Las elecciones condicionan el futuro indio

La econom¨ªa india cerr¨® 2018 creciendo a un ritmo m¨¢s r¨¢pido que ning¨²n otro pa¨ªs (en torno al 7,5%) y afronta el presente curso con la expectativa de superar por tama?o a la econom¨ªa de Reino Unido si se cumplen las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Mientras el crecimiento global se desacelera, India mantiene un fuerte ritmo expansivo, aunque tiene que sobreponerse al lastre que supuso la fuerte depreciaci¨®n de su moneda el pasado a?o y que culmin¨® con el cambio en la direcci¨®n de su banco central. El pa¨ªs celebrar¨¢ elecciones generales el pr¨®ximo mes de mayo y el nuevo Gobierno que salga de las urnas tendr¨¢ la prioridad de generar empleo en una sociedad dividida por la desigualdad; mal end¨¦mico de una naci¨®n superpoblada.

En la ¨²ltima d¨¦cada, la integraci¨®n de India en la econom¨ªa global fue seguida de un desarrollo sin parang¨®n gracias a la revoluci¨®n agr¨ªcola que transform¨® un vasto subcontinente con dependencia importadora cr¨®nica en una potencia exportadora de alimentos. El pa¨ªs de 1.250 millones de habitantes no solo se convirti¨® en la sexta econom¨ªa del mundo en 2017, con un PIB de 2,2 billones de euros seg¨²n el Banco Mundial. Esta bonanza ha permitido combatir la pobreza extrema, reduci¨¦ndola del 46% de la poblaci¨®n al 13,4%. ¡°India deber¨ªa volver a un crecimiento saludable del 7,6% en 2019 y 2020, si no hay vientos adversos como el aumento de la tensi¨®n comercial o alteraciones bruscas en el suministro de crudo¡±, explican los expertos de PwC en un reciente informe.

La guerra comercial entre Estados Unidos y China, primera y segunda econom¨ªas del planeta, ha afectado negativamente a India, que ha elevado las tarifas a productos estadounidenses en represalia por la imposici¨®n aduanera de Washington. Indirectamente, Delhi se beneficia del conflicto entre las mayores econom¨ªas, ya que Pek¨ªn ha encontrado en su vecino del sur un aliado comercial, importando desde el mercado indio ante el proteccionismo americano. Pese a la coalici¨®n coyuntural de los colosos asi¨¢ticos, India reclama que China suavice sus barreras comerciales al arroz, la carne y los productos farmac¨¦uticos e inform¨¢ticos para reducir un d¨¦ficit comercial que se ha duplicado en la ¨²ltima d¨¦cada, alcanzando los 45.000 millones de euros.

El fortalecimiento del d¨®lar y el ascenso continuado del precio del crudo en la primera parte de 2018 hundieron a la rupia india. La divisa del tercer mayor consumidor de petr¨®leo del mundo ¡ªdos tercios procedentes de importaciones¡ª fue la de peor evoluci¨®n de toda Asia el pasado a?o, depreci¨¢ndose un 10% frente al d¨®lar. Para compensar la debilidad de su divisa, el Banco de la Reserva de India elev¨® las tasas de inter¨¦s dos veces para controlar la inflaci¨®n, que ha permanecido estable desde entonces. En un nuevo contexto econ¨®mico, marcado por una demanda interna m¨¢s moderada y una correcci¨®n del precio del petr¨®leo, el reci¨¦n elegido gobernador del organismo monetario indio, Shaktikanta Das, tiene las manos libres para deshacer el camino y bajar los tipos de inter¨¦s en el primer trimestre o a mitad del a?o, seg¨²n los analistas.

El nuevo gobernador del banco central tiene ahora m¨¢s margen para bajar los tipos de inter¨¦s

¡°El d¨¦ficit fiscal [de India] sigue siendo alto como en los ¨²ltimos cinco a?os. Necesitamos arreglar este desfase¡±, explic¨® la nueva economista jefe del FMI, Gita Gopinath, tras su intervenci¨®n en Davos. La menci¨®n de la experta indio-americana subraya la insuficiente recaudaci¨®n de los nuevos impuestos sobre el valor a?adido. Esta advertencia, sin embargo, no ha calado en el ¨¢nimo del primer ministro, Narendra Modi, que planea modificar su r¨¦gimen de subsidios a campesinos. Estar¨ªa considerando, seg¨²n fuentes gubernamentales, llevar a cabo una pol¨ªtica econ¨®mica m¨¢s expansiva, gracias a un pr¨¦stamo del banco central, iniciativa que alejar¨ªa la promesa de situar el d¨¦ficit fiscal en el 3,3 % del PIB.

La medida busca contener la sangr¨ªa de votantes rurales que apoyaron a la oposici¨®n en los comicios regionales de diciembre, cuando el partido gobernante perdi¨® tres Estados claves. El sector agr¨ªcola y los j¨®venes determinar¨¢n los resultados de las generales de mayo, como ocurri¨® en 2014. Entonces triunfaron las promesas de empleo de Modi. Un discurso insuficiente hoy para los 100 millones de nuevos votantes frustrados ante la incapacidad del Ejecutivo de crear los 10 millones de puestos de trabajo anuales prometidos

Con el Gobierno ya superando sus metas de d¨¦ficit en octubre, toda medida adicional deber¨ªa equilibrarse con las posibles reducciones en el gasto para cumplir con la sacrosanta meta fiscal. Los analistas esperan pocos avances en esta materia hasta conocer los resultados de las elecciones. Entonces, la nueva Administraci¨®n tendr¨¢ que mejorar los sistemas de salud, educaci¨®n y rentas si quiere llegar al crecimiento del 8% y doblar su econom¨ªa para 2022 como anticip¨® el actual Gobierno.

Este a?o, India dej¨® de ser el pa¨ªs con m¨¢s habitantes que viven en la extrema pobreza, pero est¨¢ en el puesto 130? (de 189) del ¨ªndice de desarrollo humano, por detr¨¢s de Sri Lanka y China. Seg¨²n un informe del Banco Mundial del a?o pasado, un 66% de su mano de obra est¨¢ limitada como producto de la malnutrici¨®n en la infancia, lo que supone una p¨¦rdida del 13% de sus ingresos per capita. Comparado con otras econom¨ªas emergentes, los empleados indios apenas trabajan 6,5 a?os en plenitud de productividad debido a la falta de pol¨ªticas sociales y de salud, mientras que China o Brasil duplican esa cifra.

Otro obst¨¢culo es la escasa incorporaci¨®n de la mujer al mercado laboral. Apenas el 27% de ellas trabajan fuera de casa; el ¨ªndice m¨¢s bajo de las naciones emergentes y de los pa¨ªses del G?20, solo por encima de Arabia Saud¨ª. Fomentar la igualdad, acabar con el feticidio femenino (abortos selectivos de ni?as), adem¨¢s de mejorar la educaci¨®n de las menores y su acceso al trabajo, deber¨ªa ser una prioridad del pr¨®ximo Gobierno de India, y no solo por motivos obvios de justicia social, sino tambi¨¦n porque corregir esta situaci¨®n le permitir¨ªa a aumentar su PIB en 667.000 millones de euros ¡ª?un 18% m¨¢s¡ª en la pr¨®xima d¨¦cada, seg¨²n el McKinsey Global Institute.