El Supremo de EE UU respalda el veto migratorio de Trump
El presidente prohibi¨® la entrada al pa¨ªs a inmigrantes de cinco pa¨ªses de mayor¨ªa musulmana
El Tribunal Supremo de Estados Unidos dio este martes un gran espaldarazo a Donald Trump al bendecir su pol¨¦mico veto migratorio para siete pa¨ªses, cinco de ellos de mayor¨ªa musulmana, por no considerarlo discriminatorio ni un exceso de poder presidencial. La mayor¨ªa conservadora del alto tribunal, con cinco votos a favor y cuatro en contra, ha permitido resolver a favor del presidente la que ha sido una de sus principales cruzadas desde que lleg¨® a la Casa Blanca. Dem¨®cratas y organizaciones de derechos civiles han protestado.
La batalla por el veto migratorio de Trump comenz¨® justo una semana despu¨¦s de su llegada a la Casa Blanca. El 27 de enero de 2017 la nueva Administraci¨®n desat¨® un caos en los aeropuertos y una ola de protestas al aprobar el veto de entrada durante 120 d¨ªas a ciudadanos de siete pa¨ªses de mayor¨ªa musulmana(Ir¨¢n, Irak, Libia, Somalia, Sud¨¢n, Siria y Yemen) con el argumento de la seguridad nacional. Para los sirios, el veto era indefinido.
Los tribunales no tardaron en tumbarlo por considerarlo discriminatorio contra ciudadanos de una religi¨®n. A los pocos meses aprob¨® una nueva orden ejecutiva algo descafeinada (era de 90 d¨ªas, exclu¨ªa a Irak y a aquellos que ya eran poseedores de un visado y, adem¨¢s, limitaba el veto a los sirios), que tambi¨¦n fue suspendida por los jueces de instancias inferiores al Supremo. La tercera versi¨®n, una proclamaci¨®n presidencial aprobada el pasado septiembre, afectaba a cinco pa¨ªses mayoritariamente musulmanes (Ir¨¢n, Libia, Somalia, Siria y Yemen), fue a su vez congelada por jueves de Hawa? y Maryland.
SUPREME COURT UPHOLDS TRUMP TRAVEL BAN. Wow!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 26, 2018
Para Trump, la resoluci¨®n representa un espaldarazo de especial relevancia en este un momento convulso de su pol¨ªtica migratoria, cuya ¨²ltima pol¨¦mica, la separaci¨®n de ni?os y padres indocumentados, le ha llevado a tener que rectificar su doctrina de tolerancia cero en la frontera. ¡°Esta decisi¨®n supone tambi¨¦n un momento de reivindicaci¨®n especial despu¨¦s de meses de comentarios hist¨¦ricos de los medios de comunicaci¨®n y de pol¨ªticos dem¨®cratas que rechazan hacer lo que se necesita para asegurar nuestra frontera y nuestro pa¨ªs¡±, dijo el presidente en su comunicado.
El Supremo considera que el veto migratorio no vulnera la primera enmienda de la Constituci¨®n, que impide al Gobierno favorecer a una religi¨®n frente a otra, y ratifica el poder presidencial a la hora de decidir qui¨¦n entra en EE UU. Durante la campa?a electoral, como candidato, el propio Trump hab¨ªa dado argumentos a los detractores de este veto al afirmar que hab¨ªa que prohibir la entrada al pa¨ªs de ¡°los musulmanes¡± -citados de forma gen¨¦rica- para reducir los riesgos del terrorismo islamista.
El juez encargado de escribir la opini¨®n mayoritario de los jueces, John Roberts, recalc¨® que la resoluci¨®n no aborda la solidez o congruencia de la pol¨ªtica promovida en s¨ª por el veto, sino que considera que la suspensi¨®n de la entrada de un extranjero al pa¨ªs supone un acto leg¨ªtimo de ¡°la autoridad ejecutiva¡± que podr¨ªa haber sido ¡°adoptado por cualquier otro presidente¡±.
En la victoria judicial de Trump ha resultado clave la mayor¨ªa conservadora del Supremo, asegurada en 2017 despu¨¦s de que el presidente republicano, ya instalado en la Casa Blanca, nominase a Neil Gorsuch. Este jurista relev¨® a Antonin Scalia, el juez fallecido en febrero de 2016, cuando todav¨ªa faltaba casi un a?o para que Obama dejara la presidencia. Los republicanos bloquearon en el Congreso la nominaci¨®n del juez Merrick Garland, propuesta por Barack Obama, y dejaron el campo libre para que un futuro presidente republicano pudiera elegir al nuevo juez del Supremo.
La divisi¨®n se hizo palpable este martes, con la disensi¨®n de los cuatro jueces considerados progresistas (Sonia Sotomayor, Stephen Breyer, Ruth Bader Ginsburg y Elena Kagan) . Sotomayor, que emiti¨® la opini¨®n discrepante, insisti¨® en el ¡°¨¢nimo antimusulm¨¢n¡± de la proclamaci¨®n presidencial y compar¨® esta decisi¨®n del Supremo con la que en 1944 -en el caso conocido como Korematsu contra EE UU- dio por buena la detenci¨®n de japoneses-americanos durante la Segunda Guerra Mundial.
El argumento de la Administraci¨®n estribaba en que la decisi¨®n no atend¨ªa a la religi¨®n, sino al peligro para la seguridad nacional, la fiabilidad de los pasaportes o la fluidez en el intercambio de informaci¨®n sobre sospechas terroristas y antecedentes criminales, entre otros. Para las asociaciones de derechos civiles, sin embargo, supone una limitaci¨®n desproporcionada, basada en prejuicios islam¨®fobos y que a la postre afecta a m¨¢s de 100 millones de personas.
El Supremo ya hab¨ªa dado ox¨ªgeno al veto migratorio de Trump antes de la resoluci¨®n final. El pasado junio acept¨® el caso y, mientras resolv¨ªa, levant¨® la suspensi¨®n temporal del grueso de aquella normativa. La conocida como tercera versi¨®n del veto, tambi¨¦n paralizada por jueces de primera instancia, entr¨® en vigor en diciembre por decisi¨®n del alto tribunal.
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