Los 15.000 ojos que observan las emergencias de Ciudad de M¨¦xico
El C5 vigila y coordina el simulacro del terremoto del 19-S en la capital mexicana
Parece un escenario de una pel¨ªcula de ciencia ficci¨®n. Dentro de una gran habitaci¨®n blanca y circular, cubierta por una c¨²pula, se encuentran, al centro y arriba, grandes pantallas que ofrecen una visi¨®n panor¨¢mica de la Ciudad de M¨¦xico. La segunda urbe m¨¢s grande de Am¨¦rica con m¨¢s de 21 millones de habitantes es observada por 15.000 c¨¢maras durante 24 horas, los 365 d¨ªas del a?o, por decenas de miembros de la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica.
Se trata del C5, el Centro de Comando, Control, C¨®mputo, Comunicaciones y Contacto de la Ciudad de M¨¦xico, desde donde se reciben los reportes en caso de emergencia y se concentra el comit¨¦ de emergencias de la capital y del Gobierno federal. Este mi¨¦rcoles se?coordinaron desde all¨ª las acciones del simulacro de un sismo magnitud 7.2 con epicentro a 189 kil¨®metros de Ciudad de M¨¦xico. Primero, se activ¨® una alerta de "sismo fuerte" a las 13:16 horas, lo que hizo sonar las 12.352 alarmas en la capital. Las pantallas mostraban a miles salir de sus sitios de trabajo como si se tratara de un hormiguero.
Una c¨¢maras enfoc¨® la esquina de Reforma e Insurgentes, el cruce de dos de la avenidas m¨¢s importantes de la Ciudad. Un helic¨®ptero aterriz¨® sobre el pavimento para llevar a cabo un rescate de un herido tras un hipot¨¦tico derrumbe.
Hace un a?o, el 19 de septiembre de 2017, a las 13.14 de la tarde, estas c¨¢maras fueron testigo del sismo que sacudi¨® el centro del pa¨ªs. Captaron, por ejemplo, cuando un edificio se convirti¨® en una monta?a de escombros en la esquina de Bol¨ªvar y Chimalpopoca, donde hab¨ªa una maquiladora textil y una importadora de juguetes. Vieron, en las esquinas de Medell¨ªn y San Luis Potos¨ª, en la colonia Roma, c¨®mo se desplom¨® un edificio 51 minutos despu¨¦s de comenzar el temblor. Tambi¨¦n, cuando en la calle ?msterdam, esquina Laredo, en la Condesa, las personas comenzaron a desalojar sus casas y oficinas para presenciar otro derrumbe.
¡°Desde el inicio del sismo monitoreamos la ciudad y, a los 10 minutos, ya ten¨ªamos ubicados la mayor¨ªa de los derrumbes que hab¨ªan ocurrido. Trabajamos en la sala de crisis hasta el 4 de octubre, cuando se recuper¨® a la ¨²ltima persona que perdi¨® la vida en ?lvaro Obreg¨®n 286¡±, recuerda Idris Rodr¨ªguez Zapata, coordinador general del C5.
De no contar con este sistema, como ocurri¨® 32 a?os antes en el terremoto de 1985, se tardar¨ªa al menos tres horas en obtener un panorama general del desastre. Sin embargo, las c¨¢maras permitieron tener en 10 minutos informaci¨®n de derrumbes, fallas de energ¨ªa el¨¦ctrica, transporte, congestionamientos viales y afectaciones generales.
Durante el simulacro de esta tarde, las pantallas del C5 mostraban un mapa de M¨¦xico con el 95% de las alertas s¨ªsmicas en funcionamiento, mientras los 20.000 coordinadores iban de una esquina a otra para atender las eventualidades reportadas en el tel¨¦fono de emergencia 911.?
El C5 recibe diariamente unas 33.000 llamadas al 911. Solo 5.500 son reales. Hay tambi¨¦n 10.000 botones de auxilio instalados en los postes de las c¨¢maras. Las bocinas, adem¨¢s de transmitir la alerta s¨ªsmica, funcionan para vocear personas extraviadas. El Sistema de Transporte Colectivo Metro tiene adem¨¢s otras 6.000 c¨¢maras.?
El C5, creado en 2009, cuenta con m¨¢s de 1.300 despachadores de emergencias, m¨¢s unos 150 operadores telef¨®nicos. Las c¨¢maras guardan entre una semana y 30 d¨ªas el archivo grabado, aunque las autoridades aceptan que el equipo actual es obsoleto. ¡°Estamos hablando de tecnolog¨ªa que tiene 9 a?os¡±, dice Idris Rodr¨ªguez Zapata. La futura jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, ha convocado a un consejo cient¨ªfico para mejorar el centro e iniciar un proceso de innovaci¨®n, digitalizaci¨®n y visi¨®n estrat¨¦gica de conectividad.?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.