Las redes rusas se activaron para impulsar a la ultraderecha en Italia
Un an¨¢lisis de redes sociales revela c¨®mo medios del Kremlin han fomentado los discursos xen¨®fobos
La maquinaria de injerencias rusa ha centrado sus esfuerzos en los pasados meses en una campa?a de desinformaci¨®n sobre la situaci¨®n migratoria en Italia con el objetivo de impulsar a partidos radicales ante las elecciones generales del domingo. Seg¨²n un an¨¢lisis de 1.055.774 mensajes de 98.191 usuarios en redes sociales al que ha tenido acceso EL PA?S, un entramado de perfiles de activistas contra la inmigraci¨®n y las ONG emplearon sobre todo enlaces publicados por Sputnik, un medio propiedad del Gobierno ruso que opera entre otros idiomas en italiano, para propagar la falsa imagen de una Italia invadida por unos refugiados responsables del desempleo y de la inflaci¨®n, en una crisis agravada por la pasividad de los pol¨ªticos europe¨ªstas y en ¨²ltima instancia por la Uni¨®n Europea.
Algunos ejemplos de las informaciones publicadas por Sputnik son ¡°En 2065 la cuota de inmigrantes en Italia podr¨ªa superar el 40% de la poblaci¨®n total¡± o ¡°El caos de los inmigrantes es el inicio de una guerra social¡±. Alto Data Analytics, una compa?¨ªa internacional centrada en la aplicaci¨®n de big data e inteligencia artificial para el an¨¢lisis de opini¨®n p¨²blica en medios y redes sociales, ha facilitado a este diario un estudio de 3.164 fuentes de contenido como noticias, entradas de blogs y v¨ªdeos con publicaciones entre el 1 de febrero y el 31 de julio de 2017. La conclusi¨®n es que Sputnik ha sido muy influyente a la hora de radicalizar el debate sobre la crisis migratoria. De todos los medios internacionales que operan en Italia, ese medio ruso es el segundo m¨¢s influyente, tras la versi¨®n italiana del Huffington Post, seg¨²n las mediciones de Alto, cuyos algoritmos consideran el n¨²mero de usuarios y la intensidad con la que se comparten los enlaces de los distintos medios en redes sociales de forma similar a como lo har¨ªan los algoritmos de Google.?
El debate sobre la migraci¨®n ha impregnado completamente la campa?a pol¨ªtica italiana dejando apenas espacio para otros temas. Seg¨²n las encuestas, la formaci¨®n que no tenga una posici¨®n clara al respecto no saldr¨¢ en la foto del pr¨®ximo domingo. Un reflejo evidente de los episodios es la tensi¨®n en la calle y en las redes sociales, donde desde hace meses han dejado de existir los matices y triunfan cada vez m¨¢s las posiciones radicalizadas. El auge de La liga, el partido de tintes xen¨®fobos que preside Matteo Salvini y que forma parte de la potente coalici¨®n de centroderecha que lidera Silvio Berlusconi, o Casa Pound, una formaci¨®n declarada abiertamente fascista que aspira a entrar en el Parlamento, son dos ejemplos.
Sputnik fue una parte central pero no la ¨²nica en esa estrategia de desestabilizaci¨®n de Italia. A ese medio ruso se le sum¨® un entramado de peque?os sitios web centrados de forma casi exclusiva en mensajes contra la inmigraci¨®n como ¡®Todos los cr¨ªmenes de los inmigrantes¡¯, ¡®El populista¡¯ o ¡®Italia patria m¨ªa¡¯. Un indicio de la actividad de cuentas automatizadas o bots, utilizadas para viralizar contenido, es que con el doble de integrantes, la comunidad a favor de la inmigraci¨®n public¨® menos de la mitad del contenido que la que se opone a la entrada de refugiados a Italia. En Twitter, una de las redes sociales analizadas, los mensajes contra la inmigraci¨®n supusieron un 68% del total.
