?D¨®nde cuesta m¨¢s caro contaminar?
Varios pa¨ªses latinoamericanos impulsan iniciativas para ponerle precio al carbono y as¨ª reducir las emisiones y fomentar las inversiones en tecnolog¨ªas m¨¢s limpias
Cuando planeas tus vacaciones y compras los pasajes de avi¨®n, ?est¨¢s al tanto de la huella de carbono que deja ese vuelo? Algunas aerol¨ªneas ahora te informan cu¨¢ntas toneladas de CO2 ser¨¢n emitidas si, por ejemplo, viajas de Buenos Aires a Madrid. Muchas empresas e industrias est¨¢n tomando consciencia sobre lo que significa la huella de carbono. Sin embargo, los esfuerzos por controlar las emisiones van mucho m¨¢s all¨¢.
Un planeta que se calienta peligrosamente no es solo un desastre ambiental, tambi¨¦n es un reto econ¨®mico y social que aumenta la pobreza, el n¨²mero de conflictos y la presi¨®n migratoria. Asignarles un valor o un precio a las emisiones de carbono ataca el problema del cambio clim¨¢tico en su origen, seg¨²n los expertos.
?Pero c¨®mo estipular el valor de algo intangible como las emisiones de carbono?
La fijaci¨®n del precio del carbono tiene el potencial de descarbonizar de forma radical la actividad econ¨®mica mundial cambiando la conducta de consumidores, empresas e inversores, a la vez que impulsa la innovaci¨®n tecnol¨®gica, generando recursos que pueden dedicarse a fines productivos. Esta acci¨®n ayuda a transferir la responsabilidad por los da?os a aquellos que son sus responsables. En lugar de dictar qui¨¦n debe reducir emisiones, en d¨®nde y c¨®mo, fijar un precio del carbono env¨ªa una se?al econ¨®mica: los contaminadores deciden si interrumpen su actividad contaminadora y reducen las emisiones, o bien si siguen contaminando y pagando por ello.
Existen dos tipos principales de fijaci¨®n del precio del carbono: sistemas de comercio de emisiones (ETS, por sus siglas en ingl¨¦s) y los impuestos al carbono. Los ETS ponen un l¨ªmite al total de emisiones de gases de efecto invernadero, bajando el nivel permitido con el tiempo. Las empresas tienen autorizado un n¨²mero limitado ¡ªy decreciente¡ª de permisos de emisi¨®n. Las industrias con bajas emisiones pueden vender sus permisos sobrantes a emisores m¨¢s grandes. Al generar un mercado para los permisos de emisi¨®n, el ETS establece un precio de mercado para las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los impuestos al carbono, por su parte, fijan directamente un precio al carbono a trav¨¦s de un tipo impositivo sobre las emisiones de gases de efecto invernadero o sobre el contenido de carbono de los combustibles f¨®siles. Difiere de un ETS en el sentido que los resultados en t¨¦rminos de reducci¨®n de emisiones de un impuesto al carbono no est¨¢n definidos de antemano, pero el precio al carbono s¨ª.
De acuerdo con el informe Situaci¨®n y tendencias de la fijaci¨®n del precio del carbono en 2018 del Banco Mundial, los gobiernos recaudaron alrededor de 33.000 millones de d¨®lares en ingresos derivados de la fijaci¨®n del precio del carbono en 2017, unos 11.000 millones de d¨®lares m¨¢s que lo recaudado en 2016. El informe tambi¨¦n concluye que los precios del carbono est¨¢n subiendo; hoy en d¨ªa alrededor de la mitad de las emisiones est¨¢n cubiertas por iniciativas de fijaci¨®n del precio del carbono de m¨¢s de 10 d¨®lares/tCO2e, comparado con un cuarto de las emisiones en 2017.
El Banco Mundial, grupos empresariales e inversores est¨¢n trabajando con gobiernos y corporaciones de todo el mundo en la fijaci¨®n del precio del carbono para reducir las emisiones y fomentar las inversiones en tecnolog¨ªas m¨¢s limpias. La convocatoria ha sido exitosa: en la ¨²ltima d¨¦cada se han triplicado las iniciativas para la fijaci¨®n del precio del carbono.
