La f¨¢brica de s¨¢trapas
La denuncia del gobernador de Chihuahua ha sido un torpedo en la l¨ªnea de flotaci¨®n de Hacienda, un ministerio que se supon¨ªa al margen de la alternancia pol¨ªtica
?Chihuahua! Es una exclamaci¨®n que algunos mexicanos usan para expresar sorpresa, entusiasmo o molestia. Justo las reacciones que Chihuahua y su gobernador est¨¢n provocando en el pa¨ªs en su cruzada en contra del Ministerio de Hacienda y el uso faccioso y electoral de los recursos fiscales. Durante a?os cre¨ªmos que los gobernadores corruptos eran resultado de la ca¨ªda del presidencialismo y la descentralizaci¨®n, de la ausencia de contrapesos. En su primer a?o Javier Corral, gobernador de Chihuahua, ha mostrado que en realidad los abusos de estos s¨¢trapas regionales fueron producto de un dise?o pol¨ªtico y financiero orquestado desde la federaci¨®n para apoyo del PRI nacional y sus campa?as. En el fondo no fue la descentralizaci¨®n del poder sino la sofisticaci¨®n de la centralizaci¨®n lo que dio lugar a estos abusos.
Veamos. Muchos gobernadores de alternancia suelen emprender investigaciones judiciales sobre la administraci¨®n anterior. Los m¨¢s recientes: Miguel ?ngel Yunes en Veracruz sobre Javier Duarte; Carlos Joaqu¨ªn en Quintana Roo sobre Roberto Borge; y Claudia Pavlovic en Sonora sobre Guillermo Padr¨¦s. Los tres casos derivaron en ordenes de aprehensi¨®n y divulgaron esc¨¢ndalos de corrupci¨®n indignantes. Pero al final queda la impresi¨®n de que tras la llamarada inicial y saciado el apetito de venganza o las promesas de campa?a, los gobernadores dejan que el sistema decida los alcances de las investigaciones. En ¨²ltima instancia, las posibilidades de c¨¢rcel para esos exgobernadores y sus c¨ªrculos de colaboradores y familiares corruptos est¨¢n sujetas a las necesidades de imagen de la presidencia y a los amarres pol¨ªticos que dicte el calendario electoral.
Lo de Javier Corral en Chihuahua ha sido distinto. El gobernador panista no s¨®lo enfil¨® las bater¨ªas en contra de su antecesor priista, C¨¦sar Duarte, un ladr¨®n donde los haya, sino tambi¨¦n contra la estructura federal que provoc¨® las corruptelas. El enfoque de Corral es correcto; hasta ahora todas las "vendettas" se han limitado a los operadores materiales, sin abordar al sistema financiero dise?ado desde el centro para prohijarlos. Ahora se ha puesto en evidencia que la proliferaci¨®n de abusos de los gobernadores no fue resultado de la descentralizaci¨®n de los poderes (algo que hab¨ªamos tomado como un subproducto de la ca¨ªda del r¨¦gimen presidencialista) sino el fruto de una estrategia financiera dise?ada desde el centro y, en ¨²ltima instancia, destinada a favorecer al centro.
El ramo 23, una partida presupuestal ambigua y hasta cierto punto discrecional, existe desde los a?os ochenta pero adquiri¨® niveles astron¨®micos recientemente (en 2016 ejerci¨® el equivalente a poco m¨¢s de 12.000 millones de d¨®lares). Mediante el simple recurso por parte de Hacienda de subestimar sus ingresos del a?o siguiente, logra canalizar a este rubro montos que superan el presupuesto de varias secretar¨ªas. Y, m¨¢s importante, incluye la partida de proyectos para el desarrollo regional que si bien se asigna desde las C¨¢maras (de all¨ª que se le conozca como la partida de "los moches") es la Secretar¨ªa de Hacienda la que los aplica y les da seguimiento. En la pr¨¢ctica una enorme "bolsa chica" que el Gobierno federal y, ahora est¨¢ visto, sus operadores pol¨ªticos ejercen de manera discrecional y de cara a los intereses electorales y facciosos del PRI nacional.
Corral ha puesto en evidencia el puente financiero que se estableci¨® entre funcionarios de Hacienda, de la tesorer¨ªa de Chihuahua y del comit¨¦ nacional del PRI para hacer llegar a ese partido recursos originalmente destinados a aquella entidad. Por desgracia no fue una excepci¨®n. Parte de los delitos que se imputan a los ex gobernadores de Sonora, Quintana Roo o Veracruz, se presume, fueron orquestados por la misma v¨ªa.
La denuncia que ha hecho Javier Corral ha sido un torpedo en la l¨ªnea de flotaci¨®n de Hacienda; un ministerio que se supon¨ªa se manejaba con criterios t¨¦cnicos y al margen de la alternancia pol¨ªtica. Y la respuesta de estos financieros a la acusaci¨®n ha sido por dem¨¢s reveladora y torpe: detuvieron en represalia la asignaci¨®n de recursos del ramo 23 a Chihuahua. Y tampoco es que hubieran detenido mucho, desde que lleg¨® Corral la entidad ha recibido 61 millones de pesos; los otros estados un promedio de 1,023 millones.
El gobernador de Chihuahua ha emprendido una marcha pol¨ªtica a la Ciudad de M¨¦xico en demanda de las partidas que la federaci¨®n ha retenido a su Administraci¨®n. Su lucha es importante, pero lo que verdaderamente est¨¢ en juego es la corrupci¨®n pol¨ªtica end¨¦mica que nunca debi¨® invadir al sistema hacendario de nuestro pa¨ªs. Esperemos que el desenlace de esta marcha sea algo m¨¢s que un cheque de muchos d¨ªgitos.
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