Estados Unidos retira el visado a la fiscal de la Corte Penal Internacional

Estados Unidos ha retirado el visado a Fatou Bensouda, fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya. La oficina de la jurista, nacida en Gambia, lleva a cabo desde 2016?un examen preliminar sobre los supuestos cr¨ªmenes de guerra cometidos en Afganist¨¢n por soldados estadounidenses entre 2003 y 2004. Este viernes ha confirmado el veto y ha asegurado asimismo que Bensouda seguir¨¢ cumpliendo con sus funciones ¡°sin miedo y sin favoritismos¡±. Estados Unidos no es miembro de la CPI y en marzo Mike Pompeo, secretario de Estado de EE UU, se?al¨® su disposici¨®n a rechazar la entrada de funcionarios ¡°que investiguen a nuestro personal en relaci¨®n con Afganist¨¢n¡±, por considerar que violaba su soberan¨ªa nacional.

El caso de Afganist¨¢n no se ha abierto formalmente en la CPI. Para ello la fiscal tiene que convencer antes a los jueces de la validez de ¡°los indicios fundados de los delitos perpetrados por militares estadounidenses¡± se?alados en el informe que les remiti¨® en 2017. Entre estos se incluyen las supuestas torturas padecidas por 61 prisioneros a manos de tropas de EE UU. Los servicios de inteligencia tambi¨¦n abusaron de otras 27 personas internadas en c¨¢rceles secretas abiertas en Afganist¨¢n y en Polonia, Ruman¨ªa y Lituania, seg¨²n la fiscal¨ªa.

Afganist¨¢n s¨ª es miembro de la Corte, de ah¨ª que los ciudadanos de Estados Unidos que hayan cometido delitos en su suelo puedan ser perseguidos por la justicia internacional. El informe preliminar de Bensouda incluye a soldados afganos, talibanes, al grupo guerrillero Haqqani, cercano a estos y activo adem¨¢s en Pakist¨¢n, y a personal de la CIA entre los presuntos autores de cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad. En total, se trata de 699 v¨ªctimas de torturas supuestamente aplicadas, asimismo, ¡°por el Gobierno afgano y sus servicios secretos y policiales¡±.

Estados Unidos despleg¨® sus tropas en Afganist¨¢n en 2001, poco despu¨¦s del atentado del 11-S contra la Torres Gemelas. Lleg¨® a tener all¨ª hasta 100.000 soldados y para evitar que corran riesgos fuera de su tierra, Washington no ha ratificado el Estatuto de Roma, texto fundacional de la Corte. En 2018, John Bolton, asesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, subray¨® que ¡°no cooperaremos con la CPI; no le prestaremos asistencia; no nos uniremos a ella; dejaremos que se muera ella sola¡±, en un discurso en el Federalist Society, un foro conservador de Washington.

China, Rusia, India o Israel tampoco participan en la Corte, y Filipinas la abandon¨® en marzo. Considera que la Fiscal¨ªa viola la soberan¨ªa nacional y su presunci¨®n de inocencia. Bensouda analiza, de forma preliminar, los supuestos delitos cometidos all¨ª desde 2016 ¡°en el marco de la guerra contra las drogas¡±. La ofensiva ha causado 7.000 muertos, seg¨²n las propias autoridades de Manila.

Burundi se retir¨® en 2017. No estaba de acuerdo con la investigaci¨®n sobre la muerte de 430 personas en las protestas que siguieron, en 2015, al anuncio de que el presidente Pierre Nkurunziza optaba a un tercer mandado. En ambos casos, sin embargo, la fiscal¨ªa de la CPI sigue adelante porque la retirada de un pa¨ªs no afecta su competencia sobre investigaciones anteriores. La Corte no pertenece a la familia de Naciones Unidas, pero la fiscal jefe informa de sus actividades a la Asamblea General. Se presume que podr¨¢ seguir viajando a Nueva York para ello.