Trump alienta el Brexit duro y promete un acuerdo comercial ¡°fenomenal¡± con EE UU

Donald Trump no ha podido contenerse este martes, porque del asunto pol¨ªtico m¨¢s complejo al que se ha enfrentado en d¨¦cadas el Reino Unido ¡°lo entiende todo perfectamente¡±, dijo. Junto a una Theresa May ya en retirada, ha alentado un Brexit duro y sin acuerdo, y prometido ¡°un fenomenal tratado comercial¡± entre los dos pa¨ªses. Trump ha calificado de ¡°falsa noticia¡± la presencia de miles de manifestantes en Londres, y desvelado que no hab¨ªa querido reunirse con el l¨ªder laborista, Jeremy Corbyn, ¡°porque se trata de una fuerza negativa¡±.

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¡°No s¨¦ cu¨¢nto tiempo te queda por aqu¨ª, pero conf¨ªo en que est¨¦s para que podamos sacar adelante este acuerdo¡±, ha dicho Trump a May, aparentemente ajeno a que la primera ministra har¨¢ efectiva su renuncia a liderar el Partido Conservador este viernes. ¡°Seguramente no se ha reconocido a¨²n todo tu esfuerzo¡±, se?al¨®.

En ese esfuerzo deber¨¢ incluirse el manejo de una visita de Estado que podr¨ªa haber resultado catastr¨®fica, pero que no chirri¨® m¨¢s de lo previsto, aunque Trump sigui¨® dejando un reguero de frases pol¨¦micas. Entre ellas, la sugerencia de que el NHS, el Servicio Nacional de Salud (la joya m¨¢s querida entre los brit¨¢nicos a pesar de su maltrecho estado) estar¨ªa sobre la mesa en la negociaci¨®n del futuro tratado. Aunque antes de responder, la propia May tuvo que explicarle al o¨ªdo qu¨¦ era exactamente el NHS, y ella misma se encarg¨® de matizar que, como en todo acuerdo, las partes deciden en qu¨¦ ceden y en qu¨¦ no.

La visita de Estado de Trump, que concluye este mi¨¦rcoles con su presencia en los actos de conmemoraci¨®n del 75? aniversario del desembarco aliado en las costas francesas, en la localidad de Portsmouth, se ha producido en el peor momento posible para que alguien pudiera sacar beneficio de ella. Ni siquiera el euroesc¨¦ptico Boris Johnson, favorito en las encuestas para suceder a May y a quien el presidente estadounidense ha alabado en p¨²blico, quiso hacerse una foto con ¨¦l. Limit¨® todo contacto a una conversaci¨®n telef¨®nica de 20 minutos, aunque Trump no se lo tuvo en cuenta y se volvi¨® a deshacer en elogios sobre el pol¨ªtico tory en la rueda de prensa.

Justo lo contrario de lo que hizo con los dos personajes que m¨¢s beligerancia han mostrado contra la visita del dignatario estadounidense: el alcalde de Londres, Sadiq Khan, y el l¨ªder laborista Jeremy Corbyn. Defini¨® a ambos como ¡°fuerzas negativas¡± y desvel¨® que hab¨ªa rechazado la petici¨®n de Corbyn de mantener una reuni¨®n durante su visita. El Partido Laborista confirm¨® poco despu¨¦s en un comunicado que su l¨ªder hab¨ªa realizado la solicitud.

Huawei en la agenda

Trump tra¨ªa en la agenda sus ideas sobre el Brexit y un asunto delicado en la relaci¨®n entre Londres y Washington: el Gobierno estadounidense ha mostrado su malestar por la decisi¨®n de Theresa May ¡ªuna de las ¨²ltimas al frente del Gobierno¡ª de permitir al gigante tecnol¨®gico Huawei participar en parte de las nuevas infraestructuras de la tecnolog¨ªa 5G en el Reino Unido. Estados Unidos ha vetado la actividad de esa compa?¨ªa, como parte de la disputa que mantiene con China. Fuentes de Downing Street aseguraron que no se presentaron disculpas a Trump por esta decisi¨®n, y el propio presidente quiso quitar hierro al conflicto. ¡°Llegaremos a un acuerdo respecto a Huawei y a todo lo dem¨¢s¡±, ha dicho. ¡°Nuestros servicios de inteligencia tienen una relaci¨®n estupenda y seremos capaces de resolver nuestras diferencias¡±.

