S¨¦ que el midazolam no siempre anestesia al preso completamente¡±, escribi¨® Williams recientemente en una carta publicada por The Marshall Project 20 d¨ªas antes de morir. ¡°Como soy uno de los ¨²ltimos que ser¨¢ ejecutado, hay gente que piensa que si una de las primeras ejecuciones se complica, eso podr¨ªa alargar mi vida. Pero no quiero vivir solo porque otra persona sufra esa agon¨ªa. Que otros deban sufrir para que yo viva unos d¨ªas m¨¢s, es no es esperanza¡±.

El reo fue condenado a cadena perpetua hace 17 a?os por asesinato. A las pocas semanas de conocer su sentencia, Williams se escap¨® de la prisi¨®n y asesin¨® a un ranchero. La mujer de su segunda v¨ªctima ten¨ªa previsto presenciar su muerte en la misma prisi¨®n de Arkansas de la que huy¨®. El condenado fue finalmente detenido en Misuri, despu¨¦s de una persecuci¨®n policial en la que caus¨® la muerte a un tercer hombre.

Esta semana, la familia de la ¨²ltima v¨ªctima de Williams ha pedido en varias instancias judiciales que se le perdone la vida. ¡°Su ejecuci¨®n no nos va a devolver a mi padre ni todo lo que nos ha sido robado, pero s¨ª causar¨¢ a¨²n m¨¢s sufrimiento¡±, escribi¨® la hija de la v¨ªctima en una carta dirigida al gobernador de Arkansas.

Al conocer que el Estado hab¨ªa aprobado las ocho ejecuciones antes de finales de este mes, los reos instaron a la justicia a revocar la decisi¨®n argumentando que el uso de midazolam no garantiza que el ejecutado no padezca dolor. Los abogados de Williams intentaron parar su ejecuci¨®n alegando que padec¨ªa una enfermedad celular y lupus, por lo que el sedante podr¨ªa tener efectos impredecibles. El reo se ha convertido finalmente en el ¨²ltimo estadounidense en la lista de 1.452 ejecutados desde 1976, cuando el Supremo ratific¨® por ¨²ltima vez la pr¨¢ctica. El pr¨®ximo caso est¨¢ programado en Ohio para dentro de doce d¨ªas.

Las ejecuciones son realizadas mediante la inyecci¨®n de tres f¨¢rmacos. El primero, pentobarbital, sirve para dormir al reo; el segundo, bromuro de pancuronio, le paraliza, y el tercero, cloruro de potasio, le para el coraz¨®n. En el pasado, varios presos ejecutados por este m¨¦todo han agonizado durante minutos en la camilla y han llegado a expresar que sufr¨ªan dolor. La Constituci¨®n de EE UU proh¨ªbe el uso de la tortura y el trato ¡°inhumano¡±, pero ning¨²n abogado ha logrado impedir una ejecuci¨®n bas¨¢ndose en el argumento de que los f¨¢rmacos utilizados recientemente sobrepasen esta l¨ªnea roja.