?Est¨¢n conquistando las ratas Par¨ªs?

Algunos medios franceses ironizaban hace unos meses con lo que consideraban una obsesi¨®n de la prensa extranjera con el tema de las ratas en Par¨ªs. Y es cierto que, en comparaci¨®n con otras ciudades, como Nueva York o Washington, donde no hay manera de esquivar a las ratas gigantes que pululan por calles, parques y l¨ªneas de metro, los episodios de ¡°visionado¡± de estos sucios roedores en la capital francesa son m¨¢s contados. Sin embargo, el v¨ªdeo viral grabado por un recolector de basura y publicado este fin de semana, que muestra c¨®mo decenas, si no centenares de ratas se pelean dentro de un contenedor entre bolsas de basura ha hecho saltar las alarmas en la ciudad del glamour. S¨ª, Par¨ªs tiene un problema de ratas que no hay pel¨ªcula de Disney ¡°¨¤ la Ratatouille¡± que pueda maquillar.

David, nombre ficticio bajo el que ha realizado la denuncia el trabajador municipal que distribuy¨® las impactantes im¨¢genes, asegura que lo que vio ¡ªy grab¨®¡ª en diciembre en el distrito VII de Par¨ªs no es una excepci¨®n.

¡°Son enormes y cada vez tienen menos miedo de nosotros¡±, explicaba el trabajador al diario Le Parisien, el primero en publicar este fin de semana un v¨ªdeo que ya han reproducido las cadenas de televisi¨®n. ¡°La prueba es que no han dudado en atacar a varios colegas en diferentes distritos. Una le salt¨® al cuello de un compa?ero, otra (rata) le salt¨® al brazo¡±, asegur¨®.

Que Par¨ªs tiene un problema de ratas es algo que incluso se ha reconocido oficialmente. En diciembre, el Ayuntamiento dirigido por Anne Hidalgo anunci¨® un ¡°plan de acci¨®n inmediato¡± para reducir ¡°significativamente¡± un problema que, reconoc¨ªa la instituci¨®n municipal, es imposible de erradicar por completo, y menos en una ciudad con tantas cuevas, t¨²neles, catacumbas y alcantarillas. El plan de desratizaci¨®n, para el que la ciudad ha destinado 1,5 millones de euros, ha tenido lugar ya en varios puntos de toda la ciudad. Tambi¨¦n est¨¢ en marcha en los jardines de Campo de Marte que llevan hasta la Torre Eiffel y que son uno de los lugares m¨¢s visitados por turistas¡­ y por ratas, que ocupan el parque en cuanto se esconde el sol.

M¨¢s informaci¨®n

El caso Kawczynski, un racista en estado puro

Un restaurante de Venecia cobra 1.143 euros a cuatro japoneses por comer chulet¨®n y pescado

?Surfe¨® Hugo Vau la ola m¨¢s grande jam¨¢s vista hasta la fecha?

El problema de las ratas y Par¨ªs no es nuevo. Le Parisien evocaba este lunes la portada de su diario el 8 de febrero de 1968, en la que, en un gran titular, advert¨ªa de que ¡°200.000 ratas amenazan con invadir Par¨ªs¡±. En el centro de la ciudad se cuenta una media de 1,75 ratas por habitante, dijo el experto Pierre Falgayrac al diario Le Figaro el mes pasado. Sumando, significa una poblaci¨®n de al menos 3,8 millones de roedores en Par¨ªs, en su gran mayor¨ªa ¡ªhasta el 80%¡ª alojadas en las alcantarillas.

La cifra, reconoce el Ayuntamiento ahora, ha aumentado en los ¨²ltimos meses. Uno de los motivos, seg¨²n las autoridades municipales, es una directiva europea que proh¨ªbe el uso de raticidas en cebo granulado. ¡°Eso ha reducido nuestros medios de lucha y hemos tenido que buscar otras soluciones para detener el problema¡±, explic¨® a Le Figaro el jefe de los servicios de salud medioambiental de par¨ªs, George Salines. La lucha antiterrorista tambi¨¦n ha tenido sus efectos secundarios en el problema de las ratas: como medida de seguridad, las papeleras p¨²blicas de Par¨ªs no son armaduras cerradas, sino que consisten en un arco de metal que sostiene una bolsa de pl¨¢stico transparente que cuelga al aire, y que si bien hace m¨¢s dif¨ªcil ocultar armas o artefactos explosivos, tambi¨¦n facilita enormemente las cosas a roedores y otros animales (los gigantescos cuervos que tambi¨¦n pueblan Par¨ªs son otros atacantes asiduos de las papeleras parisinas). La afici¨®n de los parisinos a hacer p¨ªcnic en los parques en cuanto asoma un rayo de sol, o la dejadez de algunos restauradores, que en vez de meter la basura en los contenedores la dejan al lado en la calle, no hace sino agravar el problema.

A todo ello se une otra potencial amenaza: las intensas lluvias que sufre la capital francesa desde hace semanas han provocado una fuerte crecida del r¨ªo Sena, que se ha desbordado en algunas partes del centro de Par¨ªs y han inundado buena parte del h¨¢bitat natural de las ratas, que tendr¨¢n ahora que buscarse un nuevo refugio, m¨¢s cerca de la superficie. Y de los parisinos.