Guerra de acusaciones por la masacre de la c¨¢rcel de Acapulco

Abonados al discurso de ¡®la culpa no es solo m¨ªa¡¯, el Gobierno de M¨¦xico y el del Estado de Guerrero tratan de imponer su relato en la masacre de la c¨¢rcel de Acapulco. Este jueves, 28 internos murieron en el penal de la ciudad costera. Los mataron otros reos a cuchillazos, navajazos, tablazos. En entrevista con El Sol de M¨¦xico, el secretario de Gobernaci¨®n, Miguel ?ngel Osorio Chong, desvelaba que los asesinos usaron incluso un arma de fuego.

El gobernador de Guerrero, H¨¦ctor Astudillo, del PRI, ha explicado estos d¨ªas que en el penal de Acapulco ¡°no tendr¨ªa que haber reos de alta seguridad, porque no est¨¢ en condiciones de atenderlos¡±. El mandatario dec¨ªa tambi¨¦n que no hay dinero para hacer las mejoras necesarias, entre ellas, ¡°arreglar paredes, puertas, pisos y drenajes¡±.

En su entrevista, Osorio, tambi¨¦n del PRI, ¡°exhort¨®¡± a los gobernadores a que mejoren ¡°las condiciones de los reclusorios y que se apliquen los recursos federales que se les da para atender los penales¡±.

Las redadas policiales son m¨¢s o menos habituales en el penal de Las Cruces, pero aun as¨ª, los atacantes se hicieron con cuchillos, navajas, ¨²tiles de construcci¨®n e incluso un arma corta calibre .38. Osorio dijo que el Gobierno federal ayuda a los estados en las redadas, pero ¡°si hay corrupci¨®n y dejan pasar cosas¡­¡±.

La matanza muestra de nuevo el desastre del sistema penitenciario en M¨¦xico, colapsado por el hacinamiento, la corrupci¨®n y el control de los presos sobre la autoridad. La de Acapulco es la sexta masacre en lo que va de sexenio. El a?o pasado, 49 internos murieron en un enfrentamiento entre grupos rivales en una c¨¢rcel de Monterrey. En 2014, otros nueve perdieron la vida en la prisi¨®n de Iguala, tambi¨¦n en Guerrero. En 2013 hubo dos casos, uno con siete muertos en Tamaulipas, en el norte y otro con 13 y 60 heridos en San Luis Potos¨ª. En diciembre de 2012, d¨ªas despu¨¦s de la llegada de Enrique Pe?a Nieto a la presidencia, 24 presos mor¨ªan durante un mot¨ªn en Durango.

La mayor¨ªa son c¨¢rceles de rango medio, dependientes de los Gobiernos estatales, pero es el Gobierno federal el responsable de la pol¨ªtica penitenciaria. Uno de los mayores rid¨ªculos del mandato de Pe?a Nieto, la fuga de El Chapo Guzm¨¢n, ocurri¨® precisamente en una prisi¨®n federal.?

Los detalles empiezan a aflorar tres d¨ªas despu¨¦s de la matanza. Astudillo ha informado de que el ataque dur¨® entre una hora y una hora y cuarto, de la 4.00 a las 5.00 o 5.15 de la ma?ana. Pero las autoridades no retomaron el control del centro hasta las 9.00. Hicieron falta 250 polic¨ªas para recuperar el edificio. Ir con menos, dijo el Gobernador, hubiera sido riesgoso. Astudillo elev¨® adem¨¢s de tres a 11 el n¨²mero de internos que organizaron el ataque.

En las ¨²ltimas horas se ha sabido tambi¨¦n que el gobierno del estado ha destituido al director del penal, investigado por lo ocurrido. Tres custodios fueron igualmente arrestados. Al parecer, habr¨ªan facilitado el ataque, aunque de momento se ignora si participaron en algo m¨¢s.

El diario Reforma informaba este s¨¢bado de un detalle macabro. Los atacantes, integrantes de una de las bandas que controla el tr¨¢fico de drogas en Acapulco, asesinaron a los dem¨¢s en medio de un ritual en honor a la santa muerte. La nota no indica si los feligreses eran las v¨ªctimas o los victimarios. Reforma apunta tambi¨¦n que el arma usada en la refriega no es nada comparada con el arsenal de que disponen las bandas del penal. Seg¨²n una ¡°denuncia an¨®nima conocida por las autoridades¡±, en el centro hab¨ªa todo tipo de armas, e incluso explosivos. Despu¨¦s de lo ocurrido, contin¨²a, ¡°los custodios las escondieron en las ¨¢reas de carpinter¨ªa y sastrer¨ªa¡±.

La fiscal¨ªa del estado, comandada por Xavier Olea, contin¨²a con las investigaciones. La matanza del penal se suma a la monta?a de problemas y situaciones que su oficina no acaba de resolver. La fiscal¨ªa tiene frentes abiertos en casi todas las regiones del estado. Chilpacingo, la capital, y Acapulco, se desangran en la peor ola homicida de los ¨²ltimos a?os. La Tierra Caliente vive atemorizada por la banda de Los Tequileros, capaces de burlar el cerco impuesto por las autoridades desde hace meses. En Chilapa y dem¨¢s pueblos lim¨ªtrofes con los plant¨ªos de amapola, la situaci¨®n no es mejor. En febrero, siete jinetes desaparecieron mientras pasaban por uno de estos municipios. Iban a una feria de charrer¨ªa en Tierra Caliente y desaparecieron antes de llegar. No se ha vuelto a saber de ellos.

En una entrevista con EL PA?S, el propio Olea explicaba que no ten¨ªa ¡°capacidad para enfrentar al crimen¡±. La masacre de la c¨¢rcel de Acapulco apunta a que las autoridades no pueden enfrentarlo siquiera en prisi¨®n.