La log¨ªstica desplegada en Londres durante la visita de Estado ha evitado en todo momento que Trump pisara la calle, y ha desviado recorridos para vadear las protestas contra su presencia. Por eso los miles de manifestantes que expresaron este martes su malestar con el trato dado al pol¨ªtico estadounidense, no fueron, seg¨²n ¨¦l, m¨¢s que ¡°un peque?o grupo de gente puesto all¨ª por motivos pol¨ªticos¡±. Una vez m¨¢s, se trataba de ¡°falsas noticias¡± frente a la realidad que ¨¦l hab¨ªa visto y que describi¨®: ¡°Miles de personas agitando banderas estadounidenses y brit¨¢nicas a su llegada al Palacio de Buckingham, en una clara muestra de amor¡±.

Es cierto que, como es habitual en estas visitas, las banderas de ambos pa¨ªses ondearon por las calles, pero en los alrededores del palacio lo que abundaba desde el lunes eran los habituales turistas.

Separados por el refer¨¦ndum, unidos contra el republicano

El l¨ªder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, no acudi¨® a la ¨²ltima y masiva manifestaci¨®n contra el Brexit que recorri¨® las calles de Londres. No estaba a gusto entre tanta petici¨®n de un segundo refer¨¦ndum. Este martes, sin embargo, se le ha visto a gusto en el acto de protesta contra Donald Trump, y recibi¨® los aplausos que ¨²ltimamente ya no o¨ªa a menudo. ¡°A nuestros visitantes ¡ªnunca se refiri¨® por su nombre al matrimonio Trump¡ª les digo que piensen en ello. El racismo divide, la explotaci¨®n de las minor¨ªas divide, trae odio y rechazo, y crea un lugar horrible para que la gente pueda habitarlo¡±, ha clamado Corbyn.

Su discurso se ha ajustado como un guante al ambiente heterog¨¦neo de una concentraci¨®n en la que el pegamento que un¨ªa a grupos distintos era el rechazo al presidente estadounidense. ¡°Racista, mis¨®gino, ignorante, se?or de la guerra¡±, los mismos adjetivos se repet¨ªan en pancartas y discursos.

Desde las 10 de la ma?ana (11.00 en la Espa?a peninsular), en la plaza de Trafalgar se comenzaron a concentrar los manifestantes. Los Trabajadores Socialistas del Reino Unido repart¨ªan folletos y carteles en su carpa. Un grupo feminista recorr¨ªa en silencio el espacio que va desde la estatua del almirante Nelson a la Galer¨ªa Nacional, ataviadas con t¨²nicas escarlatas y tocas blancas, como los personajes de El cuento de la criada, de Margaret Atwood. "Trump representa hoy la mayor amenaza contra las mujeres y contra sus derechos", explicaba la mujer que marcaba el paso al resto. Ense?aba a las c¨¢maras un cartel con un texto extra¨ªdo de la novela: "Nada cambia instant¨¢neamente: en una ba?era que se calienta poco a poco, morir¨¢s hervido antes de que te des cuenta".

A pocos metros, un enorme robot caricatura de Trump, sentado en un inodoro ba?ado en oro, emit¨ªa de modo regular sonoras flatulencias. Y desde arriba, en un arriesgado equilibrio sobre las cabezas de los leones de bronce que flanquean al almirante, chavales con indumentaria punk ondeaban banderas de la Uni¨®n Europea y alg¨²n otro cartel con el mensaje ¡°Stop Brexit¡±.

Aunque del Brexit se habl¨® poco, y de refil¨®n. Solo surg¨ªan los abucheos cuando desde los altavoces se mencionaban a los amigos brit¨¢nicos de Trump: Boris Johnson y Nigel Farage.

Los organizadores del evento, que lo bautizaron como "El Carnaval de la Resistencia¡±, hab¨ªan anunciado la presencia de hasta 75.000 personas en las calles de Londres. No hubo cifras oficiales, pero la realidad oscil¨® m¨¢s pr¨®xima a entre 5.000 y 10.000. El tiempo no ayud¨®. El calor de primavera de los ¨²ltimos d¨ªas cambi¨® este martes a un clima lluvioso y destemplado. La primera parada, en la avenida de Whitehall, estaba lo suficientemente alejada de Downing Street como para no perturbar el encuentro entre Trump y May, a esas mismas horas. La segunda parada fue frente a un Parlamento al que el Brexit ha dejado exhausto y sin actividad. Entre uno y otro punto, vendedores de papel higi¨¦nico con el rostro de Donald Trump hicieron su agosto.