Los s¨ªmbolos de L¨®pez Obrador
El nuevo presidente de M¨¦xico abunda en gestos sobre la direcci¨®n de su Gobierno en la primera jornada
El primer d¨ªa de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador como presidente de M¨¦xico se ha distinguido por diversos gestos que indican la ruta que seguir¨¢ el nuevo Gobierno. El l¨ªder del Movimiento de Regeneraci¨®n Nacional (Morena) es un pol¨ªtico de izquierda que en sus discursos ha se?alado los excesos de sus antecesores, por lo que sus primeros s¨ªmbolos est¨¢n relacionados, principalmente, con eliminar las barreras que existen entre la figura presidencial y los ciudadanos. L¨®pez Obrador es uno de los presidentes mexicanos m¨¢s votados en la historia de M¨¦xico y ha comenzado su Gobierno con ¨ªndices de popularidad por encima del 50%, seg¨²n la prensa mexicana. Estos han sido algunos de los momentos que han marcado la primera jornada del nuevo presidente de M¨¦xico:
- ?La apertura de la residencia de Los Pinos. Antes de que L¨®pez Obrador recibiera la banda presidencial en el Congreso mexicano, las puertas de la antigua casa presidencial se abrieron al p¨²blico. El sitio ha sido durante 84 a?os la casa del mandatario mexicano en turno. El presidente mexicano ha decidido no habitar la residencia y convertirla en un complejo cultural donde la mayor¨ªa de las casas que lo componen se habilitar¨¢n como museo. Cientos de personas han acudido este s¨¢bado a Los Pinos para ver de primera mano los lugares donde hasta el viernes el presidente mexicano viv¨ªa.
- El mensaje de un ciclista al nuevo presidente. ¡°No tienes derecho a fallarnos¡±, fue la frase que una ciclista le dijo a L¨®pez Obrador de camino al Congreso. El presidente mexicano decidi¨® incluirla en su discurso para mostrar la responsabilidad que tiene entre sus manos. La voz de los ciudadanos ha sido, hasta ahora, poco recurrida por los pol¨ªticos mexicanos. L¨®pez Obrador ha aprovechado los gestos de la gente para demostrar que est¨¢ comprometido con las causas sociales y que a diferencia de otros presidentes atender¨¢ los problemas que preocupan a los mexicanos.
- Del conteo por los 43 de Ayotzinapa a la protesta contra Maduro. Lejos ha quedado la imagen de un Congreso aletargado. Este s¨¢bado, los legisladores han detenido el discurso de L¨®pez Obrador en varias ocasiones para manifestarse en acuerdo o desacuerdo con el mandatario. Primero para contar hasta 43 en memoria de los estudiantes de Ayotzinapa y despu¨¦s para reclamarle la invitaci¨®n que hizo al presidente venezolano, Nicol¨¢s Maduro, a la toma de posesi¨®n. Durante los Gobierno del PRI era m¨¢s com¨²n los aplausos tras cada frase del discurso y en raras ocasiones las protestas. Desde la toma de posesi¨®n de Felipe Calder¨®n, en 2006, el Congreso tom¨® un papel m¨¢s combativo.
- El bast¨®n de mando de los pueblos originarios y afromexicanos. Ning¨²n presidente de M¨¦xico hab¨ªa participado en un acto tan importante con los pueblos ind¨ªgena del pa¨ªs. Las im¨¢genes de L¨®pez Obrador recibiendo el bast¨®n de mando en una ceremonia tradicional han marcado una diferencia notable con sus antecesores que tras la toma de protesta han ido a celebrar en privado su nuevo Gobierno. Adem¨¢s, el mandatario ha abierto su discurso con un mensaje de inclusi¨®n para los pueblos fundadores de M¨¦xico.
- El coche blanco y la seguridad del presidente. La seguridad del nuevo presidente de M¨¦xico ha sido notablemente menor a la de sus antecesores. L¨®pez Obrador sigue traslad¨¢ndose en un autom¨®vil sed¨¢n blanco acompa?ado ¨²nicamente de su ch¨®fer y su esposa. Durante el recorrido, algunas personas se han acercado a estrechar la mano del mandatario y algunos hasta han conversado con ¨¦l, algo impensable en el pasado. Los operativos de protecci¨®n del Estado Mayor Presidencial han quedado reducidos a un c¨ªrculo de seguridad discreto que acompa?a al presidente cuando camina entre las multitudes. El presidente mexicano quiere cambiar la percepci¨®n de que acceder a ¨¦l es una tarea exclusiva de los grupos de poder.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.