Tensi¨®n en Hong Kong ante el 20 aniversario de su vuelta a China
Detenido el activista prodemocracia Joshua Wong mientras intentaba un acto de protesta contra la visita del presidente Xi Jinping
¡°Fin del sistema de partido ¨²nico¡±. ¡°Libertad para Liu Xiaobo¡±, el premio Nobel de la Paz condenado a once a?os de c¨¢rcel y que padece c¨¢ncer terminal. ¡°Hongkoneses, salid a las calles para protestar el d¨ªa 1¡±. Estos eran los gritos de Joshua Wong, el veintea?ero l¨ªder del movimiento prodemocracia en Hong Kong, y una veintena de activistas de los partidos Demosisto, Liga Socialdem¨®crata y Partido Popular detenidos esta noche en Hong Kong cuando intentaban un acto de protesta contra la visita del l¨ªder chino, Xi Jinping, para conmemorar el 20 aniversario de la devoluci¨®n de la excolonia brit¨¢nica a manos chinas.
La veintena hab¨ªa intentado encadenarse y se hab¨ªa subido al Monumento a la Bauhinia. Esta estatua dorada en la orilla del barrio de Wan Chai, en el centro de la isla de Hong Kong, es un regalo de China al territorio aut¨®nomo para conmemorar su regreso a manos de la "madre patria". Esta gigantesca representaci¨®n dorada de la flor s¨ªmbolo de Hong Kong, es parada casi obligatoria para las decenas de miles de turistas de la China continental, y un lugar que muchos hongkoneses, por sus connotaciones a favor del r¨¦gimen de Pek¨ªn, evitan como la peste.
Ya este lunes, Wong y sus partidarios hab¨ªan cubierto de negro el monumento, como protesta por lo que denuncian como una creciente presi¨®n de China sobre la excolonia, y que denuncian que pone en peligro las libertades reconocidas para Hong Kong dentro del principio ¡°un pa¨ªs, dos sistemas¡±, que China y el Reino Unido acordaron que el territorio aut¨®nomo disfrutar¨ªa durante 50 a?os, hasta 2047.
¡°Pero China es cada vez m¨¢s atrevida. Ya nos dice a la cara que hace lo que quiere¡±, comentaba una espectadora hongkonesa de la protesta, que se identific¨® ¨²nicamente como Maggie.
El Gobierno aut¨®nomo de Hong Kong -y Pek¨ªn- quieren evitar a toda costa cualquier tipo de incidente que pueda empa?ar la visita del presidente chino. M¨¢s de 9.000 agentes de Polic¨ªa, seg¨²n los medios locales, patrullan las calles estos d¨ªas; abundan las barreras; se han colocado carteles oficiales para anunciar que se proh¨ªben carteles. O para proclamar, en caracteres rojos -el color auspicioso en la cultura china- la ¡°bienvenida al presidente Xi Jinping para conmemorar la vuelta de Hong Kong a China¡±.
Aunque el aniversario, y la visita de Xi, encuentran a una Hong Kong m¨¢s dividida que nunca. Seg¨²n una encuesta del Programa de Opini¨®n P¨²blica de la Universidad de Hong Kong, un 63% de sus 7 millones de residentes se identifican total o principalmente como hongkoneses, mientras que solo un 35% se considera total o principalmente chino. Entre los j¨®venes, el 93% se identifica como hongkon¨¦s.
?nicamente un 49,1% se declara optimista sobre el futuro del principio Un pa¨ªs, dos sistemas, un porcentaje que en 2007, hace apenas diez a?os, se extend¨ªa al 77,7% de la poblaci¨®n.
Episodios como la desaparici¨®n de cinco libreros hongkoneses editores de libros cr¨ªticos con el r¨¦gimen chino, y que reaparecieron posteriormente el a?o pasado en la China continental, han sacudido la conciencia hongkonesa, que ven c¨®mo el brazo del r¨¦gimen de Pek¨ªn se extiende incluso donde, seg¨²n la ley local, carece de jurisdicci¨®n.
Llueve sobre mojado. Muchos hongkoneses achacan tambi¨¦n a la presencia de los chinos continentales la distorsi¨®n en los precios del suelo -hace apenas unos d¨ªas se vendi¨® una plaza de garaje por 600.000 euros-, que han convertido el acceso a la vivienda en la excolonia en algo prohibitivo para sus residentes. O las dificultades para el acceso a la ense?anza superior. O la sobrepoblaci¨®n del territorio. ¡°Llegan presumiendo de que tienen todo este poder econ¨®mico, y se adue?an de todo¡±, se lamenta Chang Yok, un oficinista de mediana edad, mientras come deprisa unos fideos.
Pero durante su visita, Xi quiere dejar claro que no habr¨¢ cambios en la actitud de China. En declaraciones que recoge la agencia estatal Xinhua, el presidente chino afirma que espera ¡°ver un hermoso ma?ana¡± en la excolonia.
El jefe de Estado, que llegar¨¢ este mismo jueves, tiene previsto visitar el cuartel de las tropas chinas en Hong Kong y, posiblemente, las obras de construcci¨®n de un puente que comunicar¨¢ la excolonia con el territorio continental chino, seg¨²n ha publicado la prensa local. El s¨¢bado dar¨¢ la investidura a la nueva jefa del gobierno local, Carrie Lam, nombrada en marzo en unas elecciones limitadas a un comit¨¦ de notables.
Esa misma tarde, tras la partida de Xi, est¨¢ prevista una manifestaci¨®n de protesta por el centro de la isla en la que se espera que participen decenas de miles de personas.
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