Venezuela pedir¨¢ a Espa?a una extradici¨®n por el ataque a Maduro

El Gobierno venezolano trata de convertir el atentado fallido contra Nicol¨¢s Maduro en un caso internacional a partir del testimonio de algunos de los detenidos. El l¨ªder chavista asegur¨® la noche de este lunes que pedir¨¢ a Espa?a la extradici¨®n de uno de los supuestos implicados en el ataque, llevado a cabo con drones el pasado 4 de agosto durante una parada militar. Maduro, que en una intervenci¨®n televisada de m¨¢s de una hora dio unos detalles de la operaci¨®n que llev¨® al arresto de 28 sospechosos, no identific¨® a esa persona. Se limit¨® a se?alar el motivo de la solicitud. Estaba, dijo, "directamente desde Espa?a dirigiendo las operaciones para proteger a los terroristas despu¨¦s del atentado".

El sucesor de Hugo Ch¨¢vez insisti¨® en se?alar a los cuerpos diplom¨¢ticos de M¨¦xico, Colombia y Chile un d¨ªa despu¨¦s de que el ministro de Comunicaci¨®n, Jorge Rodr¨ªguez, los vinculara a la organizaci¨®n de lo que el aparato oficialista llama "magnicidio en grado de frustraci¨®n". El r¨¦gimen sufre los efectos de una crisis econ¨®mica sin precedentes en el pa¨ªs y una nefasta gesti¨®n que han forzado un ¨¦xodo multitudinario. Solo en la vecina Colombia hay, seg¨²n c¨¢lculos oficiales, un mill¨®n de venezolanos huidos en busca de oportunidades. Esta circunstancia ha contribuido a elevar la tensi¨®n, en algunos casos hasta romper relaciones, con la mayor¨ªa de los pa¨ªses de la regi¨®n. Pero Maduro da ahora un paso m¨¢s al lanzar unas grav¨ªsimas acusaciones que los Gobiernos de Iv¨¢n Duque, Enrique Pe?a Nieto y Sebasti¨¢n Pi?era ya han rechazado categ¨®ricamente.

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Todo se basa en el testimonio de uno de los detenidos, una confesi¨®n grabada y difundida por las autoridades. En el v¨ªdeo, Henryberth Rivas Vivas, alias Morfeo, se refiere a un supuesto apoyo log¨ªstico de las Embajadas de esos tres pa¨ªses latinoamericanos en la fuga de los involucrados y habla de la colaboraci¨®n de "una persona que est¨¢ fuera, en Espa?a".

El hombre afirma que tras el ataque ten¨ªa que dirigirse a la sede de la legaci¨®n diplom¨¢tica de Chile, desde donde le hubieran trasladado a la de M¨¦xico y de all¨ª a la de Colombia para llevarle hasta la frontera. Sin embargo, seg¨²n su propio relato, cuando acudi¨® -un d¨ªa despu¨¦s del atentado- se encontr¨® con que la Embajada chilena estaba cerrada. Llam¨® entonces a su contacto, que le env¨ªa a la residencia de un trabajador de esa embajada, en el sector La Lagunita Country Club, pero una vez all¨ª un guardia de seguridad le dice que no est¨¢. Rivas Vivas asegura que fue entonces a la Iglesia Episcopal, de comuni¨®n anglicana, para pedir asilo. "Lamentablemente, cuando llegu¨¦ a la Iglesia episcopal, ese d¨ªa no hab¨ªa misa y los curas no estaban".