Guajardo defiende que M¨¦xico ha ayudado a la competitividad de la industria estadounidense

El secretario de Econom¨ªa de M¨¦xico, Ildefonso Guajardo, trat¨® este miercoles por la tarde de quitarle hierro al duro discurso con el que el responsable de los negociadores de Estados Unidos,?Robert Lighthizer, comenz¨® la primera ronda formal de negociaciones para reformar el tratado comercial de ambos pa¨ªses con Canad¨¢ (TLC o Nafta, en sus siglas en ingl¨¦s). "Nada de lo sucedido esta ma?ana ha sido una sopresa", dijo Guarjardo, "es la primera vez que en el mismo mensaje ha habido un reconocimiento de lo bueno que ha sido el tratado para el sector agroalimentario", a?adi¨®. Adem¨¢s, respondi¨® a las cr¨ªticas de su socio m¨¢s poderoso alegando que M¨¦xico hab¨ªa ayudado a mejorar la competitividad de la industria manufacturera frente a competidores como Asia.

Guajardo compareci¨® ante la prensa en la sede de su embajada en Washington horas despu¨¦s del arranque del acto con el que se daba por inaugurada la ronda de conversaciones. Y, en ese enuentro, pese a lo suavizado por el mexicano, Lighthizer hizo toda una declaraci¨®n de intenciones: la Casa Blanca no se va a conformar con retoques. El TLC ¡°ha destruido 700.000 empleos¡±, apunt¨®. ¡°B¨¢sicamente pensamos que el tratado ha fallado a muchos estadounidenses y debemos mejorarlo¡± subray¨®.

La Administraci¨®n de Donald Trump se queja de que el d¨¦ficit comercial con M¨¦xico se ha traducido en una fuerte destrucci¨®n de empleo en el sector industrial estadounidense debido a la fuga de producci¨®n fabril hacia el sur, al calor de unos costes m¨¢s bajos. "No coincido en eso. Les he expresado muchas veces que M¨¦xico no ha sido parte del problema, sino parte de la soluci¨®n. Les hemos ayudado a mantener la productividad antes el resto de lugares del mundo", explic¨® Guajardo. Sin el Nafta, que entr¨® en vigor hace 23 a?os, "el impacto de la competencia con Asia habr¨ªa sido todav¨ªa m¨¢s radical y desastroso".

Uno de los temas calientes de las conversaciones, cuya primera fase concluye el domingo, son las condiciones laborales. Washington quiere entrar de lleno en ello, pero para M¨¦xico es un problema tocar su enorme ventaja competitiva frente a los socios del norte. ?Es una l¨ªnea roja, qu¨¦ ocurre si Estados Unidos reclama una subida del salario m¨ªnimo?, le preguntaron en la rueda de prensa. El titular de Econom¨ªa insinu¨® que lo rechazar¨ªan, destacando que "al fotalecer los derechos sindicales" se robustece? "la capacidad de negociaci¨®n de los trabajadores", y ello lleva a mejores sueldos. Es una forma de decir que no quieren abordarlo, pero con un lenguaje mucho menos directo que el del negociador estadounidense.