T¨ªtulos ingeniosos de pel¨ªculas para los nuevos cines de Arabia Saud¨ª
Los tuiteros parafrasean grandes ¨¦xitos en una cr¨ªtica entre jocosa e irreverente del Reino del Desierto
La noticia de que Arabia Saud¨ª levanta la prohibici¨®n a los cines comerciales ha sido celebrada en Twitter con una ristra de ocurrencias sobre qu¨¦ pel¨ªculas van a exhibirse en el pa¨ªs. Bajo la etiqueta #SaudiMovieTitles (t¨ªtulos de pel¨ªculas saud¨ªes), usuarios ocurrentes y bromistas han parafraseado los t¨ªtulos de grandes ¨¦xitos de Hollywood para darles un toque saud¨ª, a menudo cargado de intencionalidad. As¨ª la comedia rom¨¢ntica Comer, rezar, amar se convierte en Comer, rezar cinco veces, amar, en referencia a las cinco plegarias diarias que en el Reino del Desierto paralizan la actividad.
En la misma l¨ªnea S¨¦ lo que comisteis el ¨²ltimo Ramad¨¢n hace un chiste f¨¢cil con el ayuno que los musulmanes guardan en ese mes. Otros, como Noor, van un paso m¨¢s all¨¢ en el sarcasmo y proponen Blancanieves y los siete mehrams; el mehram es el tutor (var¨®n) que toda mujer necesita en Arabia Saud¨ª, donde, a pesar de algunos cambios, la ley a¨²n considera a las f¨¦minas eternas menores de edad.
El tema de la mujer y del desequilibrio de las relaciones entre sexos da mucho juego a los tuiteros, entre los que predominan nombres ¨¢rabes. Se intuye una cr¨ªtica a la poligamia en Las cuatro fant¨¢sticas esposas o en Romeo, Julieta, Aisha, Hawwa y F¨¢tima. En algunos casos, los juegos de palabras son dif¨ªciles de traducir al espa?ol como en 50 Sheikhs of Grey que se refiere al famoso 50 sombras de Grey que juega con la proximidad sonora en ingl¨¦s de la palabra sheikhs (jeques) con la que sustituyen al shades del original. Otros son excesivamente localistas con referencias a los jinns (seres supranaturales en el islam) o a la obsesi¨®n de algunos cl¨¦rigos con el demonio y sus tentaciones.
Los hay desde inocentes, El retorno de Jeddah (por la ciudad saud¨ª que en espa?ol transcribimos como Yedah y que en su pronunciaci¨®n inglesa se acerca a Jedi), hasta irreverentes El bueno, el malo y el chi¨ª (los chi¨ªes son una minor¨ªa discriminada en Arabia Saud¨ª) o El diablo se viste de burqa, que aunque no requiere explicaci¨®n, yerra el tiro porque esa prenda no se usa en el reino.
Algunos incluso se lanzan a la pol¨ªtica e ilustran sus creaciones con im¨¢genes a modo de cartel. Cuando Hariri encontr¨® a Salm¨¢n muestra al primer ministro liban¨¦s saludando al rey saud¨ª con id¨ªlico fondo oto?al; Hariri ha protagonizado una controvertida escena al dimitir desde Riad, para retirar su renuncia poco despu¨¦s de regresar a Beirut, tras dos semanas de incertidumbre y rumores sobre las presiones saud¨ªes. Harry Potter y la piedra filosofal va acompa?ada de una curiosa foto en la que Trump, Salm¨¢n y el dictador egipcio, Abdelfatah al Sisi, ponen sus manos sobre un globo terr¨¢queo y que ya dio que hablar en su d¨ªa.
El joven mago tambi¨¦n da pie a una menci¨®n a la actualidad m¨¢s reciente en Harry Potter y el prisionero del Ritz-Carlton. Si hubiera una pel¨ªcula detr¨¢s, quiz¨¢ concurrir¨ªa al Oscar dado que su amplio elenco de protagonistas, dos centenares, incluye una decena de pr¨ªncipes, magnates, ministros, exministros e incluso se rumorea que una princesa. Material m¨¢s que suficiente para un gui¨®n con intriga y glamur. De nada, por la idea.
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