El general Kelly pone orden en la Casa Blanca
El nuevo jefe de gabinete ha cambiado las rutinas dentro de la Administraci¨®n y trata de controlar al c¨ªrculo de Trump con el fin de acabar con el caos desatado en Washington
Ha defenestrado a agitadores, se ha erigido en filtro para todo aquel que quiera ver al presidente, incluidos su yerno y su hija, y ha apagado el fuego con el fiscal general, Jeff Sessions. El general John Kelly, nuevo jefe de gabinete de Donald Trump, ha dado un revolc¨®n a buena parte de las rutinas de la Casa Blanca en su primera semana de permanencia en el cargo. Pero su misi¨®n ¡ªrehacer el puente con los legisladores republicanos y atajar la guerra de guerrillas¡ª se antoja complicada.
Trump ha estado contenido en Twitter esta semana, pero resulta caprichoso atribuirle el m¨¦rito al general. Imprevisible y febril como es el presidente, dentro y fuera de la red social, la discreci¨®n puede desaparecer en cualquier instante y despu¨¦s de cualquier est¨ªmulo. El objetivo de Kelly no est¨¢ tanto en intentar embridar a Trump como en controlar lo que le rodea, quienes le hablan al o¨ªdo y le influyen con sus ocurrencias.
Su antecesor, Reince Priebus, fracas¨® en la empresa de hacer presidenciable a quien precisamente gan¨® las elecciones como enemigo de lo presidenciable. Abandonada esta batalla, la victoria del viejo marine ser¨¢ hacer que la Casa Blanca que lo rodea s¨ª funcione como una Administraci¨®n a la antigua usanza, lo que no se ha conseguido en estos primeros seis meses de era Trump. Esto pasa por frenar el c¨²mulo de filtraciones a la prensa procedentes de la Casa Blanca, contener las luchas intestinas y cortar el paso a los agitadores.
El director de Comunicaci¨®n, Anthony Scaramucci, fue defenestrado por Kelly el pasado lunes, cuando solo llevaba seis d¨ªas en el cargo, tras publicarse sus ataques venenosos contra Priebus y el estratega jefe, Steve Bannon, as¨ª como las presiones a un periodista de la revista New Yorker. Solo Trump puede hacer de Trump en el nuevo orden de Washington.
El nuevo jefe de gabinete es ahora el filtro por el que tiene que pasar todo aquel que quiere departir con el presidente o compartir una propuesta y eso incluye a su yerno y asesor, Jared Kushner y a su hija, Ivanka. ¡°Solo en los primeros d¨ªas ya se ha visto que va a haber m¨¢s metodolog¨ªa, m¨¢s orden y las decisiones se van a dar a conocer cuando realmente est¨¦n tomadas, con las negociaciones muy centralizadas, con menos improvisaci¨®n¡±, explicaba hace unos d¨ªas una fuente conocedora de las conversaciones entre la Casa Blanca y las distintas agencias y departamentos, a prop¨®sito de las relaciones con Venezuela.
El director de Presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, alab¨® el pasado jueves la mayor disciplina que ha tra¨ªdo Kelly. En declaraciones a los periodistas, Mulvaney explic¨® que ahora, cuando habla con Trump por tel¨¦fono, Kelly est¨¢ escuchando la conversaci¨®n y que, cuando acude a ver en persona al presidente, el general tambi¨¦n est¨¢ ah¨ª controlando qui¨¦n entra y qui¨¦n sale.
Justicia perseguir¨¢ al filtrador, no al periodista
El fiscal general, Jeff Sessions, prometi¨® este viernes dar la batalla legal contra el torrente de informaciones confidenciales o sensibles que la prensa est¨¢ publicando a golpe de exclusiva desde que Donald Trump lleg¨® al poder. El anuncio ¡ªjunto con la advertencia de que ya hay cuatro personas imputadas por ello¡ª desat¨® la pol¨¦mica en un pa¨ªs tan comprometido con la libertad de expresi¨®n y prensa como EE UU, pero el n¨²mero dos del Departamento de Justicia, Rod Rosenstein, aclar¨® este s¨¢bado que el objetivo es el filtrador, no el periodista. ¡°Perseguimos las fugas de informaci¨®n, no a los periodistas por hacer su trabajo¡±, declar¨® el fiscal general adjunto a la cadena Fox.
Aun as¨ª, matiz¨® que s¨ª existen circunstancias en las que el propio medio de comunicaci¨®n pueda cruzar la l¨ªnea de la legalidad. ¡°En general, los periodistas que publican informaci¨®n no est¨¢n cometiendo un crimen, pero puede haber una circunstancia en la que lo hagan. No descartar¨ªa el caso de que el reportero viole intencionadamente la ley¡±, dijo.
Dudas sobre Trump 2020
La puerta del Despacho Oval, como describ¨ªa esta semana The Wall Street Journal, ya no est¨¢ abierta para cualquiera. Para ver al presidente se sigue ahora un proceso m¨¢s formal de solicitud y ning¨²n documento le llega sin control previo. Tambi¨¦n ha apagado ya alg¨²n fuego: el 30 de julio, un d¨ªa antes de tomar posesi¨®n, Kelly llam¨® al fiscal general, Jeff Sessions, para asegurarle su continuidad en el puesto, seg¨²n Associated Press, algo que hab¨ªa quedado en cuesti¨®n tras las cr¨ªticas frontales por parte de Trump.
No hay analistas que estos d¨ªas conf¨ªen demasiado en el ¨¦xito del general en este proceso de normalizaci¨®n de Washington. En el Partido Republicano siguen elabor¨¢ndose planes para una vida postTrump cuando solo lleva medio a?o en el puesto. The New York Times public¨® este fin de semana, citando entrevistas a 47 republicanos de todos los niveles del partido (cargos elegidos, votantes y estrategas), que crecen las dudas sobre si el empresario neoyorquino estar¨¢ en la papeleta electoral de las pr¨®ximas presidenciales, 2020, y que algunos preparan un plan de contingencia ante esa posibilidad. El neoyorquino sigue fuerte entre sus votantes, pero jam¨¢s fue del agrado del establishment republicano y el avance de las investigaciones sobre la trama rusa, as¨ª como los magros resultados de sus iniciativas en el Congreso y el Senado (la incapacidad de sustituir Obamacare es su fracaso m¨¢s sonado), pueden erosionarle.
El Times cita incluso a Mike Pence, el vicepresidente, como un candidato a la sombra cuyos asesores ya mueven la idea entre los donantes de que planea presentarse como candidato si Trump no lo hace, lo que el propio Pence neg¨® tajantemente ayer.
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