El 80 % de las emisiones a¨²n no est¨¢n cubiertas
Para 2018, 46 gobiernos nacionales y 24 subnacionales de todo el mundo estaban fijando un precio al carbono. Los ingresos derivados de fijar el precio del carbono superaron los 20.000 millones de d¨®lares por segundo a?o consecutivo, mientras que unas 1.400 empresas incorporan un precio interno del carbono a sus planes de negocios, incluidas m¨¢s de 100 empresas Fortune Global 500 con ingresos anuales colectivos de siete billones de d¨®lares.
Los sectores que lideran el uso de precios internos para el carbono son servicios p¨²blicos y energ¨ªa, seguidos de materiales y telecomunicaciones.
Estas tendencias resaltan la importancia de integrar el impacto y las oportunidades del cambio clim¨¢tico a las opciones de inversi¨®n. Si bien existe una mayor participaci¨®n por parte de los gobiernos y m¨¢s asimilaci¨®n de la fijaci¨®n interna de un precio al carbono entre empresas, se debe aumentar el precio del carbono y su cobertura. A pesar de los avances auspiciosos, el 80% de las emisiones a¨²n no est¨¢n cubiertas por la fijaci¨®n del precio del carbono.
La fijaci¨®n del precio del carbono en Latinoam¨¦rica
La mayor¨ªa de las iniciativas de fijaci¨®n del precio del carbono m¨¢s recientes tuvieron lugar en la regi¨®n:?
- Un impuesto al carbono en Chile grava las emisiones de CO2 de grandes emisores en los sectores energ¨¦tico e industrial. El impuesto al carbono forma parte de una visi¨®n deseable y positiva para el futuro, vinculada a la innovaci¨®n, nuevas oportunidades de empleo y mejoramiento de la salud. Para el 2020, el pa¨ªs tiene el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a un nivel 20% inferior a los niveles de 2007.
- Colombia lanz¨® un impuesto al carbono sobre todos los combustibles f¨®siles l¨ªquidos o gaseosos utilizados para la combusti¨®n, como parte de un paquete de reformas fiscales para apoyar la consolidaci¨®n de la paz. El dinero recaudado se destina al Fondo Colombia en Paz para apuntalar la protecci¨®n de ecosistemas y la gesti¨®n de la erosi¨®n costera.
- Costa Rica est¨¢ elaborando una pol¨ªtica de fijaci¨®n del precio del carbono que gira en torno al problema de la contaminaci¨®n del aire. El impuesto a las emisiones propuesto abarcar¨ªa otros contaminantes a¨¦reos, como mon¨®xido de carbono, ¨®xidos n¨ªtricos y part¨ªculas, tendiente a fomentar tecnolog¨ªas m¨¢s limpias y de mejor desempe?o.
- Argentina adopt¨® un impuesto al carbono en diciembre de 2017. En 2019, este impuesto se grav¨® al tipo completo en la mayor¨ªa de los combustibles l¨ªquidos; seguir¨¢ aumentando 10% por a?o hasta alcanzar 100 % en 2028. Se espera que el impuesto al carbono recaude aproximadamente ARS 11.500 millones (571 millones de d¨®lares) por a?o.
- En diciembre de 2017, unas enmiendas a la Ley General de Cambio Clim¨¢tico estipularon el dise?o y puesta en marcha de un ETS en M¨¦xico. Este ETS operar¨¢ en fase piloto durante 36 meses, seguidos de una fase operativa formal planeada para 2022.
Durante la Declaraci¨®n de Par¨ªs sobre el Precio del Carbono en las?Am¨¦ricas, 12 gobiernos nacionales y subnacionales de las Am¨¦ricas se comprometieron a implementar la fijaci¨®n del precio del carbono como pol¨ªtica central para la acci¨®n contra el cambio clim¨¢tico y profundizar la integraci¨®n regional de los instrumentos de fijaci¨®n del precio del carbono.
Emily Bartels-Bland es comunicadora digital del Banco Mundial.
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