La ¡®cibertrinchera¡¯ de Occidente
Los conocimientos tecnol¨®gicos de Estonia tras el ataque sufrido en 2007 por parte de Rusia hacen del pa¨ªs b¨¢ltico el entorno ideal para albergar las capacidades defensivas y ofensivas de hasta 21 pa¨ªses en el marco de la OTAN

Las centrales el¨¦ctricas de un pa¨ªs occidental se colapsan, los clientes de los bancos no pueden acceder a sus cuentas corrientes, el tr¨¢fico civil por tierra, mar y aire es un caos porque los mandos de control se han ca¨ªdo, y el agua que sale de los grifos est¨¢ contaminada con agentes qu¨ªmicos. Los medios de comunicaci¨®n son incapaces de explicar qu¨¦ sucede. Y la gente est¨¢ en peligro, desconf¨ªa del sistema. Esto es un ciberataque.
El anterior es el escenario sobre el que un grupo de ingenieros y militares de 21 pa¨ªses trabaja desde un peque?o cuartel en Tallin, la capital de Estonia (un pa¨ªs de 1,3 millones de habitantes). La rep¨²blica b¨¢ltica es de los pa¨ªses m¨¢s digitalizados del mundo y, tras sufrir en primera persona un ataque cibern¨¦tico may¨²sculo que paraliz¨® el pa¨ªs en 2007 ¡ªatribuido oficialmente a Rusia¡ª, la peque?a naci¨®n empez¨® a desarrollar el ecosistema perfecto para acoger el mayor centro de amenazas en la red levantado en el marco de la OTAN, el Centro de Excelencia de Defensa Cibern¨¦tica Cooperativa (CCDCOE, por sus siglas en ingl¨¦s). Pero, adem¨¢s, el pa¨ªs part¨ªa con ventaja porque "durante la ocupaci¨®n sovi¨¦tica, Estonia fue la rep¨²blica m¨¢s avanzada en cuestiones tecnol¨®gicas", ilustra por correo electr¨®nico Ricardo Lenoir-Grand Pons, doctorando y profesor adjunto de la Universidad Carlos III de Madrid y experto en la regi¨®n b¨¢ltica.
Esta g¨¦lida aunque soleada ma?ana de principios de marzo el CCDCOE amanece con uniformados, casi todos hombres, paseando por los jardines nevados de lo que en tiempos m¨¢s oscuros en la historia de Estonia tambi¨¦n fue una dependencia militar. El teniente coronel Franz Lantenhammer, un alem¨¢n de pelo y barba blancos y ante el que todos se cuadran con respeto, trabaja en su despacho abovedado de la primera planta de este edificio de piedra y ladrillo visto de finales del siglo XIX. ¡°Si quieres defenderte bien, necesitas entender c¨®mo atacar¡±, reconoce, y a?ade que la amenaza que llega a occidente es principalmente de dos lugares muy concretos con los que la tensi¨®n ha ido en constante aumento: Rusia, desde la anexi¨®n de Crimea en 2014, y China, especialmente en la actualidad por los casos de espionaje y la tecnolog¨ªa 5G.
Defender y, sobre todo, ofender, es lo que Sandra Bard¨®n Moral, madrile?a de 36 a?os, lleva haciendo aqu¨ª desde hace poco m¨¢s de un a?o. Aqu¨ª, todos la llaman techie, y junto a ¡°decenas¡± de compa?eros de los 21 pa¨ªses que conforman el Centro (equipo rojo, basado en Estonia), se encarga cada a?o de intentar atacar desde sus ordenadores a supuestas naciones (equipo azul, que funciona desde cualquier lugar del mundo) y anularlas. ¡°Es muy estresante¡±, explica, aunque ¡°muy motivador¡±. Son m¨¢s de mil m¨¢quinas virtuales trabajando a pleno rendimiento durante el ejercicio llamado Locked Shields (escudos bloqueados).

