Estados Unidos recupera las sanciones a Ir¨¢n y apoya las protestas ciudadanas

Trump cerr¨® orgulloso?este lunes una etapa en la geopol¨ªtica estadounidense y afianz¨® su brecha con Europa, que apuesta por mantener vivo el acuerdo nuclear con Ir¨¢n. Tras anunciar en mayo la salida de EE UU del pacto, el martes entra en vigor la primera fase de las sanciones y en noviembre se reactivar¨¢n las penalizaciones petroleras y de transporte. La Administraci¨®n republicana entierra definitivamente el incipiente deshielo con Ir¨¢n del anterior Gobierno del dem¨®crata Barack Obama, cristalizado en el acuerdo de 2015 entre Teher¨¢n, Washington y otras cinco potencias. La Casa Blanca vuelve a la pol¨ªtica de mano dura, bajo el dogma de que es la ¨²nica v¨ªa para lograr una suerte de rendici¨®n completa de la c¨²pula clerical iran¨ª.

Sin embargo, Brett Bruen, un diplom¨¢tico que trabaj¨® como responsable de comunicaci¨®n global de la Casa Blanca de Obama, considera que EE UU pagar¨¢ un ¡°alto precio¡± por la p¨¦rdida de credibilidad al retirarse del acuerdo y porque es probable que Ir¨¢n aumente su ofensiva cibern¨¦tica contra EE UU o su apoyo a rivales en Oriente Pr¨®ximo. ¡°Es una apuesta peligrosa. Washington est¨¢ en general actuando solo y sin mucha planificaci¨®n¡±, escribe en un correo.

El diagn¨®stico de Trump es victorioso. ¡°El r¨¦gimen iran¨ª afronta una elecci¨®n: cambia su comportamiento amenazante y desestabilizador y se reintegra en la econom¨ªa global, o bien contin¨²a por una senda de aislamiento econ¨®mico¡±, se?al¨® en un comunicado. ¡°Mientras continuamos aplicando m¨¢xima presi¨®n econ¨®mica al r¨¦gimen iran¨ª, sigo abierto a alcanzar un acuerdo m¨¢s completo que aborde el rango completo de las actividades malignas del r¨¦gimen, incluyendo su programa de misiles bal¨ªsticos y su apoyo al terrorismo¡±.

Ese escenario, sin embargo, parece improbable por las din¨¢micas diplom¨¢ticas y porque ya fue la presi¨®n internacional la que llev¨® a Teher¨¢n a negociar sobre su programa at¨®mico. A preguntas de una periodista, Trump se mostr¨® dispuesto la semana pasada a reunirse, ¡°sin precondiciones¡±, con el presidente iran¨ª. Pero Hasan Rohan¨ª reiter¨® este lunes que no conf¨ªa en el republicano y que no tiene nada que negociar con Washington.

Tambi¨¦n John Bolton, el consejero de Seguridad Nacional de Trump y que en el pasado abog¨® por bombardear las instalaciones nucleares de Ir¨¢n, elev¨® este lunes el tono ante Teher¨¢n. En una entrevista televisiva, asegur¨® que el r¨¦gimen est¨¢ en un ¡°terreno muy inestable¡±, que ¡°si fuera serio vendr¨ªa a la mesa [de negociaci¨®n]¡± con EE UU y especul¨® con si la Guardia Revolucionaria, a ¨®rdenes del ayatol¨¢ Ali Jamenei, ¡°usar¨¢ la fuerza contra su propia gente¡±.

El rial ha perdido la mitad de su valor desde abril por temor a las nuevas sanciones. La debacle de la moneda, junto a la creciente inflaci¨®n y la p¨¦rdida de inversi¨®n extranjera, ha propiciado manifestaciones espor¨¢dicas en Ir¨¢n contra la corrupci¨®n y la situaci¨®n econ¨®mica, incluidos c¨¢nticos contra el Gobierno. La Administraci¨®n de Trump no esconde su satisfacci¨®n por el malestar social. ¡°Nuestra pol¨ªtica no busca un cambio de r¨¦gimen sino de comportamiento¡±, dijo un alto cargo en una conferencia telef¨®nica con periodistas. A¨²n as¨ª, se?al¨® que Washington ¡°apoya las demandas¡± de los manifestantes y el ¡°derecho a protestar contra la corrupci¨®n y la opresi¨®n¡±.

Trump y los republicanos consideran que el pacto de 2015 era demasiado ben¨¦volo con Teher¨¢n al permitir reanudar en el futuro el enriquecimiento de uranio y no abordar otros asuntos, como el apoyo a Hezbol¨¢ en L¨ªbano o al dictador sirio Bachar el Asad. En la misma conferencia, el alto cargo sostuvo que ¡°terroristas, dictadores y milicianos¡± fueron los m¨¢s beneficiados del levantamiento de sanciones. Los defensores del pacto esgrimen que era ut¨®pico abordar todas esas cuestiones.