La vida sigue, pero El Paso se resiste a olvidar

La fuerza del escorpi¨®n, la mascota del instituto Horizon, que se yergue imponente en el desierto a las afueras de El Paso, acompa?aba este lunes a los alumnos en su regreso a las aulas despu¨¦s de la matanza. Tendr¨¢n que aprender a vivir con una ausencia, la de Javier Rodr¨ªguez, 15 a?os, jugador del equipo de f¨²tbol, a quien muchos recordaban por un aparatoso flequillo, cuyo segundo a?o en el centro se vio truncado por una desdichada visita al Walmart. Por la megafon¨ªa, en los pasillos del instituto, se anunciaba una vigilia por la tarde para recordar al chico, que estudi¨® toda su vida en el distrito. Carteles luminosos recuerdan su nombre en la autopista.

Los psic¨®logos atend¨ªan a los amigos del muchacho. Y a todos aquellos j¨®venes del centro, con un 83% de hispanos, que no alcanzaban a comprender por qu¨¦ alguien condujo nueve horas para matar a quienes ten¨ªan su mismo color de piel. ¡°Es incomprensible que alguien de fuera de la ciudad venga a matarnos simplemente por qui¨¦nes somos. Que haga eso por el color de nuestra piel. Javier no eligi¨® el color de su piel, ninguno de nosotros lo hicimos¡±, lamentaba el superintendente del distrito escolar, Juan Mart¨ªnez.

En otro distrito, el de Socorro, los alumnos acudieron a las clases vestidos de blanco en recuerdo de las v¨ªctimas. La vida sigue, pero en El Paso nadie quiere olvidar.

En las escuelas, en las calles, la normalidad buscaba abrirse paso en una ciudad conmocionada el primer d¨ªa laborable tras la matanza. Pero en el Walmart el tiempo segu¨ªa detenido en el s¨¢bado. Los mismos coches de quienes compraban la fat¨ªdica ma?ana segu¨ªan estacionados en el extenso aparcamiento, que permanec¨ªa acordonado. Los cad¨¢veres que yac¨ªan en el interior no fueron sacados hasta el domingo por la tarde.

La actividad sigue siendo fren¨¦tica en los dos hospitales que atienden a los heridos, dos de los cuales fallecieron este lunes, elevando la cifra de muertes a 22. El colegio cercano al complejo comercial donde se improvis¨® el centro de atenci¨®n a las familias ya no registra la tensi¨®n del fin de semana, cuando se pusieron perros para jugar con los ni?os, mientras los padres buscaban ansiosos respuestas que tardaban en llegar. Mientras, en Dayton, Ohio, las nueve v¨ªctimas mortales del tiroteo del domingo fueron identificadas el mismo d¨ªa, en El Paso este lunes no se ha publicado a¨²n oficialmente la lista de fallecidos.