El horrible crimen de Caruana sacude la pol¨ªtica de Malta
Los ciudadanos reclaman responsabilidades al Gobierno, centro de muchas de las revelaciones de la periodista de investigaci¨®n
La muerte de Daphne Caruana, la periodista maltesa que, implacable, se afanaba por sacar a la luz los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n y los conflictos de inter¨¦s de numerosos pol¨ªticos, ha acorralado al Gobierno de Malta. El crimen ha vuelto a poner bajo el foco al primer ministro, el laborista Joseph Muscat, se?alado junto a su esposa y otros miembros del Ejecutivo en muchas de sus revelaciones. Y por tanto tambi¨¦n uno de los primeros nombres en la hipot¨¦tica lista de interesados en su desaparici¨®n. Sin embargo, 15 d¨ªas despu¨¦s del crimen que sacudi¨® no s¨®lo la isla sino todo el mundo, esa lista sigue vac¨ªa. Los investigadores no han apuntado a¨²n a ning¨²n sospechoso del crimen.
Lo ocurrido en el pa¨ªs m¨¢s peque?o de la Uni¨®n Europea, miembro desde 2004 y presidencia de turno hasta hace solo unos meses, preocupa seriamente a las instituciones comunitarias. "Malta debe mostrar a Europa y al mundo que sus reglas y regulaciones son sanas y s¨®lidas", ha recalcado su vicepresidente, Frans Timmermans. Bruselas quiere que Malta agilice las pesquisas y el Parlamento Europeo ha exigido que se ponga en marcha una investigaci¨®n internacional independiente para esclarecer lo ocurrido. De momento, la UE ha enviado a Malta a un grupo de Europol para colaborar con el caso, en el que ya participan expertos del FBI y de la polic¨ªa holandesa.
Tras el asesinato y al saberse se?alado, Muscat prometi¨® justicia para la periodista y su familia. Sin embargo, el esc¨¢ndalo no hizo que cancelase su visita oficial a Emiratos ?rabes para promocionar uno de los programas m¨¢s pol¨¦micos y criticados: la llamada ¡°venta de pasaportes¡±, que otorga la nacionalidad maltesa ¡ªy por tanto entrada libre a la UE¡ª a quienes inviertan grandes cantidades de dinero en el pa¨ªs. Un programa opaco que no es ¨²nico de Malta ¡ªexiste uno similar en Hungr¨ªa, por ejemplo¡ª, apunta la experta de la organizaci¨®n Transparencia Internacional Maggie Murphy, pero que "puede favorecer los casos de corrupci¨®n". Caruana Galizia ya desvel¨® algunos.
¡°Mientras el pa¨ªs estaba de luto Muscat vend¨ªa pasaportes en Dubai. Ese es el Gobierno que tenemos¡±, critica Manuel Delia, antiguo miembro del Partido Nacionalista (ahora en la oposici¨®n) y una de las voces m¨¢s cr¨ªticas con la gesti¨®n del primer ministro y su equipo. Su acusaci¨®n se repite entre otros muchos malteses. En los ¨²ltimos d¨ªas, miles de ciudadanos han salido a las calles para exigir respuestas al crimen de Caruana Galizia. Su asesinato ha conmocionado a la isla en la que la periodista, admirada por muchos y odiada por otros, era una figura muy conocida. ¡°Su muerte es un s¨ªntoma de la tremenda realidad que vive Malta, un pa¨ªs donde es m¨¢s ventajoso tener amigos en puestos altos que una bolsa llena de dinero¡±, critica Paul Pace a las puertas de la sede del Ejecutivo, en una de las concentraciones de los ¨²ltimos d¨ªas.
