Cesados cinco comandantes tras el robo en un cuartel portugu¨¦s

El robo de material militar en el polvor¨ªn portugu¨¦s de Tancos crece en importancia y en ineptitud a medida que se conocen m¨¢s datos, aunque no porque los proporcione el Ej¨¦rcito, a quien se le fuga la informaci¨®n igual que los explosivos.

Gracias a Diario de Noticias se conoce que el robo ha sido m¨¢s importante que ¡°unas cuantas granadas¡± seg¨²n el ¨²nico comunicado oficial, pues suman 1.500 municiones de 9 mil¨ªmetros, 120 granadas ofensivas, 44 lanzagranadas anticarros y 20 granadas lacrim¨®genas; cantidad suficiente para preguntarse c¨®mo se pudo coger y, sobre todo, c¨®mo se pudo transportar y escapar impunemente.

¡°Quien rob¨® el material de guerra ten¨ªa conocimiento del contenido de los polvorines¡±, ha reconocido el general Rovisco Duarte, jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito.

La videovigilancia lleva a?os estropeada, tambi¨¦n los sensores de movimiento y durante 20 horas no hubo vigilancia humana

Los ladrones, ¡°gente profesional¡±, seg¨²n el ministro del ramo, Azeredo Lopes, estaban tan bien informados, al menos, como los mandos militares. El 5 de junio el Gobierno hab¨ªa abierto concurso para reforzar el vallado de las instalaciones por un valor de 316.000 euros y tres d¨ªas antes del asalto el Diario de la Rep¨²blica public¨® las bases del concurso. Los ladrones fueron m¨¢s r¨¢pidos que la burocracia administrativa, pues accedieron por una de las zonas con el enrejado defectuoso. Les bast¨® cortar un trozo de alambrada con unas tenazas para entrar y salir con un veh¨ªculo.

¡°Tiene que haber habido informaci¨®n interna¡±, se?ala el jefe del Ej¨¦rcito. A tal obviedad se a?ade que tambi¨¦n deb¨ªan saber que el flamante servicio de videovigilancia no funcionaba desde hace a?os y que de las 25 garitas de toda la instalaci¨®n militar apenas alguna tiene vigilancia humana. Tampoco funcionaban los sensores de movimiento en el per¨ªmetro militar.

Cuatro d¨ªas despu¨¦s no hay un solo avance en la investigaci¨®n de los hechos. El ministro de Defensa, Azeredo Lopes, tras calificar el robo de ¡°grave¡± en un primer momento, el viernes le rest¨® importancia al se?alar que ¡°no era el m¨¢s importante del siglo en instalaciones militares europeas¡±.

Ning¨²n responsable militar o pol¨ªtico se atreve a pronunciar la palabra ¡°terrorismo¡±, aunque s¨ª especulan con que el material robado ir¨¢ destinado al tr¨¢fico de armas de bandas dedicadas a ello, dado el perfil profesional de los autores del saqueo.

Rovisco Duarte ha confirmado que la videovigilancia no funciona, pero que los planes de seguridad se hab¨ªan cumplido en la base de Tancos. A¨²n as¨ª, reconoce que ahora se han reforzado las patrullas y han aumentado ¡°los efectivos¡± dedicados a la vigilancia del recinto. Tambi¨¦n se ha ordenado un inventario de armas de la base, as¨ª como del resto de instalaciones del pa¨ªs para comprobar si falta m¨¢s armamento.

¡°Estoy maravillado de que ning¨²n mando militar haya presentado su dimisi¨®n por el robo¡±, ha declarado el l¨ªder del PSD, Pedro Passos Coelho, que, por una vez, coincide con el l¨ªder comunista Jer¨®nimo de Sousa, en la petici¨®n de ceses. Horas despu¨¦s, Rovisco Duarte ha confirmado el cese de cinco comandantes, "cuando se escogen dos polvorines del pabell¨®n 20, que por casualidad no son los m¨¢s pr¨®ximos de la entrada, hay que sacar conclusiones", ha anunciado. Los comandantes aparatados pertenecen a cuerpos encargados de proporcionar las tropas de seguridad del recinto. Seg¨²n Rovisco Duarte, la instalaci¨®n estuvo 20 horas sin vigilancia, tiempo en el que se realiz¨® el asalto, en la madrugada del mi¨¦rcoles, seg¨²n ha desvelado ahora.

El semanario Sol se?ala que el per¨ªmetro de la base militar es recorrido apenas por ocho soldados, que tardan medio d¨ªa en revisar los 21 polvorines, es decir, que apenas se hace la ronda una vez al d¨ªa, lo que permite a cualquier ladr¨®n informado tiempo suficiente para escoger material y transportarlo.

La magnitud del material desaparecido significa que los ladrones entraron en las instalaciones con un veh¨ªculo pesado, al menos una camioneta, pues solo los lanzagranadas pesan m¨¢s de 100 kilos cada uno. Eso, al margen del tiempo y el personal que se necesita para cargar todo el material, vigilar y salir de las instalaciones sin alarma alguna.

¡°Lo que pase en Europa o en Portugal en los pr¨®ximos meses puesto estar causado por una falta grave de seguridad como la ocurrida en la base de Tancos¡±, dice Passos Coelho. Sin embargo, para el jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito, ¡°estos robos pueden ocurrir en cualquier pa¨ªs y a cualquier Ej¨¦rcito, siempre que haya voluntad de hacerlo¡±.