Angela Davis: ¡°Cuando la mujer negra se mueve, toda la estructura de la sociedad se mueve con ella¡±

"La gente me pregunta: '?Ya has estado en R¨ªo?' No. ?Ya has estado en S?o Paulo?' No. Pero he estado en Salvador una vez m¨¢s y una vez m¨¢s", se derriti¨® Angela Davis, encandilando a todo el auditorio de la Universidad Federal da Bah¨ªa (UFBA), el pasado martes.Las personas que abarrotaban asientos y galer¨ªas, muchas de ellas luciendo voluminosas melenas afro a juego con la de Davis ¡ªdel color bet¨²n de las fotos hist¨®ricas, su pelo ha pasado a ser casi todo blanco¡ª, escucharon a la fil¨®sofa e icono de la lucha por losderechos civiles de los EE. UU. bramar contra los que considera verdugos, desde el Gobierno de Trump al sistema penitenciario mundial "dep¨®sito de los humanos considerados basura": "Con la fuerza y el poder de las mujeres negras de esta regi¨®n, resistiremos".

Davis celebr¨® que su sexta visita al Brasil desde los a?os 90 ¡ªla cuarta contando solo Salvador, una de las ciudades m¨¢s negras de Brasil¡ª coincidiese con el D¨ªa Internacional de la Mujer Afrolatinoamericana y Afrocaribe?a: el 25 de julio. En su discurso de casi una hora, la profesora em¨¦rita del departamento de estudios feministas de la Universidad de California critic¨® el encarcelamiento como medio de luchar contra la violencia de g¨¦nero: "?Cu¨¢nto de transformador hay en mandar a alguien que ha cometido violencia contra una mujer a una instituci¨®n que produce y reproduce la violencia? Las personas salen a¨²n m¨¢s violentas de la c¨¢rcel. Adoptar el encarcelamiento para solucionar problemas como la violencia dom¨¦stica reproduce la violencia que tratamos de erradicar", afirm¨® en la mesa de conferencias imponente formada por mujeres negras

V¨ªdeo de la conferencia de Davis en la UFBA.

La activista argument¨® que es necesario relacionar la violencia de g¨¦nero con las "violencias institucionales" para buscar otras maneras de combatir el sexismo: "No son las personas individualmente quienes deciden que la violencia es la respuesta; son las instituciones que nos rodean las que est¨¢n saturadas de violencia. Si el Estado utiliza la violencia policial para solucionar problemas, se transmite el mensaje de que la violencia tambi¨¦n puede utilizarse para resolver problemas en otros ¨¢mbitos como en el de las relaciones de pareja.No podemos excluir la violencia de g¨¦nero de otras violencias institucionales", apostill¨® la fil¨®sofa.

La activista e investigadora sobre el sistema penitenciario, que fue detenida en 1970 acusada de conspiraci¨®n y homicidio tras participar en el movimiento de los Panteras Negras en EE. UU., estableci¨® las relaciones entre el sistema esclavista y el sistema penitenciario."En el pasado hubo quien defend¨ªa el mantenimiento de la esclavitud de forma m¨¢s humanizada'. Ese argumento no tiene sentido para nosotros, pero hay quienes defienden la reforma del sistema carcelario en la actualidad. La esclavitud y la c¨¢rcel son instituciones de represi¨®n estructuradas en el racismo. Abolir el sistema penitenciario nos hace pensar en la sociedad en la que emerge ese sistema de castigo y buscar nuevas formas de justicia", defendi¨®.

Davis record¨® la trayectoria de las mujeres negras brasile?as y enfatiz¨® su importancia para la construcci¨®n de nuevos liderazgos y de nuevos formatos de liderazgo. Cuestion¨® su lugar como difusora privilegiada de las ideas del feminismo negro por el hecho de ser estadounidense. "Las mujeres de EE. UU. tienen mucho que aprender con la dilatada historia de lucha del feminismo negro en Brasil." "M?e Stella de Ox¨®ssi me habl¨® de la importancia de las mujeres negras en la preservaci¨®n de las tradiciones del candombl¨¦. Vi la importancia de Dona Dalva para mantener la tradici¨®n del samba de roda en el Rec?ncavo Baiano", cont¨®. Tambi¨¦n elogi¨® el organizado y exitoso movimiento de las empleadas del hogar negras. "En EE. UU. no hemos conseguido estructurar esa categor¨ªa con ¨¦xito. El liderazgo de esas mujeres no se estructura en ese individualismo carism¨¢tico masculino que vimos en el pasado. Es un tipo de liderazgo que enfatiza lo colectivo y las comunidades donde viven", sostuvo

.La profesora no quiso dejar de citar a Carolina Maria de Jesus, autora de Quarto de despejo, un diario de una mujer que viv¨ªa en una favela de S?o Paulo en los a?os 60, para decir que la escritora ¡°nos record¨® que el hambre tendr¨ªa que hacernos reflexionar sobre los ni?os y el futuro¡±. Tambi¨¦n dijo que la antrop¨®loga y activista bahiana L¨¦lia Gonzalez fue pionera en las conexiones entre raza, clase y g¨¦nero cuando apenas se hablaba de ello. "Ya hablaba sobre los v¨ªnculos entre negros e ind¨ªgenas en la lucha por sus derechos. Esa es una de las lecciones que EE. UU. puede aprender con el feminismo negro de aqu¨ª".

Davis fue ovacionada al decir que considera el movimiento de las mujeres negras como el m¨¢s importante de Brasil en la actualidad "en la b¨²squeda de la libertad". Antes de Salvador, en un encuentro internacional sobre feminismo negro y decolonial en Cachoeira, ya hab¨ªa defendido el poder de transformaci¨®n de la movilizaci¨®n: "Cuando la mujer negra se mueve, toda la estructura de la sociedad se mueve con ella, porque todo se desestabiliza a partir de la base de la pir¨¢mide social en la que se encuentran las mujeres negras, se cambia la base del capitalismo"

.La conferencia en la UFBA finaliz¨® con la insistencia de Davis en la necesidad de nuevos enfoques feministas con respecto al sistema penitenciario. "No reivindicamos ser incluidas en una sociedad profundamente racista y mis¨®gina, que prioriza la ganancia en detrimento de las personas. Reivindicar la reforma del sistema policial y penitenciario es mantener el racismo que estructur¨® la esclavitud. Adoptar el encarcelamiento como estrategia es abstenernos de pensar en otras formas de responsabilizaci¨®n. Por eso, hago hoy un llamamiento feminista negro para que abolamos el encarcelamiento como forma dominante de castigo y pensemos en nuevas formas de justicia."