Varias organizaciones civiles se han movilizado para exigir la dimisi¨®n del jefe de la polic¨ªa maltesa, con v¨ªnculos familiares con un ministro. Tambi¨¦n del fiscal general, que adem¨¢s asesora legalmente al Gobierno. Los ciudadanos, explica la activista Mar¨ªa Pisani, los consideran desacreditados. Pisani es una de las organizadoras de la acampada de mujeres en la plaza principal de La Valeta. All¨ª, entre tiendas de campa?a, termos de caf¨¦ y canciones de The Beattles, explican que aspiran a quedarse hasta que el Gobierno d¨¦ una respuesta clara de Muscat sobre los esc¨¢ndalos que enfrenta la isla. ¡°Esto no puede seguir as¨ª, necesitamos transparencia y justicia¡±, dice una de las acampadas en la Plaza del Castillo. Viste una camiseta blanca con las ¨²ltimas palabras que escribi¨® la periodista en su blog: ¡°Hay criminales donde sea que mires ahora. La situaci¨®n es desesperada¡±. La cita se ha convertido en todo un lema por la transparencia y contra la corrupci¨®n en el pa¨ªs.
La respuesta del Gobierno de Muscat a la oleada de cr¨ªticas ha sido ofrecer una recompensa de un mill¨®n de euros a quien aporte pistas que den con el culpable del asesinato. ¡°No dejaremos piedra sin levantar en nuestros intentos de resolver el brutal crimen¡±, dice un portavoz del Ejecutivo. En el Gabinete de Muscat reconocen que la periodista centr¨® gran parte de sus art¨ªculos en miembros del partido laborista aunque inciden en que en los ¨²ltimos tiempos Caruana Galizia tambi¨¦n escribi¨®, y mucho, sobre el l¨ªder de la oposici¨®n (partido nacionalista). ¡°No hay terreno para la especulaci¨®n en esto¡±, zanja el portavoz del Gobierno. ¡°No entraremos en juegos partidistas¡±, a?ade. El Ejecutivo niega tambi¨¦n que la isla tenga un problema sist¨¦mico de corrupci¨®n y sostiene que ha hecho numerosos cambios legales para perseguirla: desde una modificaci¨®n legal para que estos delitos no prescriban hasta dotar de mayor protecci¨®n a los llamados "filtradores".
Los investigadores del caso Caruana Galizia han dado pocas pistas de las teor¨ªas que barajan. S¨ª se han filtrado algunas, como que el crimen puede estar relacionado con las mafias de contrabando que campan en la isla. Sobre todo de tr¨¢fico ilegal de petr¨®leo. Una tesis que no convence en absoluto a la familia. ¡°Esa historia se ha activado y promovido intencionadamente para ocultar otras¡±, dice una de sus hermanas, Corinne Vella.
Herman Grech, director de la edici¨®n online del diario Times of Malta apunta a las redes del crimen organizado y sostiene que el asesinato de la reportera de investigaci¨®n ha expuesto la magnitud de la infiltraci¨®n de estas organizaciones en la isla. ¡°El coche bomba no solo pretend¨ªa matar a Caruana Galizia. Tambi¨¦n enviar un mensaje vistoso. Un aviso para todos¡±, apunta en la sed del peri¨®dico, un edificio blanco y luminoso a las afueras de la capital. El periodista, sin embargo, afirma que no se siente amenazado y afirma que el Gobierno, por propio inter¨¦s, har¨¢ todo lo posible por resolver el caso que le ha expuesto como un eslab¨®n d¨¦bil en Europa. ¡°Esto es una democracia y no un estado mafioso como algunos han acusado¡±, dice.
Vella no est¨¢ de acuerdo en absoluto. Cree que el Gobierno est¨¢ haciendo todo lo posible para minimizar el impacto del caso de su hermana y evitar que su asesinato sea el punto de inflexi¨®n que el pa¨ªs necesita: ¡°Solo se har¨¢ justicia cuando todas las cosas en las que Daphne Caruana Galizia cre¨ªa ¡ªunas instituciones democr¨¢ticas fuertes, responsabilidad pol¨ªtica, integridad en la ida p¨²bica y una sociedad libre y abierta¡ª reemplacen la situaci¨®n desesperada en la que est¨¢ Malta¡±.
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