En este caso las redes de desinformaci¨®n en la ¨®rbita rusa han operado con el mismo patr¨®n que en otras crisis: fuentes dudosas, expertos sesgados y titulares provocadores, compartidos por decenas de miles de cuentas con la intenci¨®n de viralizar contenido y amplificar un problema. El Parlamento brit¨¢nico est¨¢ analizando su influencia en el refer¨¦ndum del Brexit y lo mismo ha hecho el Congreso espa?ol sobre su actividad en la crisis independentista en Catalu?a. En EE UU, un fiscal especial investiga su papel en la elecci¨®n de Donald Trump.
En 2016, cuando la crisis migratoria lleg¨® a su punto ¨¢lgido con 181.436 desembarcos (seg¨²n datos del Ministerio del Interior), Italia se encontraba ya en una situaci¨®n cr¨ªtica. La previsi¨®n era que en 2017 aumentase otro 30%, un augurio que condujo al auge del populismo de tinte racista en el discurso de la mayor¨ªa de los partidos pol¨ªticos. De hecho, la deriva alcanz¨® al propio Gobierno, incapaz de sacar adelante una ley fundamental para otorgar la ciudadan¨ªa a los hijos de inmigrantes. Pero, sobre todo, dio alas al discurso m¨¢s radical alimentado por La Liga, que se hizo con el control del relato y comenz¨® a dispararse en las encuestas.
Quienes compartieron las informaciones de Sputnik fueron en un 90% los perfiles que se dedican habitualmente a diseminar mensajes contra la inmigraci¨®n en italiano. Seg¨²n el an¨¢lisis de Alto, ¡°los mensajes de esta comunidad relacionan estrechamente la inmigraci¨®n con inseguridad, criminalidad y terrorismo y, en algunos casos, con teor¨ªas de la conspiraci¨®n como que la crisis migratoria es parte de una estrategia mayor para desestabilizar el pa¨ªs¡±.?
Uno de los mayores temores del actual Gobierno de Paolo Gentiloni y del socialdem¨®crata Partido Democratico (PD) era que la campa?a electoral terminase monopolizada por el debate migratorio. Un territorio f¨¦rtil para el auge de la extrema derecha y el discurso de la Liga y Hermanos de Italia, los dos partidos que forman la coalici¨®n de centroderecha junto Silvio Berlusconi, que hoy lidera todas las encuestas, rozando la mayor¨ªa absoluta. Por eso el ministro del Interior, Marco Minniti, dise?¨® un plan a dos bandas con el Gobierno libio y el ej¨¦rcito para frenar las llegadas. Funcion¨®. Ya partir de julio la guardia costera empez¨® a actuar y cayeron radicalmente las llegadas. Finalmente se cerr¨® el a?o con 119.369 desembarcos y la tensi¨®n social se redujo notablemente.
Pero el pasado 4 de febrero, justo un mes antes de las elecciones, un suceso mand¨® al garete todo ese trabajo. Un joven de 28 a?os, candidato de la Liga en un pueblo del norte, dispar¨® desde la ventanilla de su coche contra varios inmigrantes africanos que paseaban por el centro de Macerata hiriendo a seis de ellos. En un sorprendente giro de guion, la Liga consigui¨® adue?arse de nuevo del discurso y culpar del suceso a la tensi¨®n social provocada por la inmigraci¨®n.
En una pr¨¢ctica habitual en su injerencia en otros pa¨ªses como Alemania, Rusia ha cultivado sus relaciones con los partidos a ambos extremos del espectro pol¨ªtico en Italia. Sus v¨ªnculos con la Liga de Salvini y con el populista Movimiento Cinco Estrellas han sido evidentes desde hace dos a?os. Salvini se vio en marzo de 2017 con Sergei Zheleznyak, encargado en el Kremlin de las relaciones con los partidos europeos. Ese d¨ªa se firm¨® un acuerdo que llevaba gest¨¢ndose meses, tambi¨¦n a trav¨¦s de las muestras de admiraci¨®n de Salvini a Vladimir Putin (¡°Es un grande, y lo digo gratis¡±) y de la promesa electoral de romper los embargos comerciales a Rusia, que seg¨²n el l¨ªder de la Liga le ha costado a Italia 5.000 millones de euros y que, realmente, han tenido una incidencia en las empresas italianas de carne y tejidos.
