Trump sufre una derrota crucial en Alabama por las acusaciones de acoso a su candidato ultra al Senado

Alabama, uno de los rincones m¨¢s conservadores de Am¨¦rica, sufri¨® este martes por la noche un terremoto pol¨ªtico. Doug Jones?se convirti¨® en el primer senador dem¨®crata elegido por este Estado en 25 a?os al derrotar al juez Roy Moore, un fan¨¢tico religioso que recibi¨® varias acusaciones abusos sexuales en plena campa?a. Los l¨ªderes del partido en Washington le hab¨ªan pedido que se retirara, pero Moore, alias La Roca, defendi¨® su inocencia y se neg¨®. Donald Trump le apoy¨® y los republicanos acabaron por cerrar filas en torno al candidato. Ahora, contra pron¨®stico, han perdido una plaza clave en la C¨¢mara alta y recibido una seria advertencia de cara a las elecciones legislativas de 2018: la fidelidad de su base electoral tiene un l¨ªmite, incluso en el viejo sur.

La victoria dem¨®crata no fue holgada. Jones logr¨® el 50% de los sufragios, frente al 48% de Moore, con apenas 20.000 votos de diferencia. Pero el efecto es crucial en el Senado, donde la mayor¨ªa republicana se contrae de 52 a 51 legisladores y los dem¨®cratas pasan a sumar 49. Es un margen escaso para Trump, un presidente con mala relaci¨®n con muchos de sus senadores y que ya ha degustado el fracaso en la C¨¢mara con una de sus promesas estrella, la derogaci¨®n de la reforma sanitaria de Barack Obama.

El movimiento de Estados Unidos contra el acoso sexual, ese vendaval conocido como Me too (Yo tambi¨¦n) que ha tumbado a periodistas, ejecutivos y legisladores, ha mostrado en Alabama que tambi¨¦n puede agitar las urnas. Y la radicalidad del republicano ha sido a su vez penalizada en este feudo conservador. Lo reflejaba el caso de Sonni, una joven de 24 a?os de Montgomery que se declaraba centrista, pero vot¨® al dem¨®crata. ¡°Creo que es mi deber con la sociedad, aqu¨ª la gente vota a su partido y les da igual qui¨¦n es el candidato, pero este hombre no separa Iglesia de Estado y las acusaciones de esas mujeres parecen ciertas, son varias, no solo una".

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El juez considera que la Constituci¨®n de EE UU emana de la Biblia y la legalidad debe adaptarse a lo que dictan las sagradas escrituras. En esta l¨ªnea, no solo rechaza el matrimonio entre personas del mismo sexo, sino que cree que deber¨ªa volver a prohibirse la homosexualidad en s¨ª, una condici¨®n que equipara al bestialismo. No considera que los musulmanes deban ser electos para cargos p¨²blicos y, a su juicio, los atentados del 11-S tuvieron algo que ver con el alejamiento de Dios por parte de la sociedad estadounidense. Y la ¨¦poca en la que ¨¦l piensa que Am¨¦rica era ¡°grande¡± fue aquella ¡°en la que las familias estaban unidas, aunque hubiera esclavitud¡±.

La movilizaci¨®n del voto afroamericano, volcada en Jones, tambi¨¦n result¨® decisiva. El nuevo hombre de Alabama en Washington es un conocido fiscal que proces¨® a los miembros del Ku Klux Klan que atentaron con una bomba en una iglesia baptista de Birmingham, en 1963, y mataron a cuatro ni?as negras. El puesto que ocupar¨¢ en el Senado es el que pertenec¨ªa al ahora fiscal general estadounidense Jeff Sessions, un halc¨®n conservador con un buen historial de acusaciones de racismo y homofobia a la espalda. Pero el republicano que aspiraba a relevarle, Moore, va mucho m¨¢s all¨¢.

Con semejante historial ultraconservador, la investigaci¨®n publicada por The Washington Post a primeros de noviembre, sobre los supuestos contactos sexuales que Moore, cuando ten¨ªa 32 a?os, hab¨ªa mantenido con una chica de 14, supuso un maremoto. Tres mujeres m¨¢s le acusaron despu¨¦s de haberlas acosado tambi¨¦n cuando eran adolescentes.

El juez reun¨ªa, al igual que Trump hace un a?o, los ingredientes necesarios para el fracaso electoral: acusaciones de abuso, un talante incendiario y a los pesos pesados del Partido Republicano en contra. La diferencia, en el caso del juez, es que las encuestas s¨ª le manten¨ªan como ganador m¨¢s probable. Pero, como ocurri¨® hace un a?o con las presidenciales, los sondeos fallaron.

El exultante Doug Jones sali¨® en Birmingham pasadas las 10 de la noche para celebrar un d¨ªa, dijo, "hist¨®rico". "Me siento abrumado. Hemos demostrado, no s¨®lo en el estado de Alabama sino en todo el pa¨ªs, que podemos permanecer unidos", clam¨®. Pero pocos minutos despu¨¦s, en Montgomery, Roy Moore se resist¨ªa a reconocer el resultado. "Cuando el n¨²mero de votos es tan ajustado, la cosa no ha terminado", dijo a sus seguidores, y les conmin¨®: "Lo que debemos hacer es esperar a Dios". La Roca en estado puro.