El jefe de polic¨ªa de Houston: ¡°El debate de la inmigraci¨®n es solo teatro pol¨ªtico¡±

En medio del torrente de informaci¨®n que acompa?a desde hace una semana al desastre del hurac¨¢n Harvey en Houston falta algo. Cr¨ªmenes. Saqueos. Alguien que se haya puesto nervioso y haya pegado un tiro. No se ha visto. Quedan meses de recuperaci¨®n y drama para miles de familias, pero hasta ahora la historia de Harvey es de civismo en medio del caos. Al frente del Departamento de Polic¨ªa est¨¢ Art Acevedo, el primer latino en dirigir la polic¨ªa de Houston. Acevedo atendi¨® a EL PA?S mientras visitaba a los refugiados del mega albergue del Centro de Convenciones.

¡°Se ha visto algo, pero muy poco¡±, responde cuando se le pregunta por delitos cometidos aprovechando el caos. ¡°Esta es la cuarta ciudad del pa¨ªs, tenemos 2,4 millones de habitantes y 1.600 kil¨®metros cuadrados. La regi¨®n entera son 6,5 millones de personas. Si te pones a pensar con todo lo que ha pasado el poco crimen que ha habido es una prueba de que el Departamento de Polic¨ªa y nuestros colegas de las fuerzas de seguridad son un ejemplo de profesionalismo y liderazgo de esta comunidad. Es importante que la gente sepa que seguimos manteniendo la seguridad al mismo tiempo que hacemos de bomberos. Este departamento ha rescatado a m¨¢s de 6.000 personas de sus casas. Nuestros polic¨ªas lo hicieron sin el entrenamiento y sin el equipo, solo con coraje¡±.

La clave de estos d¨ªas, explica, es que ¡°nunca paramos de proteger contra los delincuentes¡±. ¡°Cuando la lluvia ca¨ªa bien fuerte y ten¨ªamos emergencias, ten¨ªamos agentes rescatando y al mismo tiempo a los pocos pandilleros que salieron les ca¨ªmos encima, y los llevamos presos, incluso cuando nos dispararon¡±. Acevedo se refiere a algunos incidentes aislados de saqueos que extendieron el p¨¢nico entre los vecinos de zonas inundadas. No est¨¢ claro cu¨¢ntos casos ha habido, pero el fiscal del condado dijo el martes pasado que hab¨ªa 14 personas acusadas de robo.

Ante los rumores, el alcalde decret¨® un toque de queda desde la medianoche hasta el amanecer que b¨¢sicamente sirvi¨® a la polic¨ªa para parar a cualquiera por la calle. El jefe sali¨® en persona a dar una rueda de prensa en la que dijo que no permitir¨ªa que nadie se aprovechara de los vecinos ¡°en el momento m¨¢s bajo de sus vidas¡±. Y la fiscal¨ªa anunci¨® un aumento de penas obligatorias instant¨¢neo para cualquiera acusado de robo durante la inundaci¨®n. ¡°Lo estamos parando en seco¡±, dijo Acevedo el mi¨¦rcoles pasado.

¡°Nunca paramos de hacer una cosa por hacer la otra¡±, asegura Acevedo. ¡°La decisi¨®n m¨¢s importante fue el s¨¢bado. Sab¨ªamos que ven¨ªa la tormenta y el viernes hab¨ªamos puesto a todos los agentes en alerta t¨¢ctica, que significa que todo el mundo tiene que trabajar un turno de 12 horas y descansar otras 12. Pero el s¨¢bado por la ma?ana, cuando vimos el informe del Servicio Meteorol¨®gico Nacional sab¨ªamos que lo que iba a caer era algo que no se hab¨ªa visto. Ya hab¨ªamos dicho a los agentes que se trajeran mudas, ropa y almohadas, porque exist¨ªa la posibilidad de que no les dej¨¢ramos irse a su casa. Desde el s¨¢bado, todo el mundo trabaj¨® 24 horas durante cuatro d¨ªas¡±.

El departamento de Acevedo lo componen 5.200 agentes y 1.200 personas de apoyo civil que ten¨ªan sus propios problemas personales durante la tormenta. ¡°M¨¢s de 400 agentes ten¨ªan sus casas bajo el agua. Y ni uno se fue. Todos se quedaron. Durmieron en sus coches, el suelo, no se quejaron y no puedo estar m¨¢s orgulloso¡±, dice Acevedo.

El jefe de polic¨ªa de la cuarta ciudad m¨¢s grande de EE UU naci¨® en Cuba en 1964. La entrevista es en espa?ol, con un curioso acento cubano americano. La familia Acevedo emigr¨® a EE UU cuando ¨¦l ten¨ªa cuatro a?os. Creci¨® en California. Desde el a?o pasado, se encuentra al frente de la seguridad de una de las ciudades con m¨¢s inmigrantes del pa¨ªs y con m¨¢s indocumentados (alrededor de 600.000, la tercera despu¨¦s de Nueva York y Los ?ngeles), en medio de un desastre y con el debate de la inmigraci¨®n muy caliente, hasta el punto de que se convirti¨® en una preocupaci¨®n de las autoridades. La furia antiinmigrantes del Gobierno federal y estatal amenazaba con asustar a la gente y que no quisieran salir de sus casas. No ha habido roces pol¨ªticos estos d¨ªas, pero existe una tensi¨®n evidente entre el Gobierno de Texas y las grandes ciudades como Houston, que es ciudad santuario, es decir, que su polic¨ªa no persigue inmigrantes.

¡°Siempre decimos que el debate de la inmigraci¨®n no es m¨¢s que teatro pol¨ªtico¡±, contesta Acevedo. ¡°En esta ciudad, el alcalde Sylvester Turner ha dejado claro que todo el mundo es bienvenido. La gente est¨¢ aqu¨ª para trabajar y ser honrada. A este departamento de polic¨ªa le da igual si est¨¢s aqu¨ª legal o no, nos centramos en el comportamiento. Si cometes un crimen violento o contra la propiedad vamos a ir a por ti como si no hubiera ma?ana, pero si lo ¨²nico que haces es intentar ganarte la vida, la inmigraci¨®n es un tema del Gobierno federal. Esta comunidad sabe que no tiene que temer a este jefe de polic¨ªa, que habla espa?ol y que es un inmigrante. Por ¨²ltimo, para los que dicen que la diversidad es un problema, esta es la ciudad m¨¢s diversa del estado, del pa¨ªs y del mundo, y dime lo que has visto en los ¨²ltimos siete d¨ªas, dime que la diversidad no es hermosa¡±.

Acevedo tiene un mensaje por si queda alguien metido en su casa o que no se atreve a pedir ayuda o acudir a un refugio por miedo a tratar con las autoridades. ¡°Estamos aqu¨ª para ayudar. Hasta nuestros amigos del Departamento de Seguridad Nacional, que est¨¢n aqu¨ª investigando, no est¨¢n haciendo labores rutinarias de inmigraci¨®n, est¨¢n aqu¨ª para buscar y rescatar y para proteger a la comunidad, y eso me lo han dicho a mi directamente el secretario y el director de la zona¡±.