El texto hablaba de ¡°cooperaci¨®n en materia de seguridad, la defensa de los valores tradicionales y futura cooperaci¨®n econ¨®mica entre Italia y Rusia¡±. Una idea que puede verse tambi¨¦n en todos los documentos firmados con el Frente Nacional (FN) de Marine Le Pen o con los ultraderechistas del Partido de la Libertad de Austria. Ambos, como la liga y Movimiento 5 Estrellas, beligerantes con la Uni¨®n Europea.
C¨®mo se intoxic¨® el debate sobre la inmigraci¨®n en Italia
Sputnik, la agencia de noticias del Kremlin, y el canal de televisi¨®n RT, se sit¨²an entre los 100 medios m¨¢s influyentes en el relato anti inmigraci¨®n, seg¨²n el an¨¢lisis de la compa?¨ªa Alto Data Analytics que consider¨® m¨¢s de 3.100 fuentes de contenido.
Algunos titulares de art¨ªculos publicados por la versi¨®n italiana de Sputnik en el ¨²ltimo a?o llevaban por t¨ªtulo: "Inmigraci¨®n, es mejor vivir sin coraz¨®n que perder tu pa¨ªs", "En 2065 la cuota de inmigrantes en Italia podr¨ªa exceder el 40% de la poblaci¨®n", o "La Uni¨®n Europea como Poncio Pilatos. Italia afronta sola la encrucijada de los flujos migratorios".
Seg¨²n el an¨¢lisis de Alto, la versi¨®n italiana de Sputnik es el segundo medio extranjero m¨¢s influyente en el debate digital italiano, solo por detr¨¢s de la web estadounidense Huffington Post. Considerando medios dom¨¦sticos e internacionales, Sputnik se sit¨²a en el puesto n¨²mero 40 de influencia seg¨²n el an¨¢lisis de Alto Data Analytics que se basa en un algoritmo similar al que usa Google para clasificar la relevancia de las webs.
El estudio de Alto refleja que Sputnik consigue una influencia desproporcionada en la conversaci¨®n digital italiana a pesar de que tiene poco m¨¢s de 45.000 seguidores en Facebook y algo m¨¢s de 6.300 seguidores en Twitter. Este impacto se explica por una participaci¨®n muy activa de un reducido n¨²mero de cuentas influyentes de usuarios anti-inmigrantes. A pesar de que los usuarios anti-inmigrantes en Italia son solo un 32% en Twitter, sus tuits representan m¨¢s de dos tercios de la conversaci¨®n, indica Alto.
La versi¨®n italiana de Sputnik es una de las m¨¢s de 30 versiones en idiomas de la agencia rusa, que tambi¨¦n tiene servicios en ingl¨¦s, espa?ol, alem¨¢n, franc¨¦s, chino y ¨¢rabe. El canal RT no tiene una versi¨®n en italiano, pero sus versiones en ingl¨¦s o espa?ol son seguidas en Twitter por millones de cuentas. Con su difusi¨®n de contenido extremo, Sputnik y RT se suman a una multitud de medios digitales nuevos que contribuyen a la polarizaci¨®n del debate, reforzando narrativas locales, concluye el an¨¢lisis de Alto.
"Sputnik y RT se han convertido en una fuente m¨¢s para esos votantes radicalizados que buscan cualquier excusa para conseguir pruebas de que los inmigrantes son malos", le dijo a EL PA?S Eleonora Tafuro Ambrosetti, investigadora del centro de Mil¨¢n Instituto para los Estudios Pol¨ªticos Internacionales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
M¨¢s informaci¨®n
Archivado En
- La Liga (partido pol¨ªtico)
- Russia Today
- Elecciones Italia
- Italia
- Refugiados
- Inmigraci¨®n
- V¨ªctimas guerra
- Cadenas televisi¨®n
- Europa occidental
- Migraci¨®n
- Partidos pol¨ªticos
- Demograf¨ªa
- Uni¨®n Europea
- Elecciones
- Europa
- Conflictos
- Organizaciones internacionales
- Televisi¨®n
- Pol¨ªtica
- Relaciones exteriores
- Medios comunicaci¨®n
- Sociedad
- Comunicaci¨®n