Los referendos de V¨¦neto y Lombard¨ªa sacuden el tablero electoral italiano

Los salones pol¨ªticos de Roma vieron el lunes c¨®mo los viejos fantasmas del norte volv¨ªan a salir del armario. Lombard¨ªa y V¨¦neto, dos de las tres regiones m¨¢s ricas e industrializadas de Italia, exigieron m¨¢s autonom¨ªa el domingo en dos referendos. Es decir, mayores competencias y una parte de los impuestos que equilibre su d¨¦ficit fiscal. La participaci¨®n super¨® la expectativa y vuelve a colocar en el mapa pol¨ªtico italiano, tras a?os desterrado, un inc¨®modo debate a pocos meses para las elecciones.

Los datos confirman el fen¨®meno. La participaci¨®n era la clave para definir el ¨¦xito de dos consultas no vinculantes y previstas en la Constituci¨®n que servir¨¢n para presionar a Roma a la hora de negociar. En Lombard¨ªa, sin un qu¨®rum, votaron tres millones de personas, el 38,26% del censo (un 95,29 % a favor). En V¨¦neto, donde se requer¨ªa superar la mitad m¨¢s uno, se alcanz¨® una afluencia del 57,2%, con un 98,1% de s¨ªes. De modo que los presidentes de ambas regiones, Roberto Maroni (Lombard¨ªa) y Luca Zaia (V¨¦neto), dos viejos zorros de la pol¨ªtica italiana colocados de perfil hasta el ¨²ltimo minuto por si el experimento sal¨ªa mal, se apresuraron en anunciar el punto de inflexi¨®n que supondr¨¢ esta consulta. ¡°El Big Bang de las reformas institucionales¡±, lo defini¨® sin falsas modestias el presidente v¨¦neto.

Las pretensiones de Maroni y Zaia, que cifran el d¨¦ficit fiscal de Lombard¨ªa y V¨¦neto en 54.000 millones y 18.000 millones respectivamente, son muy elevadas. Zaia rompe la baraja y pide directamente el estatuto especial, como ya tienen otras cinco regiones (Trentino-Alto Adigio, Sicilia, Cerde?a, Valle de Aosta y Friuli-Venecia Julia). Maroni reclama el 90% de sus impuestos y el traslado de 23 competencias a una regi¨®n que aporta el 20% del PIB de Italia. Una exigencia completamente inasumible en Roma, que ya lo ha calificado de ¡°provocaci¨®n¡±. Pero es el punto de partida de una nueva batalla pol¨ªtica con un cierto sabor vintage.

El resultado del domingo a?ade un nuevo elemento al incierto escenario pol¨ªtico al que se encamina el pa¨ªs en las pr¨®ximas elecciones de primavera. El proyecto autonomista, en una naci¨®n todav¨ªa muy centralista y con una enorme brecha social y econ¨®mica entre norte y sur, resurge con fuerza en un momento convulso en Europa y en pleno desaf¨ªo soberanista en Catalu?a. Y esta vez la Liga Norte no est¨¢ sola en sus reclamaciones.

Silvio Berlusconi, que interpreta mejor que nadie la m¨²sica que suena en cada momento, apunt¨® a la causa en el ¨²ltimo minuto a Forza Italia. Algunos alcaldes del Partido Democr¨¢tico (PD), como el de Mil¨¢n o B¨¦rgamo tambi¨¦n la secundaron abiertamente. Y la regi¨®n de Emilia-Roma?a, la segunda m¨¢s rica de Italia y un feudo tradicional de la izquierda, ha comenzado tambi¨¦n un proceso para reclamar el traslado de algunas competencias y mejorar su financiaci¨®n. De modo que la corriente pol¨ªtica renacida en el norte amenaza con arrastrar peligrosamente a quien no se apunte, en mayor o menor medida, a este movimiento en las siguientes elecciones. ?C¨®mo conjugarlo con el partido que se juega en el sur?

La incomodidad de Salvini

Justamente, la paradoja del fen¨®meno permite observar la incomodidad de una parte de la Liga Norte, convertida hoy en un partido de corte nacional, soberanista y antiinmigraci¨®n por Matteo Salvini, que ha pasado desapercibido toda la campa?a. Desde que se convirti¨® en su Secretario, como se?ala el profesor de Opini¨®n Publica y Comportamiento Pol¨ªtico de la Universidad Luiss, Lorenzo de Sio, coloc¨® la sordina sobre este tema en el discurso pol¨ªtico del partido. El relato secesionista e insolidario de su fundador fue desapareciendo de la agenda como el propio Umberto Bossi, condenado por robar a su propio partido. ¡°Su partido es hoy una formaci¨®n radical, de derechas y populista con una plataforma nacional. ?l suprimi¨® el acento contra el sur y lo puso sobre los inmigrantes para construir un partido tipo [Marine] Le Pen¡±.

Una jugada que provoc¨® la colisi¨®n soterrada con l¨ªderes como Maroni (exministro de Interior con Berlusconi) o Zaia, guardianes de algunas esencias de la l¨ªnea tradicional de la Liga y que han ganado un gran peso pol¨ªtico este domingo. Una situaci¨®n embarazosa dentro del partido de la que, de nuevo, podr¨¢ sacar partido Silvio Berlusconi cuando toque elegir al l¨ªder de la coalici¨®n de centroderecha que formar¨¢ con la Liga Norte y negocie con un Salvini rodeado de lobos. Un fin de semana, en suma, que sacudir¨¢ todo el tablero pol¨ªtico italiano.