Los militares, en cabeza en el recuento de las elecciones tailandesas

Los militares se perfilan como los grandes ganadores de las elecciones de Tailandia celebradas este domingo, las primeras tras el golpe de Estado de 2014. En una confusa noche electoral, con el recuento en el 93%, y a la espera de que la Comisi¨®n Electoral anuncie los resultados oficiales, su partido, el Palang Pracharat, era el m¨¢s votado con una ligera ventaja frente al Pheu Thai, la formaci¨®n del ex primer ministro Thaksin Shinawatra. Con esta tendencia, su candidato y actual primer ministro, el general Prayut Chan-Ocha, parece encaminado a repetir en el cargo.

A la espera de que este lunes la Comisi¨®n confirme los n¨²meros y anuncie el n¨²mero de esca?os que obtendr¨¢ cada formaci¨®n, Palang Pracharat recibe el 28% de los votos, cerca de 7,3 millones, mientras que Pheu Thai, que aspiraba a repetir los triunfos electorales de los Shinawatra en cada elecci¨®n desde 2001, obtiene el 26%.

El partido progresista Futuro Adelante, del joven millonario Thanathorn Juangroongruangkit, logra unos resultados excelentes en su primera convocatoria electoral, al convertirse en la tercera fuerza pol¨ªtica con un 19%, impulsado por el voto joven. Otro partido con motivos para sentirse satisfecho es Bhumjaithai, que recoge un 12% con su propuesta estrella de legalizar la marihuana.

M¨¢s informaci¨®n

Tailandia acude a las urnas ocho a?os despu¨¦s y tras cinco de junta militar

Se hunde, en cambio, el Partido Dem¨®crata, el m¨¢s antiguo de Tailandia y favorecido por las ¨¦lites, que pierde la mayor¨ªa que ten¨ªa en Bangkok. Su l¨ªder, el ex primer ministro Abhisit Vejjajiva, ha dimitido ya esta noche ante el castigo del electorado a la calculada equidistancia que su formaci¨®n present¨® frente a militares y bloque prodemocracia. Previamente hab¨ªa asegurado que renunciar¨ªa si no llegaba a los cien esca?os, una meta que se antoja ahora muy lejana al recibir solo el 12% de los votos.

Con los porcentajes como est¨¢n, parece probable que los militares consigan llegar al m¨ªnimo que necesitan para repetir gobierno, esta vez cubiertos con el manto de la democracia y el mandato popular. Lo tienen m¨¢s f¨¢cil que los dem¨¢s. Qui¨¦n ser¨¢ primer ministro y forme gobierno deben decidirlo los 500 miembros de la C¨¢mara Baja y los 250 senadores. Pero los integrantes de la C¨¢mara Alta han sido nombrados a dedo por la Junta, por lo que en estas elecciones legislativas el Palang Pracharat solo necesita sumar 125 diputados. Para poder formar gobierno, el bloque prodem¨®crata deber¨ªa acumular 375 esca?os, algo que se antoja muy dif¨ªcil.

A la espera de que la Comisi¨®n Electoral anuncie las cifras de votos y esca?os este lunes, este organismo ha confirmado que la participaci¨®n entre los 51 millones de votantes convocados a las urnas ha rondado el 66% por ciento, muy por debajo del 80% que hab¨ªan calculado los analistas.

Han empezado ya a surgir denuncias de irregularidades, en unas elecciones que los militares retrasaron cinco veces y que han transcurrido sin observadores internacionales. M¨¢s de un 5% de las papeletas emitidas se han considerado nulas. En un caso que suscit¨® numerosas protestas en las redes sociales, unos 1.500 votos emitidos por los expatriados tailandeses en Nueva Zelanda no se consideraron v¨¢lidos dado que, por retrasos en los aviones, no llegaron antes del cierre de los colegios electorales.

En los colegios electorales, la satisfacci¨®n por poder votar era patente. En el instalado en el exterior del templo That Thong en Ekkamai, en el centro de Bangkok, Kritsana, una vendedora de comida callejera de 63 a?os, aseguraba que ella y su familia ¡°estamos muy contentos de poder elegir el partido que queremos¡±. ¡°Quiero que haya m¨¢s democracia¡±, afirmaba el estudiante de 21 a?os Pattaporol Kumlor.

Menos optimista era la se?ora Onanong, de 65 a?os. ¡°He venido porque quiero votar, porque es mi deber ciudadano. Pero las cosas no van a cambiar. Los militares ya se han encargado de tenerlo todo controlado¡±.

Los partidos afines a Thaksin y su hermana Yingluck ganaron todas las elecciones desde 2001, pero en esta ocasi¨®n no contaban con sus l¨ªderes espirituales, en el exilio. Este bloque ya hab¨ªa sufrido un duro golpe en febrero, cuando el Tribunal Constitucional orden¨® la disoluci¨®n de una formaci¨®n hom¨®loga, el Thai Raksa Chart, por haber presentado como candidata a primera ministra a la hermana del rey, la princesa Ubolratana.