Las elecciones generales en India arrancan con la exaltaci¨®n del patriotismo hind¨²

Las elecciones generales en India, que comenzar¨¢n el 11 de abril y que durar¨¢n un mes, suceden en un momento de exaltaci¨®n patri¨®tica tras el ¨²ltimo bombardeo en territorio pakistan¨ª por parte del Gobierno indio. Esta escalada militar entre las dos potencias nucleares, que no se hab¨ªa dado en cuatro d¨¦cadas, ha beneficiado al primer ministro Narendra Modi justo cuando arranca la campa?a electoral.

Las fuerzas a¨¦reas del pa¨ªs hind¨² bombardearon a finales de febrero varios campos de entrenamiento del grupo terrorista Jais-e-Mohammad (JeM), que asumi¨® la autor¨ªa del atentado que semanas antes mat¨® a 44 soldados indios en Cachemira. Estas maniobras militares han frenado la ca¨ªda de la popularidad del l¨ªder del partido nacionalista y conservador hind¨² Bharatiya Janata Party (BJP), mermada en el ¨²ltimo a?o por la ralentizaci¨®n econ¨®mica y la subida del desempleo. El BJP utiliza este conflicto armado como aval para retener la mayor¨ªa en el nuevo parlamento.?

Alrededor de 900 millones de electores podr¨¢n ejercer su derecho al voto en unos comicios que durar¨¢n un mes, hasta el 19 de mayo, y cuyos resultados se conocer¨¢n el 23 de ese mes. La extensi¨®n y demograf¨ªa de India (con 1.300 millones de habitantes), hacen que las elecciones en la democracia m¨¢s grande del planeta tengan lugar durante seis semanas y en siete fases. A los 84 millones de nuevos electores con respecto a 2014 hay que sumar las dificultades impuestas por una ley que exige que todo votante disponga de una mesa electoral a una distancia de no m¨¢s de dos kil¨®metros. La ley tambi¨¦n obliga a que todos los colegios sean custodiados por la polic¨ªa federal para asegurar la validez de los escrutinios, ante la sospecha de negligencias por parte de fuerzas del orden locales.

Irrupci¨®n de las 'fake news'

La Comisi¨®n Electoral Nacional ha advertido de que el Ejecutivo no podr¨¢ anunciar nuevas pol¨ªticas ni hacer campa?a con dinero p¨²blico. Tambi¨¦n exigi¨® a los partidos que no utilicen al Ej¨¦rcito como propaganda electoral. Tras el incidente militar con Pakist¨¢n, varios miembros del Ejecutivo echaron en cara a la oposici¨®n su presunta falta de patriotismo: ¡°La naci¨®n coincide en que la amenaza del terrorismo debe ser eliminada. Quiero preguntaros: ?no cre¨¦is lo que dicen nuestras fuerzas armadas?¡±, dijo el propio Modi hace poco m¨¢s de una semana en un acto de precampa?a.

Tras el bombardeo indio, Pakist¨¢n respond¨ªa con otro ataque y con la detenci¨®n del piloto indio Abhinandan Varthaman, que al final fue devuelto 24 horas m¨¢s tarde en un ¡°gesto de paz¡± que enfri¨® la escalada militar en el sur de Asia.?

El conflicto entre Pakist¨¢n e India puso de relieve la falta de veracidad en la versi¨®n oficial de este ¨²ltimo y la ausencia de profesionalidad de los varios centenares cadenas de televisi¨®n y radio del pa¨ªs. En este sentido, la Comisi¨®n Electoral nombr¨® a expertos para controlar redes sociales como Facebook, o la local ShareChat, para prevenir la difusi¨®n de noticias falsas que manipulen a los votantes. Mientras, otros analistas critican el alineamiento patente entre el Gobierno y muchos de los medios tradicionales de cara a las elecciones.

Un Gobierno en horas bajas

Esta crisis se ha convertido en la tormenta perfecta para el Gobierno de Modi, amenazado por la ralentizaci¨®n econ¨®mica y por las acusaciones de estar ocultando los datos de un desempleo que se prev¨¦ hist¨®rico. El l¨ªder nacionalista hind¨² se enfrenta tambi¨¦n al enfado de los agricultores y ganaderos del pa¨ªs, furiosos por la ca¨ªda de los precios de los productos b¨¢sicos y por su estricta normativa para la protecci¨®n de las vacas, consideradas sagradas en la cultura hind¨².

Pero el poder¨ªo militar mostrado ante Pakist¨¢n renueva la popularidad del primer ministro despu¨¦s del desastre electoral de las elecciones regionales de diciembre, en las que su partido perdi¨® el poder en tres Estados cruciales; donde se hizo con la victoria el hist¨®rico y principal opositor, el Partido del Congreso.

En las zonas rurales de India, donde vive el 70% de la poblaci¨®n, el impacto que ha tenido el conflicto con el pa¨ªs vecino ha sido mucho mayor. Un ejemplo es el Estado de Uttar Pradesh (UP), el m¨¢s grande y superpoblado, que env¨ªa el mayor n¨²mero de legisladores al parlamento. All¨ª, el BJP podr¨ªa hacerse con 41 de los 80 esca?os, seg¨²n la cadena de televisi¨®n india TV-CNX. Aunque el resultado est¨¢ muy por debajo de los 73 que cosech¨® en las generales de 2014, son 12 m¨¢s de los que predec¨ªa la encuesta realizada por el mismo grupo y en la misma regi¨®n antes de que se produjese el enfrentamiento a¨¦reo de finales de febrero.