Ortega propone a EE UU adelantar las elecciones en Nicaragua mientras sigue la violencia
Las huestes del Frente Sandinista asedian Managua. La crisis deja 146 muertos y m¨¢s de 1.000 heridos
La madruga del martes despertaron en Managua los fantasmas de la violencia revolucionaria de finales de los a?os setenta, cuando la guerrilla sandinista luchaba por sacar del poder al dictador Somoza. Los barrios orientales de la capital, heroicos en aquella ¨¦pica, vivieron horas de zozobra tras el asedio de las huestes del Frente Sandinista, grupos irregulares que han sido armados para generar violencia y terror. Estos grupos act¨²an con impunidad, con la protecci¨®n de la Polic¨ªa Nacional ¨Cbajo el mando del presidente Daniel Ortega. Los disparos y r¨¢fagas sonaron en una jornada de violencia que la capital de Nicaragua no hab¨ªa vivido en d¨¦cadas. De esta manera el presidente Ortega mantiene la represi¨®n en Nicaragua, mientras se supo que hab¨ªa propuesto a Estados Unidos un adelanto de las elecciones, previstas para 2021, como una salida a la profunda crisis que ha dejado ya 146 muertos y m¨¢s de mil heridos, seg¨²n el recuento del Centro Nicarag¨¹ense de Derechos Humanos (CENIDH).
Los pobladores de los barrios orientales de la capital han decidido levantar barricadas como forma de protecci¨®n ante el asalto de los grupos irregulares del Frente Sandinista. Esa ha sido la respuesta pac¨ªfica de la poblaci¨®n frente a la violencia patrocinada desde el Estado. Los videos colgados en las redes sociales muestran a hombres armados con pistolas y algunos con fusiles AK-47 patrullando las calles, algunos acompa?ados de oficiales de la Polic¨ªa Nacional. En Reparto San Juan, uno de los barrios localizados al sureste de la capital, durante la madrugada del martes se escucharon r¨¢fagas y disparos de bala, que generaron terror en una zona de la ciudad supuestamente segura, llena de bares, restaurantes y hoteles. ¡°Antes me sent¨ªa segura aqu¨ª, pero ahora es un golpe levantarse al sonido de las balas. El p¨¢nico entra, porque no sabes de d¨®nde vienen las balas o si pueden entrar a tu casa¡±, dijo Tamara Espinoza, habitante del San Juan.
La violencia tambi¨¦n ha golpeado a otras regiones del pa¨ªs. En Jinotega, importante zona productora de caf¨¦, se reporta un muerto tras el ataque de las huestes del Gobierno a las barricadas levantadas por los pobladores, mientras que el asedio se mantiene en S¨¦baco, regi¨®n productora de granos y hortalizas, donde se reportan dos muertos que no hab¨ªan sido confirmados por las organizaciones de derechos humanos.
Los periodistas tambi¨¦n han sufrido las consecuencias de esta violencia. Josu¨¦ Garay, redactor del diario La Prensa de la capital, dijo a EL PA?S que fue asaltado y golpeado la madrugada del domingo, cuando dorm¨ªa en su casa. El relato del periodista es tenebroso: ¡°Me agarraron de una mano y me sacaron de mi cama. Me dijeron: "Mir¨¢ hijueputa es mejor que te call¨¦s, si grit¨¢s ya mismo te partimos (matamos). Danos el celular, mierda". Ya cuando se lo d¨ª me dijeron que les entregue mis papeles, sobre todo el pasaporte. Cuando les pregunto para qu¨¦ lo quieren uno de ellos me agarra del cuello y me lanza contra la pared. Mientras el otro me pega con un tubo en la boca. Cuando comenc¨¦ a sangrar me puse nervioso y les entregu¨¦ el pasaporte. Tambi¨¦n revisaron debajo de mi almohada y se llevaron mi billetera¡±.
Garay ya hab¨ªa recibido a amenazas. En una ocasi¨®n miembros de la llamada Juventud Sandinista, las huestes de Ortega, le dijeron "vas aparecer un d¨ªa incendiado¡±. El periodista identific¨® a uno de los hombres que los atacaron como miembro de ese grupo progubernamental. "No es delincuencia com¨²n", dijo el reportero, a quien dejaron, sangrando, tirado en el jard¨ªn de su casa. "Ojal¨¢ as¨ª escarmiente", dijeron los hombres al marcharse, recuerda Garay. El lunes tambi¨¦n fueron asaltados, mientras cubr¨ªan el asedio de Managua, Jorge Cabrera, fot¨®grafo de Reuters, y Arnaldo Arita Salinas, c¨¢mara de CNN. Denunciaron que les robaron sus equipos de trabajo.
Mientras la violencia estremece todo el pa¨ªs, el presidente Daniel Ortega ofreci¨® a los Estados Unidos una propuesta para adelantar las elecciones, como una salida a la crisis pol¨ªtica. El fin de semana la embajadora estadounidense en Managua, Laura Dogu y Caleb McCarry, delegado del Comit¨¦ de Relaciones Exteriores del Senado enviado a Managua, se reunieron con los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y la Alianza C¨ªvica ¨Cque re¨²ne a estudiantes, empresarios, campesinos, acad¨¦micos y representantes de la sociedad civil, que participan en el llamado Di¨¢logo Nacional que pretende hallar una soluci¨®n a la crisis¨C, a quienes les informaron sobre la propuesta de Ortega. El mandatario, de discurso antiimperialista y cr¨ªtico de Estados Unidos ¨Cpotencia a la que hasta unos meses culpaba de todos los males que sufre Nicaragua¨C parad¨®jicamente buscaba un Washington un puente que le permita salir del pantano en el que se ha hundido tras reprimir con violencia las manifestaciones en su contra.
Uno de los participantes en la reuni¨®n con Dogu y McCarry fue Medardo Mairena, coordinador del movimiento campesino denominado Consejo Nacional por la Defensa de la Tierra. Dijo en una comunicaci¨®n con los miembros de su organizaci¨®n que rechazaba la propuesta de Ortega a Washington. ¡°Ortega est¨¢ proponiendo adelantar las elecciones, cuando nosotros estamos pidiendo su renuncia¡±, dijo Mairena. ¡°Si ¨¦l est¨¢ diciendo que adelanta elecciones, que permite que sean supervisadas, con todas las garant¨ªas, eso es un adelanto producto de la presi¨®n que mantenemos, pero nosotros continuamos firmes, porque no podemos seguir esperando que ¨¦l siga gobernando, porque nos est¨¢ matando¡±, agreg¨® el l¨ªder campesino. Fuentes pol¨ªticas informaron que Ortega podr¨ªa pronunciarse este martes en relaci¨®n a la agenda de reformas que el pasado jueves le presentaron los obispos. El mandatario pidi¨® 48 horas de ¡°reflexi¨®n¡± que se extendieron a m¨¢s de 72 horas mientras manten¨ªa el asedio y la represi¨®n en toda Nicaragua.
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