El teniente coronel Pedro Cort¨¦s Ruiz, de 51 a?os, es el encargado de encajar los ejercicios de los techies en las operaciones militares al uso. ¡°Hasta ahora, esta rama [operaciones cibern¨¦ticas] no se ten¨ªan en cuenta¡± en el campo militar, explica. Su divisi¨®n trabaja con hip¨®tesis. La m¨¢s probable, dice, son las campa?as para influir en la opini¨®n p¨²blica, como la desinformaci¨®n o las fake news. Pero la m¨¢s peligrosa ser¨ªa el ataque a infraestructuras criticas como centrales el¨¦ctricas, dep¨®sitos de agua, aeropuertos, etc¨¦tera. Es algo que contempla remoto hoy en d¨ªa, reconoce, pero en el CCDCOE, con un presupuesto de entre uno y dos millones de euros, se trabaja y se entrena para defender las propias, y atacar las ajenas.
Espa?a fue en 2008 uno de los pa¨ªses fundadores del CCDCOE ¡ªjunto a Alemania, Italia, Eslovaquia, Estonia, Letonia y Lituania¡ª, aunque ocupar¨ªa la mitad de la tabla en cuanto a capacidades para poder, sobre todo, atacar, seg¨²n los expertos del Centro. ¡°Los anglosajones como Estados Unidos, Reino Unido y Holanda tienen, adem¨¢s de las defensivas, unas capacidades ofensivas muy desarrolladas. Tambi¨¦n Estonia¡±, explica Cort¨¦s. Uno de los motivos por los que el mayor centro de operaciones que funciona en el marco de la Alianza Atl¨¢ntica ¡ªen el marco, porque no todos los miembros que conforman el CCDCOE son de la OTAN como Suecia, Finlandia y Austria¡ª?est¨¢ en Estonia?es el ciberataque de 2007, que marc¨® un antes y un despu¨¦s en la poblaci¨®n del pa¨ªs. ¡°La sociedad tiene mucha concienciaci¨®n de un ciberataque que amenace a la seguridad nacional puede suceder en cualquier momento y conf¨ªa mucho en sus capacidades cibern¨¦ticas¡±, ilustra el teniente coronel espa?ol. Adem¨¢s, ¡°a nivel t¨¦cnico¡±, a?ade Sandra, ¡°los estonios lo han hecho bien¡±.
Ciberdiplomacia
Pero la ciberdefensa, como dice el alem¨¢n Lantenhammer, ya no es s¨®lo un terreno para techies, sino tambi¨¦n para pol¨ªticos. Heli Tiirmaa-Klaar, polit¨®loga de formaci¨®n de 48 a?os, es la embajadora especial de ciberdefensa de Estonia y uno de los personajes m¨¢s influyentes de 2019, seg¨²n POLITICO. En una entrevista en una sala del sobrio Ministerio de Exteriores en Tallin, Tiirmaa-Klaar explica que lo m¨¢s urgente es crear la ciberdiplomacia donde las actividades en el campo de Internet respeten los est¨¢ndares internacionales como la convenci¨®n de Ginebra y la carta de los Derechos Humanos. ¡°Pero China no quiere¡±, reprocha. Tras una pausa resume: "Tenemos que regular Internet".
Esta experta ¡ªasesora a la UE y a la OTAN en estos temas¡ª es parca en explicaciones, pero tambi¨¦n optimista en cuanto al avance de sus demandas. En lo que antes era un mundo s¨®lo de techies, ahora van llegando las estrategias pol¨ªticas. "Es como en el asunto de desnuclearizaci¨®n. ?No todos los involucrados tienen que ser f¨ªsicos!", dice respecto al mundo cibern¨¦tico. Por eso la espa?ola Sandra, con vaqueros, camiseta y deportivas, trabaja d¨ªa a d¨ªa con el uniformado y correcto teniente coronel Lantenhammer. Tienen claro qui¨¦n es el enemigo com¨²n.
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