El papi papi (Turbaco, Bol¨ªvar)
Esta democracia nuestra est¨¢ lejos de librarse del pasado y sus ridiculeces y sus abusos
Yo no s¨¦ a qui¨¦n creemos que estamos enga?ando: si al mundo o a nosotros mismos. Pero esta trama nuestra est¨¢ lejos de resolverse, esta democracia nuestra est¨¢ lejos de librarse del pasado y sus ridiculeces y sus abusos.
Pienso ahora en una escena inolvidable, de hace un mes, en la Asamblea Departamental de Antioquia: pide la palabra el diputado Nore?a, del Centro Democr¨¢tico, para preguntarle a un funcionario del departamento ¨Cen pleno debate sobre el analfabetismo¨C por los 80 puestos que el gobernador les hab¨ªa prometido; comienzan en el recinto los murmullos y los quejidos y las carcajadas sueltas porque el tr¨¢fico de influencias suele dejarse para la tras escena para evitarse los a?os de prisi¨®n que contempla el C¨®digo Penal; el presidente de la Asamblea deja escapar un atormentado ¡°ay, Dios¡±, porque Nore?a sigue y sigue y no cae en cuenta del desastre, hasta que empieza un conato de ataque de risa que tendr¨ªa que haberse soltado para que fuera claro este infierno grotesco.
Pero sobre todo pienso en la intervenci¨®n del congresista liberal Silvio Carrasquilla en ese absurdo e insensato debate en el que fue hundido ese absurdo e insensato referendo ¨Cde novela apocal¨ªptica¨C que pretend¨ªa impedir que los gais y los solteros pudieran adoptar: que como antes, como cuando Colombia ten¨ªa una Constituci¨®n ¡°en nombre de Dios¡¡±, los homosexuales no tuvieran los mismos derechos que los heterosexuales. Dijo Carrasquilla en lo m¨¢s ¨¢lgido y lo m¨¢s inveros¨ªmil del debate, sin asomos de iron¨ªa, ni asomos de republicanismo, ¡°he querido no buscar la Constituci¨®n, no buscar las normas ni las leyes, sino buscar la Biblia para buscar ah¨ª respuestas de lo que Dios me puede indicar a m¨ª de qu¨¦ hacer y c¨®mo votar y qu¨¦ decisi¨®n tomar para tener tranquilidad con mi conciencia¡±.
Carrasquilla empez¨® su carrera como creador de noticias cuando se convirti¨®, a los 24 a?os, en el alcalde del viejo municipio de Turbaco, Bol¨ªvar: ¡°el alcalde m¨¢s joven de Colombia¡±, se dijo. De ah¨ª salt¨® a concursar en el reality show Desaf¨ªo 2010: la lucha de las regiones. Quiso enmendar su camino convirti¨¦ndose en el cantante de la exitosa champeta El papi papi: ¡°papi pa¡¯ aqu¨ª, papi pa¡¯ all¨¢, me dice esa mujer¡¡±. Pero volvi¨® a la pol¨ªtica, Dios santo, a regalarle un burro a Barack Obama cuando estuvo en Cartagena; a proponer que todos los quinces de mayo sean d¨ªas sin redes sociales; a sobrevivir al chikungunya: ¡°yo fui uno de los que inauguraron el virus¡±. Y ahora, en un extra?¨ªsimo giro religioso digno de una trama en busca de rating, ha vuelto a los titulares por poner la Biblia por encima de la Constituci¨®n en pleno siglo XXI.
Yo no s¨¦ a qui¨¦n creemos que estamos enga?ando: esto no es serio. El diputado Nore?a reclama los puestos que le ofrecieron en plena sesi¨®n de la Asamblea de Antioquia, como quien genuinamente no entiende de qu¨¦ se r¨ªen, como quien no ha o¨ªdo nunca la palabra ¡°delito¡± ni ha entendido a¨²n el concepto de ¡°verg¨¹enza¡±, porque desde hace ya un par de d¨¦cadas se ha aceptado la idea de que ser pol¨ªtico es m¨¢s rentable que ser hamp¨®n. El congresista Carrasquilla pertenece al liberalismo, como Morales, la senadora que propuso el referendo contra la adopci¨®n, porque desde hace mucho tiempo los partidos colombianos no son proyectos pol¨ªticos sino equipos electoreros, y porque est¨¢ rond¨¢ndonos, adem¨¢s, la tentaci¨®n de vengarse de la correcci¨®n pol¨ªtica veng¨¢ndose del laicismo, de los derechos humanos.
La tolerancia es la inteligencia: lo cuerdo es no ver raros a los hombres de fe, ni a los chupamedias que regalan burros, ni a los cantantes de champeta, pero es tiempo de ser intolerantes ¨Caqu¨ª y en el mundo¨C con todos los aturdidos que llaman a estar por encima de la ley.
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