Elecciones primarias en Argentina: las claves de unos comicios sin ganadores

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Las elecciones primarias de este 11 de agosto en Argentina son una excepci¨®n planetaria. Todos los precandidatos a presidente, una docena, no tienen rivales en su mismo partido y bastar¨¢ con que superen el 1,5% de los votos para poder competir en las generales de octubre. La contienda, sin embargo, se vive como una batalla crucial en la carrera por la presidencia, casi tan importante como la elecci¨®n definitiva. ?Por qu¨¦ sucede esto? EL PA?S responde a esta y otras preguntas clave de la jornada del domingo:

?Por qu¨¦ se crearon las PASO?

Las primarias abiertas, simult¨¢neas y obligatorias (PASO) nacieron de una derrota. En las legislativas de 2009, el gobierno de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner cay¨® en Buenos Aires ante Francisco de Narv¨¢ez, un candidato pr¨¢cticamente desconocido y sin estructura partidaria. La candidatura de Narv¨¢ez surgi¨® de un acuerdo de dirigentes y no de partidos. N¨¦stor Kirchner, el derrotado, impuls¨® un mecanismo que unificase la forma de elecci¨®n de candidatos. Debido a la crisis de partidos heredada de la debacle de 2001, se decidi¨® que lo mejor ser¨ªa que la decisi¨®n final la tuviesen los votantes. La ley sum¨® apoyos en todo el arco pol¨ªtico.

?Qu¨¦ dice la ley que regula las PASO?

La nueva norma estableci¨® que los candidatos de cada partido se deciden con el voto obligatorio de todo el censo electoral, sin importar las afiliaciones pol¨ªticas. Como el sistema establece un piso de 1,5% de los votos nacionales para continuar en carrera, se favorece la formaci¨®n de alianzas electorales. La candidatura de Mauricio Macri fue fruto de una de esas alianzas, entre un partido nuevo, el PRO, limitado a la ciudad de Buenos Aires, y otro centenario y con estructura nacional, la Uni¨®n C¨ªvica Radical (UCR).

?Por qu¨¦ ahora se considera a las PASO un sondeo nacional, m¨¢s que una elecci¨®n primaria?

Porque han sido contadas las veces que los partidos o alianzas presentaron m¨¢s de un precandidato para un mismo cargo, en especial para presidente. Sin rivales internos, los aspirantes compiten contra sus pares de otras agrupaciones y miden en las PASO su poder de fuego antes de las generales. De los resultados del 11 de agosto surgir¨¢n las estrategias de campa?a de cara a las generales del 27 de octubre. Las primarias, sin embargo, tienen a¨²n sentido para el caso de precandidatos a senadores, diputados y, sobre todo, concejales comunales, donde la competencia interna es m¨¢s amplia.

?Qu¨¦ son las boletas cortas y las boletas largas?

El sistema electoral argentino no es de papeleta ¨²nica sino partidaria. Cada agrupaci¨®n tiene la suya, con los aspirantes propios a cada cargo en disputa. Se le llama boleta o papeleta corta a aquella que solo incluye, por ejemplo, candidatos a diputados o senadores y no a presidente. El elector puede tomar esa papeleta para diputados y cortar su candidato a presidente de la papeleta de otro partido. La llamada boleta larga, en cambio, incluye toda la lista de candidatos posibles, desde presidente hasta concejales, siempre de un mismo partido. Las boletas cortas son las preferidas por aquellos gobernadores de provincia que no quieren que sus candidatos locales se vean afectados por la imagen negativa de los aspirantes presidenciales nacionales.

?Por qu¨¦ el kirchnerismo puso en duda la transparencia del escrutinio provisorio?

El Frente de Todos, que lleva en su boleta a Alberto Fern¨¢ndez y Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, pidi¨® la anulaci¨®n del conteo con el argumento de que no confiaba en la idoneidad de la empresa contratada por el macrismo para ese trabajo, la estadounidense Smartmatic. Hasta esta elecci¨®n, el traslado de los telegramas con los resultados de cada mesa fue f¨ªsico, pero la nueva compa?¨ªa ofreci¨® como novedad el escaneo de esos mismos telegramas y su env¨ªo por v¨ªa digital a los centros de c¨®mputos. El kirchnerismo denunci¨® ante la justicia que el escaneo no garantiza que una mano negra se interponga durante el viaje digital y altere los resultados para sembrar dudas entre los votantes.

?La justicia electoral acept¨® el reclamo opositor?

No, pero resolvi¨® que todos los pasos del proceso sean monitoreados por veedores judiciales, bajo su control. El resultado final de las elecciones, con todo, ser¨¢ responsabilidad de la justicia, que durante los d¨ªas que siguen a la votaci¨®n contar¨¢ una por una las papeletas que recibir¨¢ con los datos de cada mesa. Sobre la confiabilidad de esos resultados definitivos no ha habido objeciones.