La alerta de misiles contra Haw¨¢i la activ¨® un funcionario al ¡°apretar el bot¨®n equivocado¡±
Estados Unidos investiga estupefacto el error que avis¨® a toda la poblaci¨®n de Haw¨¢i de que estaba siendo atacada
Unos buscaron refugio para los ni?os. Otros no quisieron asustarlos y trataron de aparentar normalidad, rezando y esperando la muerte. Muchos mandaron mensajes de despedida a sus seres queridos. Durante 38 minutos de angustia, la poblaci¨®n de Haw¨¢i pens¨® que estaba siendo atacada con misiles, porque se lo hab¨ªa dicho su propio Gobierno. La alerta a m¨®viles, enviada por error, deja en el aire preguntas trascendentales sobre los protocolos de aviso a la poblaci¨®n en caso de ataque y las consecuencias que puede tener un fallo como este, precisamente en un momento en que Corea del Norte ha hecho real esa amenaza por primera vez desde la Guerra Fr¨ªa.
A las 8:07 de la ma?ana locales, un n¨²mero indeterminado de tel¨¦fonos m¨®viles en Haw¨¢i recibi¨® el siguiente mensaje de texto del servicio de alertas oficial: ¡°AMENAZA DE MISIL BAL?STICO EN DIRECCI?N A HAW?I. BUSQUE REFUGIO DE INMEDIATO. ESTO NO ES UN SIMULACRO¡±. As¨ª, en may¨²sculas. El avis¨® tambi¨¦n interrumpi¨® la programaci¨®n de televisi¨®n y de radio de forma autom¨¢tica. Algunas alarmas antia¨¦reas tambi¨¦n sonaron, pero no la mayor¨ªa.
La Agencia de Emergencias en Honolulu tard¨® 10 minutos en avisar de que no hab¨ªa ning¨²n misil en direcci¨®n a las islas. Lo hizo en Twitter. Luego llegaron los anuncios por radio y televisi¨®n. Hasta las 8:45 de la ma?ana no envi¨® una nueva alerta a m¨®viles para frenar la histeria y el desconcierto. ¡°Lo que ha ocurrido es totalmente inaceptable¡±, reconoci¨® el gobernador, David Ige, en una rueda de prensa para explicar lo que hab¨ªa pasado.
Seg¨²n la versi¨®n preliminar facilitada por Ige y por Vern Miyagi, el administrador de la agencia, un empleado del servicio de emergencias ¡°apret¨® el bot¨®n equivocado¡± durante un cambio de turno. No hay un procedimiento autom¨¢tico para enviar las alertas. Es un proceso de dos pasos, en el que el sistema avisa: ¡°?Seguro que quieres hacer esto?¡±. Hay alguien al frente de este sistema de alertas las 24 horas del d¨ªa, en tres turnos. Asimismo, se hacen pruebas peri¨®dicamente. En un cambio de turno, el empleado crey¨® que estaba haciendo una prueba. No se dio cuenta del error hasta que recibi¨® la alerta en su propio m¨®vil.
Ige y Miyagi no dijeron si se va a tomar alguna medida disciplinaria contra la persona. ¡°Esto no volver¨¢ a suceder¡±, dijo el gobernador. La primera medida ha sido cambiar el protocolo para enviar las alertas. A partir de ahora, tendr¨¢ que ser revisado por dos personas. La Comisi¨®n Federal de Comunicaciones, que tiene la jurisdicci¨®n sobre los servicios de emergencia, ha anunciado una investigaci¨®n completa de lo sucedido.
Durante m¨¢s de media hora de angustia, la reacci¨®n de la poblaci¨®n dio una idea impactante de lo que ser¨ªa un ataque real contra norteamericanos que nunca han vivido esa amenaza. Stacey Bow contaba a la agencia Reuters que despert¨® a su hija de 16 a?os con la noticia y ¡°se puso hist¨¦rica, llorando¡±. Michael Barstis contaba al Wall Street Journal que su esposa y ¨¦l pasaron esos minutos en el sal¨®n, rezando en silencio, abrazando y besando a sus hijos. ¡°Alguien tiene que pagar por esto¡±, dec¨ªa Barstis.
Algunos de los mejores jugadores de golf del mundo, que estaban en un hotel de Honolulu para participar en un torneo, tuitearon sus reacciones. ¡°Estoy debajo de colchones metido en la ba?era con mi mujer, mi beb¨¦ y mis suegros¡±, tuite¨® John Peterson. ¡°Por favor, Se?or, que la amenaza no sea real¡±. No se ve¨ªa nada igual desde hac¨ªa d¨¦cadas. Haw¨¢i no tiene refugios nucleares.
El error se produce precisamente en Haw¨¢i, el territorio de Estados Unidos m¨¢s expuesto a un posible ataque nuclear de Corea del Norte, lo que contribuy¨® a reforzar la credibilidad de la amenaza. En su ¨²ltimo discurso televisado, el dictador Kim Jong-un asegur¨® que ten¨ªa sobre su mesa un bot¨®n nuclear que utilizar¨ªa para disuadir a Estados Unidos. La verdadera capacidad de ataque con misiles bal¨ªsticos de Corea del Norte es un misterio, pero hay consenso entre los expertos militares en que est¨¢ en condiciones de alcanzar el territorio continental de Estados Unidos y, desde luego, Haw¨¢i. El territorio m¨¢s cercano a la amenaza tiene 1,4 millones de habitantes. Por ahora, las pruebas de misiles que ha hecho Corea del Norte solo han llegado hasta aguas de Jap¨®n.
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